sábado, marzo 26, 2005

CONCEPTOS DE LA VIRTUD

El trabajo que contiene el presente Tema, lleva como base principal los conceptos Filosóficos, que se tienen acerca de la VIRTUD, circunstancia que nos obliga a considerarlo digno de un detenido estudio, en relación a los preceptos Morales que contiene, y que encontramos en los Rituales Masónicos, cuyo dogma nos enseña infinidad de principios, que sirven de norma a las cualidades humanas, mismas que deben definirse, de conformidad con la conducta del hombre, dentro del seno de la Sociedad; por eso consideramos a la VIRTUD, como una prenda simbólica de suma PERFECCIÓN, en cuyo caso, viene siendo el prototipo del ideal que se reclama y se exige, para estudiar y comprender los preceptos Masónicos.

Por lo tanto, es precisamente la VIRTUD, una de las cualidades que se requieren, para que sea admitido a iniciación el candidato, y que además, existan los antecedentes de que sea LIBRE PENSADOR, que tenga VOLUNTAD PROPIA, así como que sepa demostrar una DISCRECIÓN ABSOLUTA.

Estos tres preceptos de la Etica Masónica, constituyen las principales condiciones que nuestra Institución requiere para franquear sus puertas a los Profanos que deseen participar de las enseñanzas impartidas por gran número de Hombres INDEPENDIENTES que forman la Logia, puesto que es precisamente en ese recinto en donde de una manera leal y sincera, se adquieren los conocimientos que llevan al hombre, hasta lograr la práctica de las VIRTUDES SOCIALES.

En consecuencia el iniciado, desde el momento en que se le proclama entre Columnas, aprende a ahondar pozos sin fondo a sus bajas pasiones, y a construir poderosos y fuertes Templos dedicados a la VIRTUD, pues es así como los antiguos Romanos consideraban y veneraban a la verdadera VIRTUD a la que concedieron a su vez, la particularidad de ser el símbolo del VALOR, en este caso, la representaban por medio de una Bellísima Joven cubierta con una túnica corta, llevando en la mano derecha una Espada y en la izquierda una Lanza, toda esta alegoría, demostraba también la adoración a lo GRANDE, a lo BELLO y a lo FUERTE, como virtudes propias que debía practicar el Pueblo Romano, aunque algunos Autores la hacen representativa del SILENCIO, como una cualidad que se imponía por medio del CONVENCIMIENTO o de la FUERZA.

Consecuentemente estas últimas explicaciones, contrastan con las que manera consciente, se tienen de las VIRTUDES que se enseñaban en la Teología de San Pablo, mismas que se refieren a la FE, a la ESPERANZA y a la CARIDAD, lo que indica de una manera elocuente, que estas cualidades eran desconocidas por los antiguos Romanos, sin embargo, la Etica Masónica ha admitido todas las enseñanzas, pero en forma únicamente COMPARATIVA como el símbolo de la Moral en relación a la Contemporánea, ya que dichas frases, se encuentran grabadas en la Escala Alegórica de Jacob.

También debemos tomar muy en cuenta, que el Masón que no acepta a las VIRTUDES, como una norma de su conducta, que no propaga sus tendencias Morales, y que no hace de ellas el único y firme apoyo de su vida INTIMA, PRIVADA y SOCIAL, y que además, guiado por ese hecho, se separa de su estricta y rígida observancia, desde ese momento demuestra que ABANDONA SU MISIÓN, y deja de cumplir con los Sagrados Principios, que JURO PROPAGAR ante el ARA.

Sin embargo, esa es la razón por la que existen Espíritus de hombres con inteligencias VULGARES y por lo mismo, no les es dado COMPRENDER la importancia que contiene el estudio de los preceptos Morales, puesto que, al observar esa actitud, se apartan de la Senda Positiva, que los conduce hacia la verdadera VIRTUD.

Ahora bien, para entrar en materia, vamos a definir el significado Filosófico y el origen de la palabra VIRTUD; y vemos que viene de la Lengua Latina "VIRTUS-UTEM", voz que se interpreta como la Actividad, la Capacidad o el Poder de todas las cosas y sus causas, para manifestarse a la vista o para producir determinados efectos; es la Actividad o la Eficacia que se demuestran en cualquiera acción tendiente a conservar o restablecer a la Salud; indica también, a los factores que proporcionan la Fuerza, el Valor y el Vigor propios del hombre potente y de Criterio Firme; es la Potestad, el Poder o la Facultad intelectual, para ejecutar a conciencia, las obras humanas; es asimismo, la Rectitud, la Integridad y la Probidad, que determina a la BONDAD DE VIDA; igualmente significa, la disposición, el Hábito y la Costumbre del individuo para llevar a cabo siempre, Buenas Acciones o ejecutar buenas obras; es la consumación de los actos, con estricta sujeción a los más sanos razonamientos, o bien tomando en cuenta el mejor proceder de la conciencia humana; es también el firme propósito del hombre para oponerse a los VICIOS o las Bajas pasiones.

Por otra parte, se nos presentan las VIRTUDES SOCIALES, como factores indispensables, para llegar a interpretar de manera sensible, a las CIENCIAS DE LAS COSTUMBRES, por lo tanto, nos vamos a referir enseguida a la VIRTUD MORAL, a la VIRTUD TEOLOGAL y a la VIRTUD SOBRENATURAL.

En consecuencia principaremos por conocer la definición etimologica admitida en Filosofía, para el fin de darnos una idea, de lo que podemos entender por VIRTUD MORAL, y desde luego nos damos cuenta de que efectivamente es un factor que se refiere exclusivamente a las Costumbres Humanas, por lo tanto, es lo que constituye al hábito que permite al hombre obrar siempre bien en todos sus actos que le marcan sus deberes, de conformidad con la Ley o sus Reglamentos, lo que indica de manera precisa, que la persona que obra de acuerdo con la práctica de esta VIRTUD, lo hace guiada por una Bondad o por una Nobleza, que le dicta su consciencia, pero con sujeción a la RAZÓN NATURAL; aunque eso no quiere decir, que deja de cumplir con las responsabilidades contraídas ante la Sociedad; lo que indica también, que esa persona bien puede aplicar, su amplio criterio, para interpretar justamente el contenido de las Leyes, sin necesidad de recurrir a los DOS EXTREMOS, que por lo regular, resultan desastrosos e INJUSTOS; lo que puede confirmarse, analizando los perjuicios ocasionados al dictar cualquier fallo con el apego a la MAXIMA o a la MINIMA expresión de los Códigos o sus Reglamentos, lo que se resuelve de manera consciente, al aplicar con absoluta IMPARCIALIDAD todos los preceptos legales, mediante el ejercicio más puro de los RAZONAMIENTOS que conducen hacia la VERDADERA EQUIDAD.

Por lo que respecta a la VIRTUD CARDINAL, es lo que pudiéramos distinguir, por medio de los sentimientos nacidos del Corazón, para poder observar una Conducta Real, Positiva y Consciente en el hombre de Espíritu Noble, para el fin de que pueda hacer uso libre de sus pensamientos, para que inicie sus actos en forma razonable, y para que ejecute sus obras con resultados imperecederos, pero sin olvidar que sus actividades deben llevar como norma, la estricta sujeción a los dictados que le demandan la PRUDENCIA, la JUSTICIA, la FORTALEZA y la TEMPLANZA, cuyos elevados principios, dan también origen a un cúmulo de cualidades propias del individuo de reconocida NOBLEZA, lo que quiere decir, que todo individuo que se guía por los sentimientos emanados de su conciencia, para juzgar sus propios actos, y para resolver los problemas que preocupan a sus semejantes, es indudable que se distinguirá siempre por su BONDAD o por su MAGNANIMIDAD, haciéndose estimar y respetar por la Sociedad en que vive.

Enseguida, veremos en qué consiste la definición de lo que es la VIRTUD TEOLOGAL, y desde luego se nos viene a la memoria su origen, que en la lengua Griega, en su voz "THEOS", que significa Dios, lo que indica que fue inventada e impuesta, a nombre del Ser Supremo, a quien se atribuyen las palabras de "FE", "ESPERANZA" y "CARIDAD", como otras tantas VIRTUDES o cualidades propias de la Religión Cristiana, mismas que deben practicar con devoción todos sus adeptos, en forma consciente y fuera de toda hipocresía, sin embargo, sus preceptos están considerados Filosóficamente, como una de las Tres más bellas VIRTUDES, tomando en consideración que, quienes guían sus actos con toda FE, los que abrigan una esperanza con todo fervor, y los que con nobleza y altruismo, practican la CARIDAD, desde luego que se hacen merecedores a toda clase de consideraciones, de distinciones y de honores, captándose el aprecio y el agradecimiento de la Sociedad.

Ahora bien, tratándose de la VIRTUD SOBRENATURAL, que en sí nos da la idea de ir en contra de los fenómenos o de las Obras de la propia Naturaleza, es lo que constituye, en todos los sentidos un definido y elocuente SACRIFICIO Moral y Material, para el hombre, tomando en cuenta que el esfuerzo que se desarrolla, corresponde a un acto sumamente DIFICIL de llevar a la practica, en forma completamente desinteresada, y con la sola convicción de SERVIR a nuestros semejantes, ya que esas acciones se ejecutan en forma completamente INCONDICIONAL y con absoluta ABNEGACIÓN o en otras palabras, esta VIRTUD también consiste en hacer precisamente un Supremo ESFUERZO para adquirir el acopio de VOLULNTAD, que a su vez nos proporcione la suficiente POTENCIA, para renunciar a todos nuestros intereses particulares, y poder afrontar cualquier situación, con TEMERIDAD, con OSADÍA o con HEROISMO, tratando de sobreponerse a las imponentes FUERZAS o FENOMENOS propios de la Naturaleza.

Hasta aquí, hemos logrado saber en términos generales, la definición Científica y Filosófica profanas sobre lo que es la VIRTUD; ahora nos resta establecer los preceptos Dogmáticos y Ritualísticos, estipulados por la Ortodoxia Masónica, en relación con dicha cualidad, consecuentemente, vamos a determinar sus lineamientos y sus principios, en forma clara y sencilla, tal cual hemos estudiado, dentro del recinto de nuestros Templos.

Efectivamente, en este campo de acción, es donde se tienen los más elevados conceptos, donde se enseñan los principios y donde se practican los más encumbrados conocimientos sobre lo que es la VIRTUD; y desde luego, cabe decir que nosotros la interpretamos como ejercicio más amplio que se hace de la Razón, para lograr el PERFECCIONAMIENTO HUMANO; lo que bien puede conseguirse, mediante el DESPOJO de la envoltura Material Simbólica que nos OPRIME, que nos APLASTA, o con el ESFUERZO de la VOLUNTAD PROPIA, que nos permite dominar las bajas pasiones.

Además de que no debemos olvidar que para que exista esta cualidad Moral, debe haber lucha entre el BIEN y el MAL, entre la RAZON y la JUSTICIA, pero sin llegar a confundir a la VIRTUD con la HONRADEZ, ni con la BENEVOLENCIA, mucho menos con la APATIA; pues debemos tomar en consideración que el primero de estos factores, puede manifestarse en los INDOLENTES, el segundo en ocasiones lo encontramos en los Individuos de carácter DEBIL y el tercero, puede conducir al hombre hasta caer en los más deplorables VICIOS; razonamientos que claramente indican que ningún INDOLENTE, que ningún DEBIL, ni mucho menos un VICIOSO, puede llegar a practicar la VIRTUD, y menos tratándose de los aspectos admitidos por la ETICA MASONICA.

Por esa razón, y atendiendo a lo que determinan esos indiscutibles conceptos, resulta que la VIRTUD, en todas sus acepciones, es lo que constituye a la SALUD, a la FUERZA y a la BELLEZA del Alma, al igual que puede comparársele con el hábito, con la inclinación y con la disposición de la Conciencia Humana, para PENSAR, para EJERCER, para OBRAR con justicia durante nuestros actos de la Vida Social, siempre que haya necesidad de aplicar el Criterio de conformidad con los más Sanos, Imparciales y Equitativos RAZONAMIENTOS.

Por lo tanto, cualquiera actividad del hombre, que se apoye firmemente en esos inmutables principios o agentes sublimes que sostienen a la VIRTUD, como un faro luminoso para la existencia humana; desde luego que hay que considerarlos muy SUPERIORES, a los actos que proceden únicamente de la SANA MORAL, lo que indudablemente queda demostrado con el hecho de que si la MORAL SOCIAL, consiste en no ejecutar malas acciones, y en retribuir o premiar al bien que se nos proporcione, por agradecimiento al FAVOR RECIBIDO, en cambio, todo precepto que tenga como base a la VIRTUD, lleva una única finalidad, la de conseguir un BENEFICIO para nuestros semejantes, sin más ambición que la de ejercitar el BIEN, como una ayuda para el prójimo; acto que debe ejecutarse, aun a costa del más grande sacrificio Moral y Material o con peligro de la propia existencia; pero todavía podemos extendernos un poco más, al asegurar que el Hombre VIRTUOSO, siempre procurará el bienestar o la tranquilidad de quienes le hayan perjudicado o causado algún MAL, tomando en cuenta que para él, no existen RENCORES, ENEMISTADES ni venganzas en contra de las personas cuya maldad sea manifiesta en todos sus actos.

Ahora bien, si tenemos en consideración todos esos razonamientos, en el sentido Ético Masónico, queda demostrado que la MORAL PUBLICA, en ocasiones se manifiesta como una inclinación EGOISTA; aunque de todas maneras, resulta que a nadie perjudica, y en cambio, beneficia a todos los que reciben sus favores; por lo tanto podemos también juzgarla, como un EGOISMO SANO; pero sin embargo, no hay más que reconocer, que para nosotros, la VIRTUD siempre constituirá la esencia de una cualidad EMINENTEMENTE ALTRUISTA.

Por otra parte, si tratamos de demostrar que existe la verdadera VIRTUD en el hombre que posee cierta preparación educativa, resulta que ese hecho lo elevaría irremisiblemente a la calidad de un INDIVIDUO PERFECTO, sea en el sentido MORAL, en el orden MATERIAL o en el ambiente INTELECTUAL; lo que quiere decir que esas Tres Cualidades deben encontrarse en igualdad de circunstancia para todo hombre de bien, cosa que hasta la fecha, no ha sido posible lograr para conseguir una adecuada orientación dentro de la Conciencia humana; y es precisamente, porque en cada persona existen diferentes medios de vida, distintos sistemas de EDUCACIÓN y determinadas costumbres, que la mayoría de las veces influyen de conformidad con el influjo de los diferente USOS que de hecho dan origen a la MORAL, que se impone a las distintas Clases, Escalas o Sectores Sociales.

Pero aun así, tenemos la seguridad de que jamás se nos podrá negar que la VIRTUD perfecciona un tanto a los USOS y a las COSTUMBRES Humanas, cuando se propaga como una materia de Educación Cívica entre los pueblos, ya que sus enseñanzas consisten en saber aplicar el ejercicio más amplio que aconseja el Criterio, para encontrar la RAZON, y ponerla en practica en toda su magnitud, de conformidad con la Conciencia, misma que la mayoría de las veces, obliga a obedecer a los dictados de una VOLUNTAD FIRME Y PURA.

Por ese motivo debemos también, que solamente entre las personas que poseen una ALMA NOBLE y FUERTE, es en donde indudablemente se alberga la VIRTUD, y en donde se puede encontrar algo de PERFECCIONAMIENTO, aunque siempre será adecuado a la Categoría, al talento o la Ilustración del individuo, puesto que es seguro que en su mente lleva la convicción de que puede cumplir con los Postulados Sociales, que le demandan sus deberes para con la familia, para con su raza y para con todos sus Semejantes.

Tampoco podemos negar que la grandeza del Alma de un hombre VIRTUOSO, aumenta en proporción con el IMPETU de la pasión que está obligando a DOMINAR; por lo tanto, no cabe duda que ese hecho da el suficiente aliento al hábito o a la costumbre de subyugar a su VOLUNTAD, para poder apartarse de ciertas prácticas insanas, lo que indudablemente tiende a enaltecer a las Conciencias de las personas cuya magnanimidad o su nobleza la han adquirido, para aprender a SERVIR a sus semejantes, sin más Interés que la SATISFACCION DEL DEBER CUMPLIDO.

En consecuencia, no hay más que reconocer y tener la seguridad, de que ninguna PASION MORAL o MATERIAL que se SATISFAGA, nos puede proporcionar vanaglorias, ni placeres tan PUROS y DURADEROS como el Orgullo inefable que sentimos al saber que hemos RECONOCIDO y CORREGIDO a nuestros propios ERRORES o DEFECTOS, haciendo uso de nuestro Libre Albedrío, puesto que nos fortalece la personalidad adquirida y nos proporciona la suficiente VOLUNTAD para VENCERSE A SI MISMO.

Igual cosa experimentamos, cuando con todo el desinterés personal y con la entereza que se requiere para alcanzar la realización de determinados anhelos, preferimos renunciar al bien que se recibe, o a los honores que nos corresponden, con tal de lograr la felicidad de algún Ser desamparado, o bien cuando se trata del hecho de SALVAR AL MAS DEBIL EN CONTRA DEL MAS FUERTE.

Todas estas VIRTUDES, propias del ambiente Masónico, son las que de manera sincera debemos aprender; para conservarlas y propagarlas, ante los ojos del Mundo Profano, puesto que su sola observancia conquista a las VOLUNTADES de los hombres de BIEN, o de reconocida moralidad, la que sin duda, será siempre reconocida dentro del ambiente en que vive; por lo tanto, ésta es, en síntesis, la verdadera labor que el Masón debe desarrollar, en cualquier ambiente, situación o circunstancia que se encuentre, siempre que haya logrado COMPRENDER cuales son sus DEBERES para consigo mismo, para con sus Semejantes y para con el Ser Supremo.

Por esa razón, cada paso que se adelante sobre esa Senda de las VIRTUDES, cada obra que se lleve a cabo para afianzar los PRECEPTOS que nos señalan estas sublimes Cualidades, como enseñanzas SALVADORAS de la Humanidad; es indudable que nos acercan cada día más hacia la COMPRENSIÓN, hacia la FELICIDAD y hacia el PERFECCIONAMIENTO individual, en consecuencia, no nos es permitido retroceder, al tratar de ALCANZAR LA CIMA, en el cumplimiento a nuestra Sagrada Misión, puesto que, cada paso que se dé en sentido contrario, irremisiblemente que nos conducirá por el camino de los VICIOS colectivos, en dirección de las Miserias de los Pueblos, para ocasionar la RUINA MAS COMPLETA de la Humanidad entera.

Para terminar, sólo nos resta establecer que éstos son los CONCEPTOS que la Filosofía Masónica define acerca de las VIRTUDES HUMANAS, cuya práctica, como ya se dijo antes, es muy DIFICIL de llevar adelante, si no se poseen las DOTES de Moralidad, de las Buenas Costumbres y de una EDUCACIÓN ESMERADA.

MI RESPUESTA A UN ATEO INTRANSIGENTE

ATEO: “Que niega la existencia de Dios ". Diccionario Enciclopédico Ilustrado tomo 1 Pág. 294

Hace ya varios años, que, conversando con un amigo, llegamos en nuestra conversación a tratar el tema de la religión, cortante me contesto: " Mira, yo no tengo religión alguna, yo no creo en Dios ", bueno no tienes religión ni crees en Dios, pero eso no impide que tratemos sobre el tema, ¿que te parece?, no yo no creo en Dios, no creo que nos hiciera de la nada y menos que después de la muerte tengamos que ir a otro mundo a seguir sufriendo, aquí termina nuestra existencia, se despidió y me quede triste con mis pensamientos, que comparto con vosotros mis hermanos.

Buscando entre los libros, en la biblioteca, encontré el Manual del Ateo (La Biblia del Ateo), editado por el Instituto de Ciencias de Moscú en 1961, el cual dice en una de sus paginas que: " Cuando un ateo muere asegura a la familia que los muertos están muertos para siempre, que no hay consuelo para sus deudos, que los que ahora están separados nunca mas serán reunidos, que DIOS no existe y que no hay vida después de la muerte”. El primer propósito de este libro es demostrar que no hay Dios. (Oración fúnebre en la Biblia del ateo), pero escriben su nombre con letras mayúsculas, DIOS.

Los ateos dicen que no hay Dios y que la vida en la Tierra nació en forma espontánea, que se desarrolló por medio de selección natural y que durante la cruel lucha por la supervivencia solo los animales que eran más fuertes o más rápidos que sus vecinos sobrevivieron, mientras que los más débiles perecieron.

Con el perdón de los ateos les diré: ¿Como es que sobrevivieron las ovejas? ¿Como es que no fueron destruidas por los lobos? La loba produce cinco o seis crías por año, la oveja solo una. La relación es de una a cinco para el destructor que tiene dientes afilados, garras, fuerza y rapidez de movimientos.

La oveja no tiene ninguna defensa, ¿Como es que todavía hay ovejas? Hoy día el hombre las protege, el mundo animal existía antes del hombre, ¿Quien protegía entonces a las ovejas? Muchas cosas podemos explicar si recurrir a la hipótesis de la existencia de Dios. Pero las ovejas con sus cuatro patas no pudieron existir sin El. A los ateos les seria suficiente alzar la vista al cielo para contemplar lo inmenso del universo, y decirse esta pregunta: ¿Tanta belleza surgió de la nada?

Para ellos tengo este pensamiento: Imagínense un cuarto en completa oscuridad y otro alumbrado por una vela, separados por una cortina. Si retiramos la cortina no es la oscuridad la que prevalece. La oscuridad no puede vencer a la luz de la vela porque no es energía...... Es ausencia de luz, solo la luz de la vela siendo energía puede triunfar. Así que el cuarto oscuro se hace visible, transformado por la luz de la vela. Así como también la luz de Dios puede iluminar los corazones de los hombres buenos.

Puedo tomarme esta aptitud, porque un yunque no teme los golpes de muchos martillos. En Paris hay un monumento a los Hugonotes que representa un numero de martillos rotos con la inscripción: " DESCARTAD LOS MARTILLOS, BANDAS HOSTILES, VUESTROS MARTILLOS SE ROMPEN, EL YUNQUE DE DIOS PREVALECE”.

Feberbach dijo: " Es tan claro como el sol y evidente como el día que Dios no existe, y aun mas, que Dios no puede existir”. No somos nosotros los que afirmamos que El existe, sino los ateos. Si la no existencia de Dios es tan clara como el sol, ¿Como es que la humanidad (sin excepción) reconoce la existencia del sol pero no se adhiere en su totalidad a la afirmación de Feberbach de que Dios no existe?

Los ateos actúan a veces como en este cuento: Una vez un tonto fue enviado a comprar sal y harina llevando un plato para traerlo, se le recomendó que no mezclara los ingredientes y traerlos separados.

Cuando el tendero le puso la sal el tonto pensando en las instrucciones volteo el plato para que pusieran la harina, con esto perdió la sal. Cuando llego ante su amo le presento la harina, y el amo le pregunto que donde estaba la sal, el tonto volteo el plato para enseñarle la sal y perdió la harina. Ellos tienen la harina porque al criticar a Dios perdieron la sal, y al final se quedan sin la harina cuando tienen que dar explicaciones al negar su existencia.

Es orgullo del verdadero creyente en Dios, tener la sal y la harina, sin mezclarla ni perderla y dando siempre razones poderosas de su existencia.

Y por ultimo hermanos:

Si el Gran Arquitecto del Universo permite la existencia de los ateos....... ¿Quien soy yo para prohibirlo?

Fraternalmente

Luis Muñoz Lamoneda - M.·. M.·. - Gº 18
28/09/04 E.·.V.·.

LOS GUANTES

Prenda que se utiliza para proteger o abrigar las manos o como complemento del vestido. Se cree que la utilización de los guantes procede de los tiempos prehistóricos, los primeros ejemplos aparecieron en una tumba real egipcia de alrededor de 1350 a. C., Los autores griegos Homero y Jenofonte mencionaron los guantes en sus textos. Los griegos y romanos, que vivían en climas relativamente templados, los utilizaron para proteger las manos cuando hacían trabajos pesados. Alrededor de los siglos VIII y IX ya se utilizaban en las Islas Británicas, Alemania y Escandinavia.

En la edad media los monarcas, nobles y altos cargos eclesiásticos llevaban guantes ricamente bordados y enjoyados. Estos guantes formaron también parte de la indumentaria papal. Para la caza y la guerra se empleaban guantes de hierro o guanteletes. Los guantes ornamentales hasta el codo se pusieron de moda en el siglo XIII entre las mujeres. estas prendas adquirieron una importancia simbólica como prueba de buena fe, a la hora de realizar un contrato solía entregarse un guante doblado. También se lanzaba uno contra otra persona cuando se la quería retar a un duelo y se recogía como señal de aceptación.

Un guante de mujer se entregaba con mucha frecuencia como presente de amor. Durante los siglos XVI, XVII y XVIII los hombres y mujeres elegantes llevaban guantes de seda, terciopelo, hilo, encaje o piel de cabritilla, bordados muchas veces con profusión. Yo los porto por razones de distinción a la que el aprendiz esta sujeto a adoptar en su vestimenta resaltando esta elegancia.

Más tarde se confeccionaron en otros tejidos, en punto e incluso de cuero. Antes era necesario su uso para ceremonias u ocasiones especiales al igual que en cada tenida, mientras que en la actualidad su uso para tales momentos ha decaído sensiblemente, incluso en la orden no es homogéneo el criterio en cuanto a su uso.

Podría hablar de diversos tipos de guantes; especiales, con fines científicos, industriales, de látex, de textura fina, de cirujanos, enfermeras, de goma que llevan algunos trabajadores; los forrados con plomo que usan los radiólogos y los recubiertos de Amianto, palabra griega que significa 'sin mancha', material que se emplea para fabricar productos ignífugos, como ropa de seguridad para bomberos, y productos aislantes como el asbesto, siglos más tarde Marco Polo advirtió de su utilidad como tela, pero los simbólicos son los que tocare en el desarrollo del presente desbastado.

La costumbre de entregar dos pares de guantes al recién iniciado, uno para sí mismo y el otro para la mujer que más respeta, tiene una larga tradición histórica. Posiblemente, su origen se remonta al siglo X. Una crónica relata que en el año 960, los monjes del Monasterio de San Alban en Maguncia, le ofrecían un par de guantes al obispo en su investidura, en la oración que se pronunciaba, se imploraba a Dios que vistiera con pureza las manos de su sirviente, al igual que en cada tenida visto simbólicamente no solo las manos, sino mi voluntad y esfuerzo.

Durandus de Mende, interpretaba los guantes como símbolo de modestia, ya que las buenas obras ejecutadas con humildad deben ser mantenidas en secreto y en el ara quedan los de mi trabajo.

En la investidura de los reyes de Francia, éstos recibían un par de guantes, tal como los obispos. Las manos ungidas y consagradas del rey, así como las de un obispo, no debían tener contacto con cosas impuras. Después de la ceremonia, el Hospitalario quemaba los guantes, para impedir que pudieran ser utilizados para usos profanos.

En el año 1322 en Ely (ciudad inglesa donde se levanta una gran catedral), el Sacristán compró guantes para los masones ocupados en la "nueva obra", y en 1456, en el Colegio Eton, se señala que cinco pares de guantes fueron entregados a los albañiles que edificaban los muros, "como era obligación por costumbre", existe un documento que precisa que en el Colegio Canterbury en Oxford, el Mayordomo anotó en sus cuentas que; "se dieron veinte peniques como glove money (dinero de guante) a todos los masones ocupados en la reconstrucción del Colegio" En 1423 en York (Inglaterra) diez pares de guantes fueron suministrados a los albañiles ("setters") con un costo total de dieciocho peniques.

En Inglaterra, en las épocas isabelina y jacobina (1558-1625) los guantes tenían un prestigio que es difícil comprender en la actualidad. Se trataba de un artículo de lujo, poseedor de mucho simbolismo, y constituían un regalo apreciado. El guante significaba entonces un profundo y recíproco vínculo entre quien lo daba y quien lo recibía.

En 1609 J. Beaulieu le comunicó a William Trumbull que "Mi señor le ha regalado 50 chelines en un par de guantes a Monseñor Marchant como retribución por haberle enviado el diseño de la escala." En el Año Nuevo de 1606 los músicos reales le obsequiaron cada uno un par de guantes perfumados al rey Jacobo I. En 1563 el Conde de Hertford, con quien la reina estaba disgustada, queriendo congraciarse con ella le escribió al Lord Robert Dudly que deseaba una reconciliación y ruega que le presente a la Reina, en su nombre, un pobre par de guantes como prenda.

Los guantes eran un regalo acostumbrado en el Año Nuevo, que a veces era sustituido por el "dinero de guante". Asimismo, los guantes constituían un obsequio tradicional de los enamorados a sus prometidas. En la obra de Shakespeare (quien era hijo de un guantero) Much Ado about Nothing (Mucho trajín por nada), el personaje femenino Hero declara "estos guantes, que el conde me envía, son un excelente perfume" (Acto III, escena 4). El payaso en The Winter's Tale (Historia de Invierno) declara: "si no estuviera enamorado de Mopsa, no debieras tomar mi dinero, pero estando encantado como estoy, estaré también esclavizado con ciertas cintas y guantes (Acto IV, escena 4). En Enrique V el rey intercambia guantes con el soldado raso Williams (Acto IV, escena 1).

Entre 1598 y 1688 en muchos documentos escoceses se menciona la entrega de guantes a los picapedreros y albañiles. Estos documentos se refieren a masones operativos, pero también respecto a los especulativos existen documentos antiquísimos. Desde 1599 existen pruebas que a cada masón en su iniciación debía entregársele un par de guantes que pagaba de su bolsillo. El documento más antiguo en esta materia es el llamado Estatuto Shaw, dirigido a la Logia Kilwinning en diciembre de 1599, donde se estipula que los derechos de iniciación en la logia sumaban 10 libras esterlinas escocesas, con 10 chelines para los guantes.

Documentos de la Logia de Melrose de los años 1674-1675 demuestran que tanto los aprendices como los compañeros tenían que pagar derechos de ingreso "con guantes suficientes para toda la compañía".

En un documento de Aberdeen en 1670 se expresa que el aprendiz debe pagar "cuatro dólares reales con un mandil de lino y un par de buenos guantes para cada uno de los hermanos". El uso del lino en vez de cuero es interesante, pero se explica por tratarse de una zona donde existían numerosas tejedurías de lino.

En 1686, Robert Plot, en The Natural History of Stafford-shire (Historia Natural del Condado de Stafford), relata que era costumbre entre los Francmasones "que cuando cualesquiera son admitidos en la Sociedad, se convoca una reunión (o Logia, como la llaman en algunas partes), que debe consistir de por lo menos 5 o 6 de los Antiguos de la Orden, a quienes los candidatos obsequian con guantes, y asimismo a sus esposas". Esta es aparentemente la primera mención del obsequio de un par de guantes a la mujer como parte de la ceremonia de iniciación.

En 1723 se publicó el documento llamado Examen de un Masón en el periódico londinense El Correo Volante, que comienza así: "Es recibido un nuevo Francmasón, después de haber entregado a todos los presentes un par de guantes para hombre y un par para mujer así como un mandil de cuero."

Posteriormente, esto se transformó en una tradición en todas las iniciaciones, y aparece en todos los rituales de iniciación franceses del siglo XVIII, aunque cabe señalar que en Inglaterra y Escocia se perdió paulatinamente la costumbre y desde comienzos del siglo XIX ya ni se menciona en las actas y reglamentos de logias.

En 1724 se menciona que logia en Dunblane entregaba un par de guantes y un mandil a sus iniciados. En 1754, en Haughfoot (Inglaterra), la logia estableció "que nadie puede entrar a la logia sin un par de guantes para cada miembro de la susodicha logia". En la primera "revelación" francesa conocida, que data de 1737, llamada Carta de Herault, se señala que el aprendiz recibe en la ceremonia de iniciación un mandil de cuero blanco, un par de guantes para sí mismo y un par de guantes para la mujer que más estima.

La tradición se mantiene viva especialmente en las logias que trabajan en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, aunque solo de uso y no de la entrega al iniciado ni a la mujer que mas estima, si bien otras logias también practican la misma costumbre es interesante mencionar que en los grados superiores del Rito Escocés se usan guantes de diversos colores, especialmente negro y verde, además del blanco, apropiados al simbolismo del grado, situación que conoceré a su tiempo por mi luz tenue.

El uso de los guantes denotan estética en el vestir pero para mi significan que cubrir las manos profanas con y del material que sea, permite sin mancha portar, aceros, báculo ara, es como arroparme del secreto que juro todos los días y que recibo como salario de los trabajos realizados en el taller, simbólicamente siempre los llevo puestos a fin de recordar las buenas obras con la practica de la virtud, portarle evitan contaminarme de los vicios, pero al mismo tiempo me permiten ser útil a mis semejantes logrando ser útil al universo.

Cubiertas las manos profanas, es la funda sin mancha cumpliendo al despojarme separar el secreto comprometido ante el ara reservándome a la discreción de lo que poseo del misterio que en mi columna “B” recibí como salario para aplicarlo fuera del templo con filantropía, humildad, prudencia, sin adulaciones, portarlos es el encierro que me permite escuchar la voz de mi conciencia y al mismo protección cuando desordenadamente tocan.

La liturgia no los cita, esa pureza de su uso permite al V.: M.: portar la espada flamígera; al igual que a mis Q.:HH.:, 1° y 2° vigilantes batir mallete con prudencia, manejar a mi Q.:H.:, secretario las plumas sobre la plancha con verdad y claridad, a mi Q.: H.:, orador hacer uso veraz y digno de la interpretación en la voz de nuestro pueblo, a mis Q.:HH.., 1° y 2° expertos empuñar aceros al igual que al G.: T.: INT.: Y EXT.:, honradez en mi Q.:H.: HOSP.: y seguridad a mi Q.:H.: M.:C.: en la traslación autoritaria del báculo a su digno cargo, esta armonía da luz a la consonancia universal de los trabajos.

Mis guantes al mediodía mantienen la blancura y a la medianoche el resplandor para portar en tribuna desbastados con filosofia. ES CUANTO.

M.: M.: LUIS EDUARDO ESPINOSA LOPEZ

ENTREVISTA CON EL SOBERANO GRAN COMENDADOR

del Supremo Consejo del Grado 33º y Último del R.E.A.A. para España
Muy Ilustre y Poderoso Soberano Gran Comendador Ramón Torres Izquierdo 33º.

Con motivo de la próxima celebración de la Asamblea General del Supremo Consejo, hemos creído de interés realizar una entrevista al Muy Ilustre y Poderoso Soberano Gran Comendador Ramón Torres Izquierdo 33º.

Zenit.- Hace seis meses que fuisteis elegido Soberano gran Comendador, ¿qué balance puede hacerse de lo realizado en este breve periodo?

Soberano Gran Comendador.- En estos últimos seis meses he detectado una gran ilusión en todos los HH., lo que nos da una gran estabilidad y nos permite construir juntos y cumplir con el objetivo de transmitir la filosofía del Supremo Consejo.

Zenit.- El desarrollo del filosofismo es el objetivo primordial del Supremo Consejo, ¿cuáles son los planes de futuro?

S.G.C. .- Los trabajos del Supremo Consejo descansan en la Gran Comisión Rectora, un órgano colegiado del que solo soy el primero entre iguales. En este momento estamos preparando un programa de trabajo para los próximos cuatro años. Este programa, que deberá ser aprobado en la próxima Asamblea, tiene, fundamentalmente, dos líneas de trabajo; una de instrucción que permita la formación los miembros de todos nuestros Cuerpos Jurisdiccionados y otra, consecuencia de la anterior, que nos permita conectar con la sociedad para intentar solucionar algunos de los problemas que la aquejan, siempre a la luz de nuestros principios masónicos.

Zenit.- ¿Consideráis, entonces, que la formación de los masones es esencial para presentar la propuesta filosófica que la Masonería puede hacer a la sociedad actual?

S.G.C. .- La instrucción masónica es fundamental. Por esta razón estamos preparando unos cuestionarios que permitan la formación de los HH., de modo que los aumentos de salario se produzcan previa demostración de sus meritos y conocimientos y no por la simple antigüedad en el grado

Zenit.- El Supremo Consejo tiene previsto celebrar en noviembre una Jornada sobre la Masonería en el siglo XXI, ¿qué esperáis de esta Jornada?

S.G.C. .- Como ya he indicado, las dos vías fundamentales de nuestro plan de trabajo son la instrucción y el saber llevar la luz masónica a la sociedad, por lo que pretendemos que la Jornada sea un lugar de encuentro y reflexión conjunta para abordar el papel que debe desempeñar la Masonería en la sociedad del siglo XXI

Zenit.- Acaba de celebrarse, con la colaboración del Supremo Consejo, un ciclo de conferencias sobre la Masonería en la Universidad Politécnica de Cartagena. El citado ciclo tuvo carga lectiva para los alumnos de la Universidad, ¿cómo puede interpretarse esta circunstancia?

S.G.C. .- En primer quiero agradecer a la Universidad Politécnica de Cartagena el haber organizado un ciclo de conferencias sobre la Masonería ya que puede ayudar a solucionar uno de los principales problemas que tiene la masonería en España y que no es mas que el profundo desconocimiento que de ella tiene la sociedad española. Explicar a la sociedad lo que somos y lo que representamos es algo que nos corresponde y es importante que podamos hacerlo en un ambiente universitario.

Zenit.- El número de Cuerpos Jurisdiccionados del Supremo Consejo ha crecido en los últimos meses, ¿consideráis que se puede alcanzar un mayor desarrollo?

S.G.C. .- La Gran Comisión Rectora ha aprobado la creación de dos Sublimes Logias Capitulares de Perfección en Cartagena y Gerona y de un Soberano Capítulo Rosa Cruz en Canarias, asi como de un Consejo de Caballeros Kadosch en Alicante y en una próxima reunión de la Gran Comisión Rectora es posible que se apruebe la creación de otra Sublime Logia Capitular de Perfección en La Coruña , lo que nos invita a ser optimistas sobre el futuro desarrollo de nuestra Institución.

Zenit.- ¿Cómo se están desarrollando las relaciones internacionales del Supremo Consejo?

S.G.C. .- En el pasado mes diciembre asistimos a la Fiesta del Solsticio del Supremo Consejo para Francia donde nos reunimos con todos los Soberanos Grandes Comendadores de Europa y Países Asociados. Nuestra relación con los Supremos Consejos europeos es esencial, somos parte de Europa, y, la verdad, sintonizamos con toda la filosofía masónica que, en la actualidad, se desarrolla en el Viejo Continente. Igualmente, quiero resaltar la fraternal amistad que nos une al Supremo Consejo para la Jurisdicción Sur de los Estados Unidos. Por otra parte, y por la relación especial que España siempre ha tenido con Iberoamérica, hemos nombrado un Delegado Del Supremo Consejo para España para fortalecer nuestros lazos fraternales y tener un contacto muy directo con los Supremos Consejos de Iberoamérica. Lo cierto es que nuestra relación con todos los Supremos Consejos del mundo es cada día mas estrecha.

Zenit.- ¿Y las relaciones con las otras Potencias Masónicas Regulares de España?

S.G.C. .- Nuestras relaciones con la Gran Logia de España son, muy estrechas y muy fraternales. Lo mismo ocurre con el Supremo Capítulo del Arco Real y con el Gran Priorato del Temple y esto no podía ser de otra manera ya que la realidad es que estas cuatro Potencias Masónicas constituyen, conjuntamente, en España la Orden masónica.

Zenit.- Y para finalizar, ¿cómo os ha afectado vuestra elección como Soberano Gran Comendador?

S.G.C. .- La verdad es que desde que Ramón Torres ha sido elegido Soberano Gran Comendador dedica casi todo su tiempo a la Masonería. Para mi es una gran ilusión poder prestar este servicio y, como me gusta decir a los HH., por encima de todo soy un masón al que, circunstancialmente, le ha tocado contribuir a la dirección de la Orden.

Origen: Revista Zenit

La Verdad y el Libre Albedrío en la búsqueda del Masón

El Masón antes que nada es un Ser humano y como tal se desenvuelve no solamente en el ámbito Natural, denominándose así a su contacto con la Naturaleza y siendo este ámbito gobernado por la armonía existente a ese nivel.

La conformación mineral de su cuerpo es semejante a la de los minerales que lo conforman y están regidos por leyes naturales propias de dichos elementos, este cuerpo puramente físico es similar al de los minerales, geométricamente puede representarse por un sólido; al producirse un ordenamiento este conforma el cuerpo Etérico, este cuerpo permite que dichos elementos minerales-naturales puedan unirse en un orden tal que permite el desarrollo de vida orgánica, a este nivel el Ser humano se asemeja a las plantas y como tal posee una vida estacionaria, puede crecer y moverse lentamente mientras se desarrolla, pero dentro de los limites dados por su apego necesario a los alimentos que absorbe por la raíz, y la energia recibida a través de sus hojas por la fotosíntesis, geométricamente puede ser representarda por un plano.

En el caso humano la luz es captada por la piel, el órgano mas grande en su cuerpo, pero los alimentos son recibidos de otro modo, ya que tiene movimientos adicionales. El cuerpo Astral se une a dicho cuerpo Etérico y le da ese movimiento dirigido por sus instintos, el ser humano tiene sus sentidos desarrollados y aparecen las emociones, a este nivel el Ser humano es semejante a un animal, cumple con satisfacer sus necesidades primarias, alimento, resguardo de los elementos de la naturaleza, siempre en forma instintiva, puede ser representado por una línea; pero el ser humano tiene algo mas.

El ultimo cuerpo es el “SER” o también llamado “YO”, que permite al ser humano agregar el raciocinio personal, el análisis de los sucesos y la emisión de juicios, geométricamente puede ser representado por un punto, y es el nivel que nos acerca al GADU.

En el ámbito Social, el ser humano se comporta dentro de los limites aceptables por el medio en el que vive, siguiendo las leyes que dicho medio considera correctas, poniéndose a tono con la etiqueta o protocolo de comunicación, necesario para su posible desarrollo e interacción dentro de dicha sociedad, siendo dichas leyes dictadas por costumbres aceptadas y seguidas por la mayoría; por ejemplo las leyes sociales de una tribu que habita en medio de la selva serán diferentes a las que existen en una urbe metropolitana, los limites, negación y la aceptación serán específicos de cada agrupación humana.

El "YO" del Hombre tiene además el ámbito Espiritual y es esta la diferencia principal que existe con respecto a los animales además del simple Raciocinio Material.

El ámbito espiritual, el punto inicio de las cosas, es lo que une al hombre mas íntimamente con su creador y esta por encima de los otros ámbitos, y dentro de él se pueden considerar sus Emociones, sus Virtudes, Defectos, etc. y ellos van a regir el comportamiento que tenga y sus respuestas a nivel Social y Natural. El no considerar este ámbito espiritual limita al hombre y le elimina la posibilidad de superarse como ente compuesto y hace desaparecer la posibilidad de someter sus Pasiones.

Es este Ámbito Espiritual, el eje de trabajo del Masón, es donde efectúa su tarea personal e interna de mejoramiento, teniendo el continuo vaivén entre las dos Columnas de la Fuerza y la misericordia, entre la aplicación del Raciocinio calculador, la Lógica, Ciencia y Matemáticas que nos pueden llevar hacia un materialismo frío y cruel y la otra cara de la moneda la espiritualidad, los sentimientos y la Imaginación, que nos pueden llevar a un escape total de la Realidad, tan profundo que la vida propia puede ser sacrificada en forma de un suicidio justificado por un fanatismo idealista, muchas veces alimentado por un sentimiento religioso.

Este ámbito espiritual controla al Hombre por encima de su envoltura Física y lo maneja haciendo que no respete a la Naturaleza y la destruya justificadamente bajo el nombre del progreso, o cualquier otra justificación de beneficio material-temporal o se confunda con ella en un Ascetismo mesiánico que lo regresa a la edad Media o inclusive a la Edad de piedra, recluyéndose en cuevas, en la cima de una montaña, o en cualquier otro lugar oculto, considerándose un directo elegido del Gran Arquitecto, perdiendo contacto con la realidad.

Ambos extremos son negativos y la Libertad del Hombre le hace aplicar su Libre Albedrío para inclinarse hacia uno u otro lado, es Tarea del Masón controlar los extremos tratando de mantenerse en un nivel intermedio que lo dirija hacia un descubrimiento interno de ese equilibrio, acercándolo a su Creador como ejemplo de Verdad absoluta.

El Ser Humano no tiene su destino marcado, el Ser Supremo le dio los Limites entre los cuales moverse, siendo el futuro moldeado por su accionar del hoy, de no ser así no tendría sentido el intentar la superación del Hombre, bastaría con sentarse y dejar pasar la vida delante de nosotros permaneciendo pasivo sujeto en su parte animal a lo que le dicta la Naturaleza. Él puede escoger si desea el frío, que le da su animal desnudez o cubrirse, y mas aun puede escoger moldear la Naturaleza creando ambientes artificiales que le permiten sobrevivir, permitiéndole hasta viajar en el espacio.

Es deber del Masón el superar al hombre común que encontramos en todos nosotros, renacer y buscar dentro de nosotros mismos aquel Ser humano que es su propia superación, siendo ese camino totalmente personal y marcado por las influencias externas, pero tomando las que sirven, desechando las que no sirven en el camino trazado en el viaje que hemos emprendido.

La Libertad del Masón le permite por medio de este Libre Albedrío, empujado por sus sentimientos y pasiones, las que estarán permeables a las influencias de la Naturaleza y la Sociedad esta búsqueda y debe escapar de los limites simplistas materiales buscando dentro de sí su verdad, por medio de las Virtudes y moldeando dichos sentimientos y pasiones ya que no puede mantenerse pasivo ante las influencias Sociales y de la Naturaleza; y esta es la principal diferencia con el hombre no iniciado.

El Ciclismo ha sido completado por filósofos como Rudolf Steiner que en libros como “Mitos y Misterios Egipcios” describe un amplio análisis a niveles que pueden parecer fantásticos.

Y hay mucho mas aun si ahondamos en la profundidad de las religiones judeo-cristianas que representan el pensamiento de Occidente y han evolucionado influenciadas por Oriente llegando a crear filosofías múltiples que seria muy largo de explicar.

Siguiendo múltiples caminos de muchos pensadores y filósofos que enriquecen el pensamiento humano, las ideas externas del pensamiento existen y pueden ser absorbidas dentro del conocimiento personal del Masón en el ámbito de su búsqueda.

El Masón de hoy debe nutrirse de pensamientos que le ayuden a controlar y hacer surgir su “YO”, utilizando lo positivo de aquellos pensadores y desechando lo negativo, siguiendo esa búsqueda personal de “SU” verdad.

Fraternalmente

Carlos Sarmiento

jueves, marzo 24, 2005

Ceremonias vs. Rito

Ceremonia

Los masones trabajamos con Rituales, pese a lo cual también tratamos algunas de nuestras reuniones como Ceremonias. Pongo a consideración una diferencia filosófica.

La Ceremonia es una figura práctica teleológica constituida por secuencias efímeras de operaciones humanas, que está delimitada sobre un «fondo procesual» por una apertura y una clausura identificables. Tiene las dimensiones del día terrestre (minutos, horas, pero no segundos; semanas, pero no años o siglos). Son ceremonias: un funeral, una boda, un desfile militar, un paseo solitario por el campo, la visita a un museo, la declamación de un discurso político, la tarea normalizada de reparar el generador de un automóvil, cocinar un plato según recetas, la caza cooperativa, al acoso, de una fiera. No son ceremonias: la muerte de un individuo, el matrimonio, una batalla; ni la senda, las cerámicas o los cráneos que descansan en las vitrinas, el tumulto que pueda resultar del discurso político, el motor de explosión, los alimentos cocinados o la pieza cobrada.

Se trata de figuras del hacer humano sujetas a normas y que suponen secuencias operatorias de carácter transitorio que se cierran internamente desde su propia configuración. La ceremonia es un rasgo clave para delimitar antropología/etología, cultura/naturaleza, hombre/animal, pues aunque las ceremonias humanas presentan cierta similitud con los rituales animales existen grandes diferencias entre ambas y, desde luego, su forma es distinta. En su estructura general se distinguen cuatro dimensiones o momentos en una ceremonia: constitutivo, distintivo, variacional y contextual, a partir de los cuales se configuran los diversos tipos de ceremonia, que se clasifican según distintos criterios, siendo decisiva aquella clasificación que, en su momento constitutivo, y atendiendo a los ejes del espacio antropológico, habla de ceremonias circulares, radiales y angulares.

Ceremonias vs. Rito

La tendencia a tratar a las ceremonias como si fueran «rituales», acaso más complejos, tiene una amplia base objetiva. Con frecuencia —y esto ya no nos parece legítimo— los términos de «ritual» y «ceremonia» se aplican indiferentemente a secuencias animales o humanas. No cabe invocar el criterio de la herencia genética y la herencia cultural, por aprendizaje. También las rutinas (o rituales) animales son resultado de procesos de aprendizaje. Del concepto de ceremonia no se infiere que su contenido (su «finalidad biológica») haya de ser diferente del contenido o finalidad de los ritos zoológicos, como si los rituales tuviesen un cometido biológico-material distinto del de las ceremonias, a las que les correspondería un contenido simbólico, espiritual. La espiritualidad de las ceremonias no reside en su contenido, tanto como en su forma. Durante los primeros siglos del Imperio romano, a los gladiadores moribundos se les remataba como rematan las rapaces a la oveja malherida por el lobo. Pero el rematar del gladiador era realizado espiritualmente, ceremoniosamente: un funcionario, vestido de Mercurio, le atravesaba con una vara dorada. No sabemos de ningún buitre que se disfrace de halcón divino para rematar a la oveja. Los elefantes africanos desarrollan, a falta de agua, un ritual de «abluciones sustitutivas» con arena y este proceso ha sido comparado con las abluciones ceremoniales de los musulmanes, a quienes también les está permitido realizar sus abluciones canónicas con arena cuando no disponen de agua. La semejanza es impresionante pero la diferencia de esencia subsiste: las abluciones musulmanas, con agua o arena, se desencadenan en virtud de un precepto del Corán. ¿Dónde está el Corán de los elefantes africanos? Los rituales, en tanto son también figuras secuenciales, tendrán los cuatro momentos que hemos distinguido en las ceremonias, lo que quiere decir que las diferencias aparecerán en cada una de estas dimensiones. En su momento constitutivo, la ablución de arena de los elefantes no es normativa y su teleología también es diferente (las abluciones musulmanas no tienen como finalidad refrescarse el cuerpo, sino purificar el alma). En su momento distintivo, los criterios de apertura y clausura también son diferentes: al elefante se las marca el termómetro, al musulmán el reloj. Según su momento variacional: las variedades en la ablución ritual son de otro orden (aleatorias, individuales), que las variedades ceremoniales, según estilos ligados a otras costumbres, a normas prohibitivas, &c.; según el momento contextual, las abluciones del elefante tienen un componente fijo de contexto: la temperatura ambiente por encima de los 30º, mientras que el contexto de las abluciones ceremoniales está en cierto modo independizado del medio ambiente y su radio es mucho más grande (miles de kilómetros, por ejemplo la distancia a La Meca).

Las ceremonias son más complejas (constan de un número mayor de operaciones) que los rituales. Las ceremonias estarían en la escala del día, los rituales podrían darse a escala de minutos. La ceremonia, frente al ritual, se propaga por transmisión cultural, por imitación o por tradición y no puede ser adecuadamente comprendida sin la referencia a las coordenadas culturales de las que brota.

MOZART Y LA FLAUTA MÁGICA

Por Milton Arrieta M.•.M.•

Wolfgang Amadeus MOZART nació en Salzburgo (Austria) el 27 de Enero de 1756. Desde muy pequeño se evidenció su talento musical que se fue desarrollando en medio de un efervescente espíritu humanista, donde el Despotismo Ilustrado se planteó como una necesidad de pintar una humanidad ideal, y en el que se mezcló lo profano y lo sagrado, absorbiendo toda diferencia de fe, de raza y de nacionalidad.

En 1784, se inicia como Aprendiz Francmasón en la Logia Beneficencia de Viena. A partir de este momento plasmó el simbolismo masónico en su música, como se aprecia en las siguientes obras: "Camino a la fraternidad", "La alegría del masón", "Oda fúnebre", "Pequeña cantata masónica", (proviene de aquí el actual Himno Masónico Internacional) y otras más. Todo este trabajo musical adquiere su máxima expresión en "La Flauta Mágica" donde se observa lo más grandioso del simbolismo masónico musical. Esta obra es una alegoría a la perfección de la persona dada a través de una representación simbólica de lo que es el camino iniciático.

Cada personaje es representativo de un estado del ser humano; de esta manera, encontramos al sabio, símbolo de la luz que representa la sabiduría, y de la perfección; de esa perfección que conduce a un ideal de humanidad. Se trata de Zarastro, sumo sacerdote de Isis y Osiris, Maestro de los Iniciados. En uno de sus parlamentos expresa: "En estos sagrados muros no se conoce la venganza; y su nombre ha caído, y el amor lo conduce de nuevo al deber: entonces camina alegre y contento, de la mano del amigo, hacia un país mejor.

En estos muros sagrados, donde el hombre ama al hombre, no puede acechar ningún traidor, porque los enemigos han desaparecido.

Quien no se alegra de estas doctrinas no merece ser un hombre.

También encontramos ese estado de la persona humana en vía de perfección, aquél que tiene que enfrentar muchas contingencias y que, con voluntad férrea, triunfa. Esto se encuentra representado en Tamino.

Además está ese estado de ignorancia, de ceguera, de vicio y de maldad al que se somete el ser humano que permanece atado a lo superfluo y mundanal, encarnado en la Reina de la Noche. Como también, el estado del ser común, ése que vive sin mayores complicaciones.

En la obra este personaje tiene cuatro sabias metas: comer, beber, casarse, tener hijos. Se trata de Papageno. Además, la pureza toma fuerza, forma, significado y proyección en Pamina, quien se libera de su progenitora, la Reina de la Noche que, en última instancia, es la liberación del ser en toda su dimensión para asumir un nuevo estado de inocencia y pulcritud, que permite la realización en el ser mismo y la conquista de su felicidad.

Sin duda que hay otros personajes que podrían nombrarse y que también adquiere una representación especial.

El valor de esta obra está en su inagotable significado, en su universalidad y en su eterna vigencia

domingo, marzo 20, 2005

Academia Masónica Argentina

Fundada en 1998, esta Academia Masónica esta inspirada en los lineamientos de la Academia de Platón, y en los de su heredera, la Academia Florentina, proyectados a nuestra orden.

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REFLEXIONES SOBRE UN ACTO SAGRADO

Nunca se habló tanto y tan erróneamente sobre el acto sagrado de una iniciación como se habla actualmente.

Muchos se intitulan iluminados, usando como tribuna los medios de comunicación tales como: redes de televisión, radio, Internet, etc. dónde sus discursos, pláticas y escritos mas alinean que instruyen.

Algunos dicen que fueron iniciados por los representantes de la Gran Fraternidad Blanca, que saben en dónde tienen sus monasterios, conocen sus secretos y hasta que ya fueron transformados por el simple hecho de haber mirado o haber sido tocado por sus amuletos. (¡Como si estos maestros viviesen aquí o precisasen de amuletos!).

Estos ilustres visionarios conocen de todo se autoproclaman magos iluminados. Sin embargo, lo que presenciamos en la práctica no coincide con sus predicaciones. Las actitudes y la conducta de esos pseudoiniciados maestros están muy lejos de ser consideradas un bien para la humanidad.

Una iniciación, es una acto sagrado que no se compra con el oro, no se negocia en los gabinetes, no se toma por la fuerza bruta. Apenas se consigue por el derecho y por el conocimiento y sobre todo por el merecimiento, pues una iniciación, no se da desde fuera para adentro, es sin embargo una alquimia mental que transforma al ser en su interior integro y no solo en su cáscara.

Una iniciación, abre las puertas de la conciencia en dirección a la propia casa del padre, a la casa de la sabiduría divina.

Sábese, que en la orden iniciática, existen dos círculos: uno es externo, dónde están todos aquellos que gravitan en las márgenes del poder ajeno, y son como hierbas parasitarias, en el otro, se hallan los iluminados, ese es el interno, dónde trabajan los iniciados por entero. Es en el interno, donde están los verdaderos maestros masones, pues además de instruir a aquellos que insisten en la superficialidad, perpetúan la verdadera dirección y objetivo de nuestra sublime institución y prácticamente son verdaderas obras vivas, a sembrar el amor, la libertad, la igualdad y la fraternidad entre los hombres.

Queridos hermanos, detengámonos aquí y hagamos nuestra iniciación masónica.

No importa, cuanto tiempo haya pasado desde nuestra iniciación. Lo que importa en este momento es :

¿ Hacemos la purificación efectiva a través de los cuatro elementos?

¿ Nuestro espíritu también está puro?

¿ Nuestras manos y nuestra mente están con la altura que ya tanto prometemos?

¿ Somos verdaderos en todas nuestras acciones y palabras ?

¿¿¿ Lo mismo ??? ¿ Somos masones o estamos siendo masones?

Carlos Roberto Fieri

COMPROMISO ES FRATERNIDAD

No hay un solo ser que consiga sobrevivir aislado. El instinto de vida en grupo es inherente a todos los seres, particularmente al hombre.

Cuanto mas sabio es el hombre, es mas activo, es mas participante y mas fraternal será. Pues en esa sabiduría descubre que es parte integrante de todo lo que existe.

Descubre que todo lo que él posee, no es de él y si todo fue tomado en empréstito a aquellos que vendrán a administrar las mismas posesiones como futuros locatarios.

El principio de fraternidad, es la unión de propósitos comunes para formar la congregación de mentes afines. Esa suma de “buenas intenciones” es la que creará un único cuerpo.

Es esa unión, ese ágape de espíritu fraterno que eleva el grupo a una condición de una verdadera fraternidad de personas armoniosas, felices alegres y prósperas.

Es como discípulos de verdad y guardianes de justicia que los maestros caminan unidos en la dirección del áureo amanecer para promover la unión de los pueblos y preparar una sociedad justa de hombres perfectos.

La alegría del verdadero masón es ver aun hermano prosperar en sus negocios, y ser feliz en su casa y en su templo. El verdadero masón solo se siente feliz cuando encuentra la paz y la armonía reinando entre todos los hermanos.

Carlos Roberto Fieri

EL APRENDIZ BUSCADOR

El hombre común ha buscado el autoconocimiento, o sea su desarrollo y mejoramiento personal a través del estudio diligente de las ciencias, de las artes y de la filosofía.

En su búsqueda tiene encontradas la mayor parte de las respuestas que procura. Sin embargo, una de ellas no está muy clara en su mente. Por mas que las religiones y prácticas garantizan el reino de los cielos. El hombre aún no consigue descifrar el mayor de todos los enigmas, No ha conseguido descifrar a Dios, ni tampoco el mas sencillo de sus misterios. Sabe que Dios está en todo lugar, que ve y oye el mas íntimo o pequeño de sus pensamientos y que si no es por su voluntad, ni una hoja de la Tierra se moverá.

Esa búsqueda incesante de querer conocer a Dios y probar su existencia, ha llevado a los hombres a verdaderos delirios al punto de que en el nombre del fanatismo y de la creencia, alimentaron guerras “santas” entre pueblos, solo porque seguían dogmas diferentes.

Todos dicen que Dios es la supremacía divina, sin embargo esquivan aceptar, que como hijos de Dios, todos indistintamente, somos hermanos.

El verdadero masón, aplica la máxima y el principio de la ley masónica. Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a sí mismo. Porque él ya no procura a Dios fuera de sí... El ya se encontró, el sabe que Dios y sus maravillosas leyes están en plena armonía en su corazón.

El iniciado conoce el principio de la verdad, el sabe que un hombre puede coartar la libertad de otros hombres, lo mismo que sentirse dueño de sus cuerpos y de sus caminos, pero nunca conseguirán traer poder sobre sus propios destinos, y jamás serán dueños de sus almas.

El masón iniciado, cuando encuentra alguien que sabe que él, jamás lo condena por su ignorancia, al contrario. El lo toma como su propio hijo, y así con su amor de padre, puede instruirlo, y volverlo un ser útil y esclarecido.

Quién recibe la antorcha como tributo pasa a ser responsable por la propagación de la luz.

Carlos Roberto Fieri

Historia del Rito Escocés antiguo y aceptado.

De todas las polémicas y controversias que se hayan suscitado en el seno de la Masonería, ninguna tan tenaz y empeñada como la que viene manteniéndose desde su aparición, con respecto al titulo y origen verdadero de este Rito, y muy en especial, de su pretendida antigüedad, que algunos hacen remontar hasta los primeros siglos del cristianismo dándole al gran Manes[1] por institutor. Según nuestros estudios e investigaciones, no puede probarse que semejante Rito sea Escocés, ni que su antigüedad sea tal, que le autorice en lo mas mínimo para sostener la menor pretensión, ni fundar en ella la menor prioridad o preeminencia. Un solo dato basta para que cualquiera pueda adquirir por sí solo un pleno convencimiento de lo primero, y es, que rechazado constantemente por los masones del país que se le asigna por cuna, este Rito no consiguió penetrar en Escocia hasta el año de 1846; y con respecto a lo segundo, la misma fecha de sus Constituciones, que se dan como fundamentales, nos dicen claramente que esta cacareada antigüedad data en todo caso tan solo del año 1786, o cuando más del año 1762, a poder admitir como autenticas y valederas las Grandes Constituciones llamadas de Federico II.

La adición de las palabras antiguo y aceptado, es evidente que se adoptó en Francia, parodiando[2] lo acaecido en Inglaterra en 1739. Es sabido que cuando la escisión promovida en aquel año en el seno de la Gran Logia de Londres, se dividieron sus miembros en dos grupos rivales; los separatistas, para distinguirse, se apropiaron del título distintivo de anciend and aceptet massons (masones antiguos y aceptados) como queriendo indicar, que se declaraban continuadores y mantenedores de las antiguas y caducas tradiciones y ceremonias masónicas de los constructores, que acusaba a los miembros del otro partido de haber desconocido y alterado, por lo que les señaló de aquel día con el dictado de masones modernos. Igual sucedió en Francia en 1786, cuando el Gran Oriente procedió a una severa revisión de los altos grados reduciéndolos al numero de cuatro. Acusado por los mismos factores del Rito Escocés, que en aquel entonces precisamente, a ser cierto lo que sostienen, se ocupaban de elevar a treinta y tres el número de los que constituían su escala jerárquica, de haber querido desnaturalizar los misterios y antiguas ceremonias para sustituirlos por otros nuevos, señaláronlos también, a su vez, con el titulo de modernos, mientras que ellos se abrogaban el de antiguos. Tal es el Génesis del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

Los documentos que se reconocen y admiten como más autorizados por los masones que siguen este Rito, establecen: Que la creación de los sublimes e inefables grados del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, tuvo lugar poco después de la terminación de la primera cruzada[3], estableciéndose simultáneamente en Escocia, en Francia y en Prusia; pero por circunstancias que no son conocidas de nadie, éstos cayeron muy pronto en desuso y permanecieron olvidados durante muchos años, o sea desde 1648 hasta 1744. Pero semejante aserción no ha podido ser nunca demostrada ni apoyada por ningún documento auténtico y fehaciente que merezca el menor crédito. En lo que estamos de acuerdo, es reconocer que la introducción de la Masonería templaria, tuvo lugar en Francia en 1727, por su mismo autor y recopilador el noble Escocés, barón de Ramsay, que en 1744 instituyo en Burdeos una Logia de Perfección, y que en Prusia fue deudora de tal beneficio al marqués de Bernez que lo verificó en 1757, y a los oficiales del ejército de Brogolie.

El conjunto del sistema y de sus treinta y tres grados, según puede verse en la Recopilación de las Actas del Consejo Supremo de Francia (por Setier, París de 1832) y en otra acta del mismo Supremo Consejo de 5 de Marzo de 1813, que publicó con el título de "Notice sur la Francmaconnerie ot sur I'erection du supréme Conseil de trente trois grades", así como en muchos otros documentos, descansa sobre los estatutos y Reglamentos redactados en Burdeos[4] en 1762 por los diputados delegados por el Soberano Consejo de los Emperadores de Oriente y Occidente y el de los Príncipes del Real Secreto de aquella ciudad, que había sido instituido por el primero en 1759, cuyo texto oficial se halla en la citada recopilación y en la Constitución, Estatutos y Reglamentos para el Gobierno del Supremo Consejo, atribuidos como ya hemos dicho al rey Federico II. Según se dice en estos documentos oficiales, "Carlos Eduardo Estuardo[5], último retoño de la rama de este nombre y jefe de toda la Masonería antigua y moderna, confirió al rey Federico II la suprema dignidad de Gran Maestro, designándole para su sucesor; y en tal concepto, en 1761 fue reconocido como jefe de los sublimes e inefables grados de la Masonería sobre ambos hemisferios. Este nombró al Príncipe Carlos, heredero de la corona de Suecia, Gran Comendador y Protector de los masones suecos, invistiendo con igual dignidad al duque de Chartres y al cardenal Rohan, para los masones de Francia. Distribuidos así los poderes, en 25 de octubre del año 1782, fueron confirmadas las grandes constituciones de Burdeos". En aquella época el Rito Escocés Antiguo y Aceptado no constaba más que de 25 grados, de los que el Príncipe del Real Secreto era el más elevado, pero en vista de las invasiones de los innovadores y de las discordias que a consecuencia de ello se promovieron en Alemania, recelando aquel monarca que la Masonería pudiera llegar a ser presa de la anarquía y víctima de aquellos que bajo el nombre de masones podían intentar anonadarla y viendo que su existencia se encaminaba al ocaso, se decidió al fin a transmitir todos los Soberanos poderes y prerrogativas de que se hallaba investido, a un Consejo de Soberanos Grandes Inspectores Generales, para que después de su muerte tomara la suprema dirección alta y sublime Masonería, con sujeción a la Constitución y Reglamentos. Con este objeto en 1786 amplió la escala jerárquica de los grados elevando el numero hasta treinta y tres, y otorgando este último el título de Poderoso y Soberano Gran Inspector General. Los altos poderes que se conferían a los hermanos condecorados con este grado, que debían ser en lo sucesivo los encargados del gobierno y dirección del Rito, fueron concentrados en un Soberano Capítulo al que dio el título de Supremo Consejo del grado 33º.

Por último, el 1ro de mayo de aquel mismo año pocos meses antes de acaecer su muerte (17 de agosto), publicó la Constitución y Reglamentos de los Grandes Inspectores Generales, en cuyo Art. 8º, los instituye por sus sucesores; consignando, que después de su fallecimiento, los Supremos Consejos serán los Soberanos de la Francmasonería. Pero semejante relato, a pesar de los sellos y timbres oficiales que lo adornan, no solo merece el menor crédito sino que muchos lo desmienten de la manera mas categórica y terminante, como son de ello buen ejemplo Ragón, Clavel, Findel y otros muchos.

El erudito H:. Reboul, después de haber compulsado todos los autores alemanes que se ocupan de este particular, dice en su Historia de la Francmasonería, lo siguiente: "El rey Federico de Prusia fue iniciado en la Masonería el 15 de agosto de 1738 en Brunswich, siendo en aquel entonces príncipe real. En 1744 la Logia de los Tres Globos, de Berlín, fundada por artistas franceses, que habían sido llamados a Prusia, fue elevada por él a la categoría de Gran Logia, siendo aclamado Gran Maestro de la misma, cuya dignidad ejerció sólo hasta 1747, aunque la Gran Logia continuó inscribiéndole como tal en el cuadro de sus grandes dignatarios, hasta el año de 1755. Desde aquella época, ya no se volvió a ocupar de la Masonería activa para nada. En sus conversaciones con algunos de los hermanos que dirigían la Logia de los Tres Globos, y que le solían poner al corriente de cuanto en ello ocurría, continuó demostrando siempre el mayor afecto por la Institución; pero tan luego como los nuevos sistemas introducidos por el marqués de Bernez y por los oficiales del ejército de Broglie, fueron tomando incremento e infiltrándose en las Logias alemanas declarándose enemigo de semejantes innovaciones y manifestó a su manera el mayor desdén, expresándose en términos muy duros contra los altos grados, augurando que en su día vendría a ser perenne manantial de discordia entre las logias y los distintos sistemas. Después de esto ya no se le volvió a oír hablar más de Masonería durante los últimos treinta años de su reinado". Este es el un hecho notorio y comprobado por las mismas actas de las Grandes Logias de Berlín.

El hermano Marconay, autor de varios escritos sobre la Masonería de los altos grados, deseoso de ilustrar y de poner en claro cuanto hubiere de verdad acerca del origen prusiano del Rito Escocés Antiguo y Aceptado en 33 grados, dirigiéndose a la Gran Logia de los Tres Globos en Berlín, para que sirviera darle los esclarecimientos necesarios; el 17 de agosto de 1733 recibió la contestación oficial, en la cual se encuentran, entre otros, los siguientes párrafos: "En cuanto a las opiniones entre nosotros, debemos participaros que Federico el Grande es en parte el creador del sistema que nuestra Logia adoptó, pero nunca se inmiscuyó en sus asuntos, ni se ocupó de dictar leyes a los masones, a los que siempre concedió la mayor protección en sus Estados. La Gran Logia no reconoce ni practica más que los grados azules de San Juan. Un comité particular compuesto de miembros elegidos por los hermanos, llamado Supremo Oriente Interior, dirige los trabajos de los grados superiores que no pasan en numero de 7. La Logia Escocesa de este Senado Superior presidida por un Escocés Superior, ejerce jurisdicción sobre las Logias Escocesas unidas a las de San Juan. Tal es el estado de las cosas entre nosotros; todo lo que se refiere a las prescripciones de Federico el Grande y del Senado Superior que debe existir, carece de fundamento".

En la crítica razonada de varios autores prestigiosos, debemos buscar el camino que nos conduzca al descubrimiento del verdadero origen de este rito. Del examen de la mayoría de los que niegan un origen prusiano, templario o anterior, se reduce en conclusión, que la base fundamental del mismo estriba en el Rito de Perfección en 25 grados, creado en París en 1756 en el Capítulo de los Emperadores de Oriente. Importado este Rito a América por el Judío Esteban Morín, allí, donde por mas que algunos traten de sostener otra cosa, no se conocían mas que los tres grados de la Masonería primitiva de San Juan, fructificó de una manera tan rápida el sistema de los Soberanos Príncipes de la Masonería, fue tal el afán y la locura que se despertó en aquél fértil y privilegiado país, virgen aún de toda innovación, por la adquisición de altos, que agotado muy en breve el rico cargamento de joyas, bandas y condecoraciones de que fue provisto aquel mercader, Morín concibió la idea de ampliar la escala de los primitivos grados, elevando su numero hasta 33. Y a sí lo verificó, efectivamente, en unión de otros hermanos, con los que se puso previamente de acuerdo.

Reunidos en Charleston (Carolina del Sur, U.S.A.), después de distribuirse los cargos y concentrar y concentrar en sus manos toda la administración, fundóse ahí en 31 de Mayo de 1801, el primer Supremo Consejo de la nueva Masonería, cuya existencia se dio a conocer por primera vez, en una circular expedida por ese alto cuerpo con fecha de 4 de diciembre de 1802, siendo muy de notar que a pesar de la supuesta antigüedad y aceptación que hace presumir su título, no se halle en la misma la menor indicación que revele su origen, ni su anterioridad, limitándose únicamente a preconizar la excelencia de sus 33 grados, cuya organización atribuye al rey de Prusia, en mayo de 1786.

Tampoco se dice nada en este documento, de cómo ni por quién había sido importado este Rito a América, ni con que corporaciones análogas se hallaba en correspondencia. El año siguiente es cuando, por primera vez se ve figurar en su Anuario el nombre de una potencia de este Rito, como corresponsal: El Supremo Consejo de Santo Domingo que acababa de ser creado bajo sus auspicios por el conde de Grasse Tilly, uno de sus delegados.

Era el conde un militar francés agregado al servicio de las colonias, al que, a imitación de Esteban Morín, el Supremo Consejo de Charleston, después de haberlo creado el Gran Inspector General, en 1799, le confirió una patente para la creación del mencionado Supremo Consejo a su regreso a la isla.

La pérdida definitiva de aquella colonia le obligó en 1804 a volver a Francia. Tan pronto como se encontró en París, se ocupó activamente en dar a conocer los 33 grados del nuevo Rito, introduciéndolos en la Logia Escocesa de san Alejandro, que quedó convertida en centro general de sus operaciones.

Por toda justificación de sus derechos, tan sólo pudo presentar un titulado Libro de Oro, que únicamente contenía una copia de la patente de los poderes otorgados en 1761 a Morín, por el Consejo de Emperadores de Oriente y Occidente, de París; su propia patente expedida en 1802 por el Supremo Consejo de Charleston; una copia de la Constitución en 35 artículos redactada en Burdeos, en 1762, por los Príncipes del Real Secreto, y por último, otra copia de la que había sido forjada recientemente en América, en 18 artículos, poniéndole la fecha de 1786, que es la que se atribuyó a Federico el Grande.

Las explicaciones de Grasse causaron no poca admiración en Francia. Mientras los unos se pronunciaban a favor del astro naciente, otros menos crédulos, se creyeron el deber de sondear la cosa antes de aceptarla. En efecto: Examinando atentamente estos documentos, se descubrió que la patente de Grasse no llevaban firma de persona conocida alguna, si se exceptúa la de Hogue, su suegro. Observóse igualmente, no sin sorpresa que la del H:. Isaac Long, uno de los que debían haber asistido y autorizado la recepción del mandatario en 1797, no figuraba en aquel documento. Preguntábase también como podía explicarse, que hallándose el H:. Grasse, expuesto a ser llamado a Europa en el momento menos pensado, por su calidad de militar, no se hubiese hecho librar inmediatamente después de su de su recepción un certificado, y que no se hubiera acordado de ello hasta cinco años después (1802). Y por último reparóse asimismo que el Supremo Consejo que había expedido la patente, no se atribuía la denominación del tal Rito Antiguo y Aceptado, y que tampoco hacía la menor mención en la misma que le autorizara para la fundación de ningún Supremo Consejo en Europa.

A pesar del testimonio de las Grandes Constituciones que dan al Rito Escocés Antiguo y Aceptado como definitivamente organizado en 1786, se han demostrado también plenamente, que esto no tuvo lugar sino largo tiempo después de esta fecha. Vasal, Ragón y Orfdox, afirman sin la menor reticencia, que los rituales de los nuevos grados fueron amasados en París por el mismo de Grasse, en cuya tarea le ayudó eficazmente un hermano y literato francés llamado Bialhache. Para ello pusieron a contribución todos los Ritos conocidos y muy especialmente los grados del sistema templario, o sea el Rito de Perfección, al que aumentaron con nueve grados. Y tampoco en esto anduvieron bastante precavidos los innovadores, puesto que entre la nomenclatura inserta en las Grandes Constituciones, que a pesar de su antigüedad no vieron la luz pública hasta el año de 1802, y la contenida en la circular del Supremo Consejo de Charleston, de 31 de mayo del mismo año, se notan diferencias bastante sensibles, que ponen claramente de relieve la ligereza y falta de estudio con que se procedió a la redacción de estos documentos.

Del examen se desprende que el numero de grados iguales, es el de 22, tomados del Rito de Perfección; los ocho grados que median hasta el 30, fueron tomados de otros sistemas. Además de la denominación de algunos grados, se observará también que la circular de 1802 no incluye el Gran Escocés ni el Gran Inspector, o sea el 29 y el 31, de la escala actual, y que ocupan el mismo lugar en las Grandes Constituciones; que el Kadosch grado 30, se le asignan el número 29; que al grado 25 y último de la séptima clase de la antigua nomenclatura, se formo el 31 y el 32; y así podríamos seguir aumentando el catálogo de las contradicciones.

A pesar de estas y otras muchas anomalías que no se escaparon a la observación de la generalidad de los masones, en breve tiempo el conde elevó al grado 33 a gran numero de hermanos, formando seguidamente con ellos un Supremo Consejo provisional. Convocados los grandes oficiales del Rito el 12 de octubre de 1804, se constituyeron en Gran Consistorio y convocaron para el 22 la asamblea general de todos los miembros con objetivo de proceder a la formación de una Gran Logia. Esto tuvo lugar efectivamente el día fijado, constituyéndose aquella bajo la denominación de Gran Logia General Escocesa de Francia del Rito Antiguo y Aceptado, decidiéndose en ella, que su principal asiento residiría en París. Eligiéronse 49 dignatarios, proclamándose Gran Maestro al príncipe Luis Napoleón y al conde Grasse como representante del mismo.

Seguidamente se ocuparon de la redacción de un nuevo Código, y el 1ro de noviembre se anunció su Constitución por una circular muy pretenciosa, de la que extractamos los siguientes párrafos:

"Una nueva era brilla en Francia para la Masonería Escocesa demasiado tiempo perseguida. Sus desgracias han llamado la atención de los masones más ilustres y más profundamente iniciados, que han vuelto a levantar la bandera escocesa bajo la cual se han colocado las personas mas ilustres de la Francmasonería. Estos, por su posición civil y militar, están llamados a rodear y defender el trono del imperio francés. Reunidos en Asamblea General en el templo de la Madre Logia Escocesa de san Alejandro de Escocia, que reemplaza a la Logia del Contrato Social, y provistos de los poderes de la Gran Logia Metropolitana de Heredom, han fundado en París la Gran Logia Escocesa de Francia y la han proclamado. Como prueba de adhesión a la dinastía imperial, la Gran Logia Escocesa ha nombrado Serenísimo Gran Maestro a su Alteza imperial el príncipe Luis, Gran Condestable del Impero. Bajo tan favorables auspicios, trabajaremos celosamente ocupándonos en el noble arte de la Masonería, no pudiendo menos de realizar los mas grandes y brillantes progresos. Lejos de lanzar el anatema contra los masones que permanecen extraños al Rito Escocés, la Gran Logia se mostrará siempre gustosísima de recibirlos en su seno, y se esforzará en establecer correspondencia con todas las Logias y Capítulos regulares de Francia y con todos los Grandes Orientes Extranjeros".

A pesar de su procedencia americana, este fue el principal foco del que emanaron, a partir de aquella fecha, los diversos Supremos Consejos que se fueron estableciendo en todos los países de ambos hemisferios que quisieron aceptarlo.

Tales son, extractados a grandes rasgos, los puntos mas culminantes que ofrece la historia y formación del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, objeto de las más apasionadas y constantes controversias.

Fuente: Internet

En ámbitos socialistas ha molestado mucho el libro de César Vidal sobre los masones

Se escucha en determinados ambientes socialistas que les ha molestado sobremanera el libro de César Vidal sobre los masones. El motivo es que en las filas del actual PSOE aparecen personas relacionadas con esa asociación, que empiezan a tener cada día más relevancia, al contrario de lo que ocurría en la etapa de Felipe González, cuando el entonces secretario general mostraba grandes reticencias a la militancia masónica por considerar que se trataba de un “contrapoder” y de una obediencia extraña dentro del partido. Con Rodríguez Zapatero las cosas han cambiado mucho.

Martes, 15 de Marzo de 2005

La crisis de la masonería española

Los últimos 20 años se han saldado de manera problemática para la masonería española. Fraccionada, sometida a múltiples tensiones internas, y, desde hace un año, soportando a un gobierno en cuyas filas tiene acérrimos enemigos (los miembros del Opus Dei), quedan lejos los días en los el prominente masón Luis Salat, alardeó de contar con dos ministros masones en el gobierno felipista. Los pocos "notables" que militan en la masonería en nuestro país, están adscritos a logias extranjeras, fundamentalmente francesas y suizas. Estas últimas ofrecen como garantía confidencialidad y posibilidad de buenos negocios.

Los tiempos han ido cambiando y la masonería, difícilmente se ha adecuado al tiempo nuevo. Su loable tarea filantrópica ha sido asumida por ONG's. Sin embargo, la institución masónica despierta hoy un renovado interés. Se han sucedido vertiginosamente seminarios y simposiums sobre la Orden y especialistas españoles (Ferrer Benimelli, Pere Sánchez, etc.) gozan de prestigio internacional. La exposición inaugurada en 1996 en Salamanca sobre el patrimonio iconográfico en el Archivo Histórico Nacional ha sido visitada por casi 10.000 personas en un año. Los simposiums sobre masonería celebrado en Toledo en abril de 1995 y el de Alicante en 1989, así como los distintos cursos en Universidades de Verano, muestran el interés de los estudiosos y de la sociedad misma por la masonería. Incluso en Córdoba tuvo lugar en mayo de 1995 un primer estudio sobre los brindis y las tradiciones culinarias masónicas en un Simposio Internacional sobre Cultura Alimentaria...

Pero si los valores masónicos pueden tener todavía vigencia, actualidad y despertar interés público, la vida asociativa de la institución ha sufrido distintas convulsiones desde el paréntesis de los 40 años de franquismo. Esta es la crónica agitada de los últimos 20 años.

1975 PISTOLETAZO DE SALIDA

Tras la muerte de Franco se sistematizaron los intentos por reconstruir la masonería, prohibida desde 1937. Los contactos realizados con los antiguos franc-masones republicanos dieron un resultado negativo. El 90% se desentendieron de la organización en la que habían sido iniciados en su lejana juventud.

A finales de 1976, Villar Massó, da los primeros pasos para legalizar el Gran Oriente de España. Villar había participado en el "contubernio de Munich", reunión de políticos de oposición antifrantista en junio de 1962, en el que los masones formaban un núcleo importante. A principios de los setenta, Villar se reunió con el entonces Príncipe de España, Juan Carlos de Borbón, a instancias del industrial catalán Pedro Durán Farrell para tratar sobre el futuro de la Orden Masónica en nuestro país.

El Gran Oriente de España (GOE), dirigido por Villar, fue la primera obediencia masónica que se registró, a pesar de la reticencias del entonces Ministro del Interior, Martín Villa, quien denegó en varias ocasiones la constitución de Grandes Logias. Tras esa carrera por legalizarse lo que existía era un intento de llegar los primeros en la reivindicación del patrimonio histórico e inmobiliario de la masonería republicana.

El GOE entontró fuerte concurrencia con la Gran Logia Simbólica de España (GLSE) dirigida por Rafael Vilaplana y vinculada a la Gran Logia de Francia. Hacia 1984, dentro de la GLSE, se generó una tendencia más radical que también terminó por escindirse y vincularse al "Derecho Humano". Rudolf Guerra, entonces diputado por el Partido Socialista de Cataluña fue uno de sus impulsores.

LUIS SALAT GUSILS Y LA GRAN LOGIA DE ESPAÑA

Luis Salat Gussils puede ser considerado como el "reconstructor" de la masonería española. Iniciado en 1935 en la Logia Hermes del Gran Oriente de España, procedía de una familia de industriales de Lérida, fue miembro del Partit Nacionalista Catalá que terminó vinculándose a Estat Catalá y a la Esquerra Republicana de Catalunya (partido que tradicionalmente -hasta la gestión de Angel Colom- ha aportado mayor número de masones al ruedo político). En el seno del PNC conoció a Josep Munté, a partir de entonces sería su brazo derecho.

Salat huyó a Francia en los primeros días de la guerra civil y posteriormente a Latinoamérica. Colaboró con el gobierno de EEUU en el esfuerzo bélico durante la II Guerra Mundial, organizando el suministro de caucho desde Manaos (Brasil). Luego pasó a Vanezuela, Colombia y Méjico, frecuentando logias.

A finales de los sesenta, se reune con oficiales norteamericanos de guarnición en Torrejón y Morón, miembros de la franc-masonería. A través de un oficial de origen hispano, Salat entra en contacto con un militar norteamericano de guarnición en Alemania y Gran Maestro de la Logia Continenal de Alemania. Este oficial, que cuenta con la confianza de la masonería anglosajona, mantenía igualmente lazos de extrema cordialidad con J. Roux, dirigente de la Gran Logia Nacional de Francia. A través de Roux, Salat toma contacto con la masonería inglesa.

En esa primera fase contó con el apoyo y la colaboración de José Carretero, quien fortaleció las relaciones con el Gran Oriente de Italia, Ramón Torres Izquierdo, abogado, y el prestigioso escritor Elías Canetti.

La Gran Logia Unida de Inglaterra, que encarna la regularidad masónica, permitió que la Gran Logia Nacional Francesa, abriera logias en Occitania, compuestas por españoles. Cuando estas alcanzaran el número y los fondos suficientes como para independizarse, podrían constituir una obediencia "regular".

Este proceso se prolongó de 1978 a 1980, tiempo necesario para poder nombrar Maestros y conseguir que uno de ellos ocupara el cargo de Gran Oficial de la Provincia de Occitania. Tras alcanzar los mínimos estatutarios requeridos pudo constituirse una "provincia masónica" en Cataluña y casi inmediatamente sucursales en Madrid, Valencia, Andalucia y Canarias. Dado que son necesarias tres provincias para poder constituir una Gran Logia, esta se creó oficialmente en 1981. Había nacido la Gran Logia de España (GLE).

La primera sede estuvo en un modesto local de alquiler de la barcelonesa calle Bruch. Pronto cambian el templo a un amplio y lujoso local en Gran Vía, 623. Salat, contando con apoyos internacionales, logró formar en torno suyo un equipo eficaz y promulgó una constitución masónica excepcionalmente personalista y rígida. Esgrimió como excusa el sacrificar los niveles de democracia interna y para lograr la homogeneización que permitiera el reconocimiento internacional; aseguró que tras obtenerse, democratizaría los estatutos.

En 1989 la mayor parte del Gran Oriente de España o bien estaba disuelto o bien se había escisionado en una obediencia efímera, el Gran Oriente Español Unido (GOEU) que terminó incorporándose a la GLE. Se mantuvo la sigla testimonial en Madrid a efectos de reivindicación patrimonial. Sin embargo, el hecho de que las sedes de las logias fueran incautadas y entregadas a los ayuntamientos y órdenes religiosas, hizo que su evaluación fuera imposible, hasta el punto de estancarse las gestiones primero y olvidarse completamente en el momento actual. De nada sirvió que Salat recordara que dos ministros del gabinete socialista pertenecían al GLE.

En marzo de 1989 la Audiencia Nacional denegó la reclamación del patrimonio argumentando que debía tramitarse mediante proyecto de ley y ni siquiera entró en consideraciones sobre quien era el legítimo heredero del Gran Oriente Español republicano.

A partir de la integración de los miembros del GOEU en la GLE empiezan los reconocimientos. En primer lugar son las Grandes Logias quienes envían credenciales y embajadores a la Asamblea Anual de la GLE. Luego serán las Grandes Logias de Alemania, Irlanda y finalmente la de Inglaterra, en 1985, quienes completarán los protocolos. Uno de los aspectos más criticados a Luis Salat fue el hecho de que accediera a firmar el reconocimiento de la G.L.E. en Gibraltar en presencia del Gran Maestre de la Masonería gibraltareña, y no en Londres como hubiera sido tradicional.

La culminación del proceso de reconocimientos generó el primer problema. Si hasta ese momento Salat había logrado sacrificar la democracia interna a las exigencias del reconocimiento internacional, a partir de ahora, muchos de sus más próximos colaboradores empezaron a abogar por una democratización de los estatutos. Salat se negó. La caja de los truenos quedó destapada.

Las elecciones en la GLE se ganan controlando el "Gran Consejo", institución que da el visto bueno y apoya a candidatos. En 1988 fueron suspendidos de derechos 35 de los más antiguos miembros de la GLE. Su proceso de reincorporación no pudo cerrarse hasta 1992; durante este período el "Gran Consejo" quedó desarticulado e inoperante.

LAS DIFICULTADES DE LA LOGIA SIMBOLICA

A todo esto la Gran Logia Simbólica vivía también una serie de problemas internos. La logia, Europa nº 42, una de sus organizaciones más activas, pasó a a GLE. En plena crisis, Roger Leveder irrumpe como Gran Maestro, sustituyendo a Rafael Vilaplana.

Leveder, de origen francés, participó en un seminario organizado por la Universidad Complutense de Madrid en el año 86, dirigido por el especialista en masonería, Ferrer Benimelli. Al mismo seminario asistieron Villar Masó y Luis Salat. Tanto en esta intervención como en varios programas de TV de la época ("Jurado Popular" de Javier Nart y Fernandez Deus) Leveder causó muy buena impresión. Durante su gestión al frente de la GLSE Leveder logró detener algunas de las crisis que, finalmente terminaron por descabalgarlo.

Después de un período de crecimiento, e incluso de filiación de personajes de primera fila del partido socialista -Pastor Ridruejo- las escisiones y problemas de la GLSE han terminado por convertirla en una obediencia minoritaria. A pesar de estar en la línea laica, librepensadora y republicana propia de la masonería francesa, buena parte de los efectivos de la GLSE están compuestos por amantes del ocultismo, e incluso miembros de organizaciones como AMORC. Buena parte de esta filiación procede la GLE que Salat y Josep Munté siempre quisieron mantener alejada del ocultismo.

LA CRISIS DE LOS AÑOS 90.

En 1992 se presenta la candidatura de Manuel García frente a la de Luis Salat. Los objetivos de la oposición son españolizar la GLE y lograr una mayor independencia y autonomía en relación a la masonería anglosajona. La influencia de los masones ingleses es decisiva en la GLE; hoy, de sus 1.500 afiliados, 400 de ellos ingleses y otros 200 de mayoría holandesa.

Este contingente no interviene en la política interna de la GLE limitándose a trabajar en su interior. Dependen de España pero sus directrices son inglesas y holandesas. Frecuentemente viven en urbanizaciones en Canarias, Málaga y Almería, se trata de funcionarios jubilados que se han retirado a nuestro país.

Ese número de extranjeros obliga a que siempre haya un Gran Oficial en la GLE de nacionalidad inglesa. El que ocupa este cargo en la actualidad se le achaca que en su vida privada se dedique a actividades que han causado escándalo (en efecto, es propietario de una cadena de bares de alterne) en una organización que pide como condiciones de afiliación ser "hombre libre y de buenas costumbres".

Hasta ese momento, la oposición a Salat había sido limitada sin que pudieran evitarse algunos incidentes notables. El acta de la asamblea del 88, por ejemplo, no fue jamás ratificada. Salat ganó en aquella ocasión las elecciones de forma apretada aun a pesar de que el "Gran Consejo" no admitió candidaturas en su contra.

La situación de tensión persistió hasta 1993 en que Salat aplastó a la oposición en el "Gran Consejo" y empezó la política de acoso y derribo de todos los que tuvieron contacto con Manuel García y con su candidatura. Salat colocó en este organismo a su guardia de corps. La situación persistió inamovible hasta la enfermedad de Salat y su muerte, acaecida a principios de 1996.

Entre 1994 y 1995 los expulsados y quienes habían abandonado la disciplina de la GLE, se reorganizaron, primero en los llamados "grados capitulares" (del 4º al 30º, ambos inclusives) y luego constituyendo una nueva obediencia, la "Logia Hispania", con templos en Barcelona, Madrid, Valencia, Alicante y Málaga. Los miembros de "Hispania" no se plantean el realizar proselitismo en detrimento de la G.L.E., sino crecer con aportaciones nuevas. Su Gran Maestre es Manuel García y carecen de reconocimientos internacionales. En la actualidad centran sus esfuerzos en lograr la consolidación interna y su homogeneización, y buscan contactar con logias de investigación más que con obediencias concretas.

LA ERA SAROBE

Tomás Sarobe Piñeiro, ingeniero de 56 años, accedió al cargo de Gran Maestre de la GLE. El propio Salat, en su lecho mortuorio, con notario y testigos familiares, cedió el cargo a Sarobe, hasta entonces Diputado de la GLE.

En la regularidad del proceso de tránsito adquirió gran importancia la figura del Diputado Gran Maestre Suplente Jean Crozet, francés afincado en España. Crozet trabajó con discrección bajo la dirección de Salat; entre él y Josep Munté mantuvieron la cohesión y la precaria estabilidad de la G.L.E. en los últimos años.

El 15 de junio de 1996, en el curso de una ceremonia secreta celebrada en la sede barcelonesa de la G.L.E., Sarobe fue investido oficialmente Gran Maestre ante 380 delegados venidos de toda España y 16 de otros países; fueron escogidos 52 oficiales. Durante el "ágape fraterno" 600 invitados le manifestaron su apoyo. Heredaba una red de 100 logias, 25 templos y 147 reconocimientos.

En ese momento Valencia era la región con más nivel de filiación, seguida de Madrid, Barcelona, Baleares, Canarias y Andalucía. En Extremadura, por el contrario, no había ni una sola Logia. La GLE, entre otras actividades realizaba periódicos donativos al Hospital de niños de San Juan de Dios, a la Fundación Carreras y a los hijos de las reclusas de la prisión de mujeres de Yeserías. Cooperaba, igualmente en programas de ayuda a refugiados de la zona de los Grandes Lagos y preparaba la apertura de un geriátrico. El perfil de sus miembros correspondía a un profesional, en torno a los 40 años, mayoritariamente sin preferencias políticas ni religiosas, ni religiosas.

Sarobe, en sus primeros meses de gestión, cumplió sus promesas aperturistas: declaró un período de interregno para preparar las elecciones. El mismo se postuló como candidato y, como tal, ganó con cierta oposición las elecciones de 1996. Eliminó elementos imcompatibles con la legislación vigente, en especial los Tribunales de honor masónicos. Pretendió hacer viva la estructura de la GLE diseñada en el período anterior, pero que por diferentes circunstancias, había permanecido inoperante.

EL RETORNO DE LOS CONFLICTOS: LA LOGIA FEDERAL

Algunos que lo habían sostenido hasta entonces y el núcleo que resultó derrotado en las elecciones de 1996, se escindieron argumentando que el nuevo Gran Maestre se dedicó a realizar operaciones internacionales de venta de armas por cuenta de la Empresa Nacional Bazan, especialmente con Sudáfrica durante el período del apartheid.

Algunos de quienes le habían sostenido hasta ese momento se escindieron liderados por el Gran Maestre de Canarias, Antonio Isasi. La escisión adquirió carácteres de gran violencia cuando alcanzó a la Logia Bóveda Celeste de Barcelona. En medio de un ambiente generalizado de querellas personales, amenazas de recurrir a los tribunales, descalificación e insultos mutuos, que frecuentemente llegan a los medios de comunicación, se consumó la escisión de unos 200-225 masones que constituyeron la Gran Logia Federal, de los cuales 80 pertenecían a logias catalanas dirigidas por Florencio Serrano, un industrial que asumió el cargo de Gran Maestre de la Gran Logia de Cataluña.

El "Supremo Consejo de Grado 33", dócil con Salat, dirigido por su amigo, el mejicano Morón, se constituyó en banderín de enganche de los escisionistas, hasta el punto que la GLE denunció el concordato suscrito con esta institución y cursó órdenes para que sus afiliados no acudieran a las reuniones del Consejo. Tradicionalmente las logias canarias han mantenido una relación más viva con sus hermanos del otro lado del océano, especialmente con las logias cubanas, mejicanas y con la Gran Logia de La Florida. El canario Isasi, en definitiva, se entiende bien con el mejicano Morón.

Paradójicamente la decantación de las posiciones en el "Supremo Consejo" está permitiendo a Sarobe trabajar con más libertad. Como se sabe, las llamadas "logias azules" trabajan los tres primeros grados masónicos. Estas logias son dirigidas por Sarobe. Los grados superiores al 3º, constituyen Grados Capitulares y son orientados por el Supremo Consejo de Grado 33. Tradicionalmente han existido fricciones entre los dirigentes de ambas instituciones. Unos han considerado a los otros como superestructura escasamente operativa, mientras que el "Supremo Consejo" se ha considerado siempre superior a las logias azules.

La situación en este momento es extremadamente movediza y agitada. Mientras que la Gran Logia Federal ha sido reconocida por Méjico, Cuba y el Gran Oriente Italiano, ha visto cerradas las puertas de la Conferencia Masónica Andina celebrada el pasado mes de marzo en Chile y de la Conferencia Anual Norteamericana celebrada en el mes de febrero.

Nadie puede intuir como se desarrollarán los acontecimientos en los próximos meses. Lo que resulta evidente es que este rosario de escisiones y conflictos ha supuesto un parón para el desarrollo de la masonería en España. A la vista de los conflictos, la Gran Logia Unida de Inglaterra, o bien puede reconocer a nuevas formaciones surgidas de la GLE, o bien, retirar el reconocimiento a esta última institución hasta que se aclare la situación. A la vista de tanto revuelo cabe preguntarse qué queda de la fraternidad masónica...

MASONERIA Y POLITICA

Los masones españoles no tienen un perfil político claramente. Están presentes en todas los partidos importantes, en mayor o menor medida, salvo en el PNV. Si durante la República y en la transición democrática, defendían mayoritariamente opciones de izquierda, en la actualidad sostienen posturas de centro izquierda y centro derecha, con un núcleo ligeramente mayor de militancia en el PSOE. En otros partidos, donde la influencia masónica fue decisiva, hoy ha desaparecido (caso de Esquerra Republicana hasta la llegada de Angel Colom).

En el P.S.O.E. la masonería constituyó siempre un grupo interno de opinión, desde su fundación hasta la escisión de 1972 entre históricos y renovadores. Los masones quedaron mayoritariamente en el "Sector histórico" y los renovadores prefirieron buscar el apoyo de la Internacional Socialista.

Entre los fundadores del PSOE se encontraba Jaime Vera, alienista, miembro de la Logia Hispano-Americana. Otro histórico, Daniel Anguiano era Grado 18. A partir de la dictadura de Primo de Rivera y durante la República, la presencia de masones en el socialismo español es importante, en número y responsabilidades: Jiménez de Asúa, Fernando de los Ríos, Francisco Largo Caballero, Julio Alvárez del Vayo, etc.

Tierno Galván había sido llevado el socialismo por Villar Massó, uno de los artífices de la reconstrucción del GOE en la transición y entonces líder de la Agrupación Socialista Madrileña. Rodolfo Llopis, secretario general del PSOE antes de la escisión felipista, fue igualmente masón.

Durante la transición democrática se integraron algunos masones al PSOE y varios de ellos consiguieron escaños en las primeras cortes democráticas. Los senadores socialistas Virtudes Castro, Alberto Armas, Fernando Baezam Manuel Díaz, Rafael Fernández, Javier Paulino, Andreu Abelló, Rudolf Guerra, Feliciano Paez, Francisco Ramos, fueron o son masones. El padre de Gregorio Peces barba y Carmen García Bloise, secretaria de organización del PSOE, Félix Pastor Ridruejo, etc. fueron también masones. De Joaquín Leguina y Luis Solana se ha dicho que frecuentaron las logias, sin poder confirmarse.

Existen igualmente masones en Izquierda Unida, aportados fundamentalmente por el PASOC e Izquierda Republicana. Incluso en la CNT-FAI catalana existe un núcleo masónico vinculado a la Logia Simbólica.

Los partidos de centro-derecha tienen su cuota de masones, especialmente en Cataluña a nivel de cuadros intermedios, tanto de Convergencia Democrática como de Unió Democrática. En el Partido Popular existen masones -y no precisamente pocos- si bien mantienen muy discretamente su opción, conscientes de que buena parte del partido está controlado por sus enemigos mortales: los miembros del Opus Dei.

MARIO CONDE, FINANCIERO Y FRANC-MASON

Mario Conde declaró en cierta ocasión que le atraía el aspecto iniciático de la masonería. En ambientes masónicos nadie duda que Conde no entró en la masonería por oportunismo, ni en busca de buenos negocios, si bien estos le vinieron de manera natural gracias a la amistad que mantiene con Giuliano Di Bernardo, Gran Maestre del Gran Oriente de Italia (GOI).

Di Bernardo, terminó rompiendo con el GOI y constituyó la Gran Logia Regular de Italia y la fundación "Dignity". Esta última, legalizada en Suiza el 11 de abril de 1993, cuenta con la presencia de personajes ligados al Opus Dei y a la polémica logia Propaganda-2. A la presentación de "Dignity" asistieron Mario Conde y el Duque de Northampton, alto dignatario de la masonería inglesa.

Conde se rodeó en su logia -Concordia nº 4 de Madrid, de la que fue "Primer Vigilante"- de un núcleo con sus mismas aspiraciones masónicas e impulsó las "logias de investigación".

En cada país existe una de estas logias dedicadas exclusivamente a la realización de estudios masónicos. En España es la "Logia Duque de Wharton" la que cumplió esta función y a la que Mario Conde ayudó, así como a la "Quatuor Coronati", dependiente del GOI. Es falso, sin embargo, que Conde perteneciera a la Logia Propaganda-2.

Conde se retira cuando empieza a realizar negocios al límite de la legalidad vigente. Es consciente que puede comprometer a la masonería en operaciones poco ortodoxas y carece de tiempo suficiente que dedicar a la vida de logia. Pasa al "estado de durmiente" y redacta la "plancha de quite" que lo acredita, según la tradición masónica, sin deudas ni compromisos incumplidos ante sus "hermanos". Conde no dejó en la masonería ningún círculo que sirviera a sus intereses particulares.

La Logia Concordia nº 4, ha seguido siendo la estructura masónica más importante en Madrid. Tras la muerte de Luis Salat ha entrado en crisis y en estos momentos se encuentra inmersa en una aguda polémica interna y ha adoptado una actitud contraria a Sarobe.

Artículo publicado en la revista "Año Cero"