domingo, junio 18, 2006

LAS ANTIGUAS CONSTITUCIONES

LAS ANTIGUAS CONSTITUCIONES,

REGULACIONES Y ANTIGUOS CARGOS.

R:.H:. Claudio Torres Chávez.  V:. M :. de la F:.S:.L:.B:.R:.L:.S:. "PARTHENON N° 4"

 

Por la copia: Q.·.H.·. Benjamin Sosa Miranda

 

Las leyes que reglan la conducta de los miembros e la Orden Masónica, fueron en el pasado transmitidos por tradición oral, ya que fue esta la forma más fácil de perpetuar y memorizar las reglas entre los atareados constructores.  Pero los masones también se preocuparon de darle forma escrita a las leyes, para facilitar su memoria, ya que estas fueron utilizadas en sus reuniones de trabajo.  El documento más antiguo conocido es el llamado Manuscrito Regio o Manuscrito de Halliwell, pero también se conoce de otros manuscritos correspondientes a las corporaciones de constructores, que fueron base de los antiguos cargos y constituciones de la Masonería Especulativa.

Los antiguos documentos, base de las reglas que norman la Francmasonería datan desde el año 926 hasta 1722, es decir 5 años después de la transformación de la Masonería en especulativa. Entre ellos se consideran:

- Las Antiguas Constituciones  del año 926

- La Constitución de Eduardo III

- La Regulación de 1663

- Los Antiguos Cargos de Instalación

- Los Antiguos Cargos y Procedimientos

- La Regulación de 1703 - La Regulación de 1717 - La Regulación de 1720

- Las Regulaciones Generales de 1721

- Los Cargos Aprobados en 1722

Los antiguos documentos que se mencionan, son los únicos que contienen las Regulaciones Generales, Cargos, y la Constitución fundamental de la Orden porque ellos forman lo que se conoce como las Leyes Escritas de la Francmasonería Universal.

La Antigua Constitución  de 926

La Constitución de York es la más antigua de las constituciones existentes. Consta de dieciséis artículos que han servido para normar la conducta, práctica y fines de la masonería. Esos artículos son:

1.-Vuestro primer deber es honrar a Dios y observar sus leyes porque son preceptos divinos, a lo que todo el mundo    debe obediencia.

2.-Seréis fieles a vuestro rey y, en cualquier parte en donde os encontréis, os someteréis lealmente a la autoridad. Evitad siempre cometer el crimen de alta traición, y si descubrís un complot, denunciadlo al rey.

3.-Estad siempre presto a auxiliar a los otros a quienes os unen los lazos de una verdadera amistad, sin que para ellos sirva jamás de obstáculo la diferencia de religión o de opinión.

4.-Debéis ser fieles, especialmente los unos respecto a los otros, comunicaron los descubrimientos que hagáis en vuestro arte y ayudaros mutuamente; no calumniaros; y proceded con vuestros hermanos como queráis que procedan con vosotros. Si llegara a suceder que un hermano faltase a sus deberes con otro hermano o con otra persona cualquiera, o se hiciese culpable de cualquiera otra falta, todos deben ayudadle a reparar el mal y a corregirse para lo sucesivo.

5.-También debéis conformaros exactamente con las decisiones y disposiciones acordadas en las logias, y no confiar a ninguno que no sea miembro de la hermandad, sus signos particulares

6.-Que cada uno por sí se abstenga cuidadosamente de toda deslealtad, porque el honor y la fidelidad son indispensables para el sostenimiento de la asociación, y una buena reputación es un gran tesoro. Es necesario no perder de vista también el interés del Señor y del maestro a quienes sirváis y terminar siempre convenientemente

las obras que os encarguen.

7.-Es indispensable también pagar íntegramente lo que debáis, y sobretodo no adquirir jamás deudas que comprometan el honor de la hermandad.

8.-Ningún Maestro debe emprender un trabajo sino se siente capaz de ejecutarlo, porque causaría el mayor perjuicio al arte y a la asociación.

9.-Ninguno debe tratar de suplantar a otro, porque es necesario dejar a cada uno el trabajo que haya podido procurarse, a menos que se reconozca que es incapaz para ejecutarlo.

10.-Ningún Maestro debe admitir a un aprendiz, sino se compromete a trabajar por espacio de siete años.

11.-Para que un maestro o un compañero pueda presentar a una persona, es necesario que esta persona haya nacido libre, que tenga una reputación intachable; que tenga capacidad y que conserve todos sus miembros sanos.

12.-Se recomienda muy eficazmente a todos los compañeros que no critiquen el trabajo de los otros, aunque no sepan ejecutarlo tan bien como ellos.

13.-Todo maestro debe someterse a las observaciones que le haga el Director General de las obras; y los compañeros deben tener en cuenta las que les dirijan los maestros.

14.-Todos los masones deben obedecer a sus superiores y estar pronto a hacer cuanto les ordenen.

15.-Todo masón debe acoger cariñosamente a los compañeros que lleguen del continente, y les hagan las señales y signos de reconocimiento. Debe cuidar de ellos como está mandado; debe socorrer a los hermanos desgraciados, en el momento que llegue a su noticia su desgracia.

16.-Ni los maestros ni los compañeros deben dar entrada en las logias al que no haya sido recibido masón; ni deben enseñarle el arte de la forma, ni dejarle trabajar la piedra; por último, no enseñarle el compás y la escuadra ni indicarle su uso.

La Constitución de Eduardo III

En el Siglo XIV, la masonería tuvo un impulso importante por el apoyo ofrecido por Eduardo III, quien ha sido reconocido como protector de las artes y de las ciencias. Eduardo III advirtió del espíritu excelente que reinaba entre los obreros de las asociaciones de constructores, quienes siempre se conducían como personas de buenos sentimientos y por ello consideró preciso trabajaren aquellas para mantener el orden y la armonía. Durante el reinado de Eduardo III, se ocupó del examen de los principios fundamentales de la hermandad y de las variaciones que deberían introducirse para proteger a las logias. Entre las reglas que fueron aprobadas se cuentan las siguientes:

1.-Cuando las logias llegaron a ser numerosas, el muy honorable Maestro y compañeros decidieron, con la aprobación de los lores del reino (pues por esa época muchos personajes importantes eran masones) que en adelante cuando se recibiese a un hermano (ya que el título de hermano estaba, pues, desde entonces en uso) la constitución y las antiguas leyes fundamentales serian leídas por el maestro o el inspector.

2.-Que los que debían pasar por maestros masones, o maestros de un trabajo, debían someterse a pruebas, a fin de poderse asegurar si poseían los conocimientos necesarios para servir a los distintos propietarios que los empleasen, para conservar el arte en el honor y la consideración que merece y para corresponder a la confianza de sus señores; pues debían ser sus señores los que los ocupen y pagaren su trabajo.

3.-Cuando el maestro y los inspectores llegaren a reunirse en una logia, se dispone que, cuando sea necesario, el jefe del condado o el alcalde de la ciudad principal, o los alguaciles donde tiene lugar la asamblea, sean sus compañeros y auxiliares, que secunden al maestro para la defensa de las rebeliones y para mantener los derechos del Estado.

4.-Cuando un aprendiz solicite su ingreso en la sociedad, deberá comprometerse, desde luego, a querer y respetar a sus compañeros como a sí propio, y ser fiel al Rey, al Estado y a la Logia.

5.-Cuando esas asambleas hayan informado de que algún maestro o compañero no ha respetado alguno de los artículos aprobados y si, después de las obligatorias citaciones el culpable, se declarase rebelde o rehusara presentarse, la logia dispondrá que renuncie a ser masón y quede inhabilitado para ejercer su cargo; si rehusase someterse a estas disposiciones, el jefe del condado lo detendrá como prisionero y todos sus bienes pasarán a poder del Rey, a menos que le otorgue su gracia y decrete su libertad.

6.-Las asambleas se han instituido principalmente a fin de que todos los que acudan a nuestra profesión tanto el pequeño como el grande, se encuentren servidos con fidelidad, en todo el reino de Inglaterra.

Las Regulaciones de 1,663

En el Siglo XVII el espíritu de la nación inglesa se había lanzado por nuevas vías y se abandonaban viejas supersticiones y el interés se dirigía al estudio de las ciencias naturales. Se buscaba extender las ciencias por medio del experimento, el examen y la comprobación oponiéndose a la ciencia sobrenatural. Se extendió el espíritu de reforma a la religión y a la política, produciéndose reformas legislativas como la abolición de la censura a la prensa; se garantizó la libertad individual y se publicó el decreto.

Con el conocimiento intelectual imperante era imposible que la asociación de masones no tuviera cambios. Así en Diciembre de 1663 bajo la dirección del Gran Maestre Henry Jermyn, conde de San Alban, la Asamblea General renovó los reglamentos de la hermandad aprobando las siguientes regulaciones:

1.-Ninguna persona, sea quien fuera ni la posición que ocupe, podrá ser recibida entre los francmasones, cuando éstos no estén reunidos en una logia que se componga lo menos de cinco hermanos, de los cuales, el uno ha de ser maestro o inspector nombrado para el distrito o circunscripción y otro ha de formar parte del taller.

2.-No podrá ser admitida en la hermandad ninguna persona que no sea sana de cuerpo, de buen nacimiento, de buena reputación y sometida a las leyes del país.

3.-La persona que desee ser admitida entre los franc-masones no podrá ser recibida en ninguna logia si no presenta un certificado del maestro de la circunscripción o distrito en el que esté establecida la logia, certificado que el susodicho maestro ha de extender en pergamino para ser fijado en un cuadro preparado al efecto y que se coloca en el local, con el objeto de que todos los hermanos estén enterados.

4.-Toda persona admitida en la hermandad está obligada a entregar al maestro una nota con la fecha de su admisión para que se le inscriba según su antigüedad, lográndose con esto que todos los miembros de la sociedad se conozcan bien entre sí.

5.-Dicha sociedad será presidida y dirigida por un maestro. Los inspectores serán nombrados en las asambleas que se verifican anualmente.

6.-Ninguna persona será recibida definitivamente ni se le comunicarán los secretos de la asociación hasta que haya prestado el juramento de discreción.

Los Antiguos Cargos y Procedimientos

En el manuscrito hallado en los archivos de la logia Antiquity de Londres, se encontró una adición de quince Cargos de los que se dice son simples Cargos para libres y aceptados masones; Cargos y Procedimientos que deberán leerse en la iniciación de todo candidato a la Francmasonería. Estos son los siguientes:

1.-Ningún Masón debe comprometerse a ejecutar un trabajo a su Lord o a hombre alguno, si no se siente debidamente capacitado para realizarlo, tomando en cuenta no resentir el prestigio de la Orden.

2.-Ningún Maestro dará principio a obra alguna si no se recibe por ella la debida retribución, a fin de que su Lord pueda ser servido con fidelidad, el Maestro vivirá con honradez y el salario de los compañeros satisfecho puntualmente.

Que ningún Maestro o Compañero reemplace a otro en el trabajo, es decir, que si se ha tomado a cargo una obra, deberá permanecer como Maestro o Compañero hasta terminarla, salvo caso que le falte destreza y habilidad y no pueda concluirla, en cuyo caso no debiera haberse hecho cargo de ella.

Que ningún Maestro o Compañero deberá tomar un Aprendiz por un periodo menor de siete años.

Que el Aprendiz sea hijo legítimo, nacido libre y dotado de cuerpo sano y miembros completos.

Que ningún Maestro o Compañero ejercite prerrogativas personales para iniciar un profano, sin el consentimiento de sus Compañeros, requiriéndose para tal objeto, por lo menos, el concurso de seis o siete de ellos.

3.-Que quien se inicie deberá encontrarse capacitado para recibir los demás grados, es decir, ser nacido libre, de buena cuna, sincero y en completa posesión de sus miembros, como todo hombre debe tenerlos.

4.-Que un Maestro no deberá tomar un Aprendiz si no tiene ocupación que proporcionar, por lo menos, a tres Compañeros.

5.-Que ningún Maestro o Compañero abandone la obra de su Lord en trabajo, salvo que se trate de día feriado.

6.-Que todo Maestro pague a sus Compañeros y servidumbre tal como lo merezcan, a fin de que no se le tache de incumplido. Y que nadie murmure a espaldas de otro con fin de empañar su reputación.

7.-Que ningún Compañero, tanto en la casa como fuera de ella, conteste torpe y reprochablemente sin haber motivo para ello.

8.-Que todo Maestro Masón deberá guardar los fueros a sus mayores y que un Masón no deberá ser un vulgar jugador de cartas, de dados, de juegos de azar o de cualquier otro juego ilegal, por cuya causa las Ciencias y la Orden puedan deshonrarse y perjudicarse.

9.-Que ningún Compañero vaya solo y de noche a la ciudad, sino acompañado de otro Compañero qué pueda guiarle y afirmar que estuvo en un sitio honesto.

10.-Que todo Maestro o Compañero deberá concurrir a las Asambleas a que hubieren sido previamente citados, aunque vivan a cincuenta millas de distancia. Y si hubieren violado la orden, se impedirá la recompensa de Maestro y Compañeros.

11.-Que todo Maestro Masón o Compañero que hubiese traicionado la Orden, estará sujeto al dictamen de otros Maestros y Compañeros que aplicarán la pena y si no lograsen hacer justicia podrán dirigirse al fuero común.

12.-Que cualquier Maestro o Compañero no labre la piedra en forma cúbica o la diseñe si no es para darle término; ni deje trabajo comenzado sin concluir ya sea dentro como fuera de la logia.

13.-Que todo Masón reciba y atienda a los Compañeros extranjeros, cuando I leguen al país, dándoles trabajo. Y si ellos quisieran trabajar, como es de regla, es decir, si el Maestro tuviese alguna piedra que labrar, él les dará la piedra y les señalará un sitio en las labores. Y si no tuviera ninguna, el Masón les suministrará dinero para que pueda continuar viaje y alcanzarla próxima logia.

14.-Que todo Masón deberá servir con fidelidad a su Maestro por el salario que recibe.

15.-Que todo Maestro deberá terminar con fidelidad su tarea, obra o jornada, donde quiera que se encuentre.

Bibliografía:

Diccionario Enciclopédico de la Masonería de Lorenzo Frau Abrines

Manual del Aprendiz Masón, Rito de York de Jorge A. But/ery Eduardo

Mendoza Si/va. Manual del Compañero Masón, Rito de York de Jorge A.

Butler y Eduardo Mendoza Silva.

REGULACIONES Y CARGOS

La Regulación de 1,703

Esta Regulación adoptada a principios del Siglo XVIII, durante la Maestría de Sir Christopher Wren, como consecuencia de la decadencia de las logias, no sólo con el propósito de aumentar el número de sus miembros, sino también el de regularizar la situación de los masones no operativos, tuvo finalmente influencia decisiva en el carácter futuro de la Orden.

La base de la Masonería Moderna está condensada en el enunciado de esta Regulación, que dice así: ««Qué el privilegio de ser masón, no queda restringido únicamente y por más tiempo a los albañiles operarios, sino que se extiende a los hombres de las diversas profesiones, con tal que ellos sean regularmente aprobados e iniciados en la Orden».

La regulación de 1,717

Esta regulación que se adoptó el día 24 de Junio de ese año a raíz de la «Instalación de la Primera Gran Logia» del sistema especulativo realizada en la ciudad de Londres, dio motivo al nacimiento de la actual Masonería.

La regulación de 1,720

En la reunión trimestral de la Gran Logia de Inglaterra que tuvo lugar el 24 de Junio de 1720, se adoptó esta Regulación. Ella se refiere a las elecciones de Gran Maestro.

Las regulaciónes  générales  de 1,721

La primera compilación que de esta Regulación se efectuó, se debe a George Payne que la llevó a cabo siendo Gran Maestro durante el año 1720.

Los artículos originales, en número de treintinueve, que fueron publicados en la primera edición, son considerados hasta la fecha, con justo titulo, parte inviolable de las Leyes escritas de la Francmasonería Universal. A continuación se tiene una relación abreviada de   Las Treinta y nueve Regulaciones.

Regulación N° 1: Se refiere a la prerrogativa del Gran Maestro de presidir toda logia regular de su jurisdicción, inclusive la Gran Logia. Esta Regulación está en concordancia exacta con el Lindero V.

Regulación N° 2: Se refiere al derecho y facultad de todo Venerable Maestro de convocar y reunir a sus Hermanos en Logia, según las conveniencias masónicas, indicando la época y lugar.

También establece el orden de sucesión en la dirección de la logia en caso de ausencia, enfermedad o muerte del Venerable maestro. Los Linderos IX y X están relacionados a esta Regulación.

Regulación N° 3: Obliga a la existencia de un Registro de Miembros, de Reglamentos, de Estatutos, así como de un Libro en el que se anota, por quien corresponda, de los trabajos efectuados en cada reunión o tenida.

Regulación N° 4: Se establece la edad y condiciones de los profanos para ser iniciados, la que es ampliamente regulada por el Lindero XVID.

En otro acápite regula el número de Recipiendarios, diciendo: «ninguna logia puede admitir a la vez más de CINCO hermanos» (sic) lo que establece el número máximo de candidatos para las tenidas de iniciación.

Regulación N° 5: Reitera las condiciones para el ingreso de la Fraternidad como está perfectamente indicado en el Lindero XVIII.

Regulación N° 6: Se refiere a las condiciones para la aprobación de la solicitud de un profano, así como la unanimidad del consenso aprobatorio de los miembros de la logia con respecto al Candidato «Privilegio inalienable, común a todos tos miembros, a los que considera como los mejores jueces de sus futuros compañeros"

Regulación N° 7: Las obligaciones de los Hermanos con respecto al Tesoro de la Logia, así como la de la caridad y los encargados de la custodia de esos fondos, son materia de la presente regulación. Asimismo, establece, obligatoriamente, el sometimiento del Recipiendario a los Reglamentos Generales de la Orden como indica claramente el Lindero XVII.

Regulación N° 8: Indica las formas y procedimientos para la separación de los masones de sus primitivas logias, solicitando su Cese; el establecimiento de nuevas logias conforme a la autorización que indica el Lindero VII y la posesión obligatoria de una Carta Constitutiva otorgada por Autoridad competente, reafirmando la Regulación del 24 de Junio de 1717.

Regulación N° 9: Se refiere a la Justicia Masónica y a las normas, sanciones y penas de sentido moral. También indica su futura y completa legislación «Para la moralidad de sus miembros».

Regulación N°10: "La mayoría de cada Logia particular tiene el privilegio, cuando es convocada, de comunicar sus instrucciones a su Venerable Maestro y a sus Vigilantes, ante la Gran logia, donde los Venerables y Vigilantes son los Representantes de la Logia y están considerados como los ecos de su voluntad".

Regulación N° 11: Todas las logias aisladas están obligadas, en cuanto es posible, a practicar los mismos USOS, y por este motivo, a fin de mantener la buena inteligencia entre todos los Hermanos, se designará en cada logia algunos miembros que se encarguen de visitar las otras logias cuantas veces se crea conveniente.

Regulación N° 12: Esta regulación establece la forma de reunirse para las deliberaciones en una Asamblea de Gran Logia. Quiénes se conforman como miembros natos. Por quién está presidida. Las fechas de reunión obligatoria. Las formas de sus decisiones y la cantidad de votos por logia. Es uso y costumbre en nuestro oriente, que las logias son representadas por los que las gobiernan y que sus decisiones se aprueban por mayoría.

Regulación N° 13: Determina la organización, facultades, prerrogativas y dirección de las reuniones referentes a una Gran Logia. Asimismo se designan las atribuciones y deberes de los Tesoreros y Secretarios así como la distribución y empleo de los fondos de la Logia con la inspección que, por derecho propio, tiene quien dirige la logia ola Gran Logia.

Estas disposiciones, facultades y prerrogativas fueron conferidas a las logias particulares para su mejor gobierno.

Regulación N° 14: Se refiere, una vez más, a las Asambleas de Gran Logia e indica quién preside la Gran Logia en ausencia del titular, indicando como primer reemplazante a su Diputado y en segundo término a los Grandes Vigilantes. Posteriormente se modificó la Regulación y se consignó como segundo reemplazante al Gran Maestro anterior y se adoptó asimismo, para el uso y cumplimiento de las logias particulares y su gobierno.

Regulación N° 15: Se afirma el derecho funcional de los miembros titulares de los Cuadros Lógicos, elegidos y consagrados, a no ser reemplazados en sus funciones «per témpore», estando el los presentes.

El resto de esta Regulación indica los derechos de los Vigilantes a nombrar funcionarios subalternos para cubrir los cargos de los inasistentes como se conserva hasta la fecha, pero solamente en cuanto a la condición de «per témpore», con la aprobación de quien dirige los trabajos y con la duración de la reunión en la que se hace el nombramiento.

Regulación N° 16: Se refiere al antiguo orden que debían seguir todos los asuntos que eran sometidos a la consideración del Gran Maestro. En la actualidad el orden de los asuntos para tratar por la Gran Maestría, está repartido entre los funcionarios de la Gran Logia y por ende, en las logias particulares.

Regulación N° 17: Son incompatibles los cargos de Venerable maestro o Vigilante de una logia particular, con los cargos de Gran Maestro, Diputado Gran Maestro, Grandes Vigilantes, Gran Secretario y Gran Tesorero».

Regulación N° 18: Se establece que por enfermedad o ausencia del Diputado Gran Maestro, el Gran Maestro puede nombrar un Diputado «per témpore» mientras dure la ausencia del titular con la imprescindible condición de que éste sea Miembro Activo de la Gran

Logia. También establece las normas a seguir en caso de diferencias entre dicho Diputado y los Grandes Vigilantes, pues la armonía y la paz debe ser preservada.

Regulación N° 19: Establece el caso hipotético de la desobediencia de las logias ala Más Alta Autoridad, dejando establecido «que anteriormente en esta Antigua Fraternidad, no ha habido ocasión de tal hecho por lo que deberá hacerse una nueva y especial Regulación, ya que los anteriores Grandes Maestros han actuado con Sabiduría en su noble oficio.

Regulación N° 20: Exige, enfáticamente, que tanto el Gran Maestro, el Diputado y los Grandes Vigilantes, visitarán por lo menos una vez cada una de las logias de la obediencia durante su mandato.

Regulación N° 21: Reitera la sucesión de quien dirige los trabajos en ausencia del titular, Las Grandes Logias actuales han reglamentado la forma de sucesión en sus Reglamentos particulares conformándolos a los Usos y Costumbres establecidos.

Regulación N° 22: Fija las fechas de reunión de la Gran Logia así como las fiestas obligatorias de la Fraternidad que corresponden a los días de San Juan Bautista y San Juan Evangelista sustituyéndolos por lo solsticios de Invierno y Verano. Estas fiestas tradicionales de la Orden Masónica, son ineludibles y también recomendables porque llevan consigo un elevado espíritu de fraternidad, que es lo que prima en aquellas reuniones.

Regulación N° 23: Complementa a la anterior señalando las personas encargadas de preparar todo lo conveniente para la celebración de dichas fiestas.

Regulación N° 24: Siguiendo con las instrucciones referentes a las festividades de la Orden, la Regulación indica las normas a seguir a cargo de los Grandes Vigilantes, «para el mejor éxito de la celebración».

Regulación N° 25: Regula la admisión de los miembros de la fraternidad proveyendo el establecimiento de un Comité compuesto por un miembro de cada una de las logias particulares a fin de que con pleno conocimiento sea discernido el ingreso al ágape fraternal sin que ningún profano pueda ser admitido, y señala que este Comité debe reunirse lo más temprano posible en el lugar del refrigerio a fin de cumplir con su cometido.

Regulación N° 26: La transcribimos literalmente: «El Gran Maestro nombrará dos o más hermanos veraces para el cargo de Porteros o Cuidadores de Ingreso; los cuales se presentarán a hora temprana en el lugar de la reunión por muy buenas razones y quienes estarán subordinados al Comité indicado en la Regulación anterior».

Regulación N° 27: Establece para los Vigilantes y para el Director de Ceremonias, la facultad de nombrar, de antemano, un número ilimitado de hermanos para la atención de los concurrentes.

Regulación N° 28: Esta regulación que se encuentra estrechamente ligada al Lindero XIII, «El derecho de todo masón de apelar ante la Gran Logia de las decisiones de su Logia permitía a los asistentes a las festividades de la Fraternidad, presentar directamente ante el Gran Maestro sus casos de apelación para que fuera fraternalmente decidida antes de la comida, si fuera posible, para que durante ella reinara la armonía entre los Hermanos. En la actualidad estas diferencias son resueltas en organismos especiales de conformidad con pautas reglamentarias que posee o establece cada Gran Logia en su Jurisdicción.

Regulación N° 29: Indica que con ausencia del Gran maestro, del Diputado, los Grandes Vigilantes, Capellán, Secretario, Tesorero y Director de Ceremonias; los venerables Maestros y Vigilantes de las logias particulares, se reunirán y consultarán fraternalmente acerca de la elección de un nuevo Gran Maestro o la continuidad del presente. La elección deberá ser en el primer caso, unánime yen ambos casos tendrá la duración de un año.

Regulación N° 30: «Los Venerables maestros y los Vigilantes conversarán fraternalmente o como les agrade para que la reunión sea placentera y mientras la comida llega, cada hermano tomará asiento alrededor de la mesa».

Regulación N° 31: Durante la reunión se aclara que LA GRAN LOGIA ESTA FORMADA, a pesar de encontrarse presentes Hermanos que por sus grados no son miembros titulares de la Gran Logia y que por lo tanto, están impedidos de hacer uso de la palabra a menos que sea expresamente permitido.

Regulación N° 32: Se refiere a la proclamación, después de la reunión del Gran Maestro para el siguiente año, En caso de que sea reelegido y previa su aceptación, lo Hermanos le rendirán el homenaje a su investidura masónica.

Regulación N° 33: Indica que en el caso que el Gran Maestro no deseara o no pudiera continuar con el cargo, podrá proponer su sucesor, el que al ser aprobado por los miembros de la Gran Logia, será de inmediato proclamado y congratulado como el nuevo Gran Maestro, y tan pronto como esto suceda será de inmediato instalado, de acuerdo a los Usos, por el último Gran Maestro.

Regulación N° 34: Si la proposición para nuevo Gran Maestro no fuera aprobada por unanimidad, establece una nueva forma de elección, ya en desuso, por balotas.

Regulación N° 35: Se establece el derecho del Gran Maestro, también en desuso, de nombrar un Diputado Gran Maestro y a los Grandes Vigilantes. Si estos últimos merecieran la aprobación unánime de la Gran Logia, serán declarados y saludados como tales, pero si no fueran aceptados unánime-mente se llevará a cabo una elección por

balotas como parad caso de la elección de Gran Maestro. «Así como los Vigilantes de la logias particulares son escogidos por Balotasen cada logia». (sic).

Regulación N° 36: Indica la necesidad de la presencia física del Gran Maestro electo para su proclamación.

Regulación N° 37: Establece que un Hermano designado por los miembros de la Gran Logia dirigirá la palabra al Gran Maestro electo congratulándolo en nombre de la Fraternidad. También podrá presentar dicho hermano, mociones en bien de la Fraternidad, las que serán de inmediato consideradas dictaminadas.

Regulación N° 38: El Gran Maestro, su Diputado o al hermano designado por él, arengará a los Hermanos presentando su programa de gobierno «el que no podrá ser escrito» (sic).

Regulación N° 39: Dice así: «Cada reunión anual de Gran Logia tiene el inherente poder y autoridad de hacer nuevas Regulaciones o alterarlas para el real beneficio de esta Antigua Fraternidad proveyendo que los antiguos, Mojones (Linderos) sean cuidadosamente preservados.

Esta Regulación, hecha para el uso exclusivo de la Gran Lago de Inglaterra, posteriormente ha sido aprobada y usada todas las Grandes Logias del Mundo como lo indica y exige LinderoXXV.

Los Cargos Aprobados en 1,722

Estos cargos fueron presentados a la Gran Logia, por los Anderson y Desaguliers en el año 1721 y la Gran Lo después de un detenido estudio, los aprobó el 25 de Marzo de 1722. Al ser publicados en el "Libro de la Constitución", se les dio el siguiente título: «Cargos de un Francmasón; extractados de los antiguos Registros de las Logias de Ultramar, de Inglaterra, Escocia e Irlanda, para el uso de las Logias de Londres y que deberán ser leídas a la Iniciación de Nuevos Hermanos o cuando el Venerable Maestro lo ordene".

1.-De lo que concierne a Dios y a la religión

El Masón está obligado, por su condición o carácter, a obedecer la Ley Moral; y si entiende correctamente el Arte, jamás podrá ser un estúpido ateo, ni un libertino irreligioso.   Se suponía que los masones de los tiempos antiguos pertenecían a la religión dominante del país en que vivían, cualquiera que ella fuese; y aunque hoy todavía se sigue la misma tradición, esta concordancia facilita a que todos los hermanos estén de acuerdo, guardando sus opiniones personales para sí mismos; esto es: ser hombres buenos y sinceros; ser hombres de honor y honrados, sin importar el nombre de la creencia que los separe.

2.-Del magistrado civil, supremo y subordinado.

Un Masón es un ser pacífico, donde quiera que resida o trabaje, y jamás deberá encontrarse envuelto en complots y conspiraciones en contra de la paz y el bienestar de la nación, ni menos conducirse impropiamente para con los magistrados de categoría inferior. Si un hermano se mantiene rebelde en contra del Estado, éste no podrá ser apoyado en sus rebeldías, sino al contrario, compadecido y considerado como hombre infeliz. Y si su única falta fuera ésta, la Fraternidad está obligada a no darse por entendido de ella a fin de que las Autoridades Políticas no encuentren asidero posible para actuar en lo futuro en contra de la Orden. Tampoco podrán los Hermanos de logia expulsar al rebelde, permaneciendo siempre en ella y conservando intangiblemente todos sus derechos.

3.-De las logias

Logia es el lugar donde los masones se reúnen a trabajar. También se da el nombre de logia a toda asamblea o sociedad de masones debidamente organizada. Todo hermano debe forzosamente pertenecer a una logia, con el propósito de estar sujeto a sus disposiciones y reglamentos generales. Pueden ser particular o general, según funcionara en ella una o más organizaciones. La asistencia de los Hermanos a la Logia debe ser ininterrumpida y además están obligados a guardar los reglamentos de la Gran Logia de la que dependen.

En los antiguos tiempos, ningún Maestro ni Compañero podían dejar de estar presente en Logia, sobre todo cuando se les había citado previamente. La inasistencia era motivo de severas censuras y era necesario probar, tanto al Venerable Maestro, como a los Vigilantes, la existencia de poderosas razones y causas que la generaron. Toda persona admitida como miembro de una logia debe ser buena, sincera, leal, nacida libre, de edad madura y discreta; no liberto, ni mujer, ni inmoral, ni escandaloso; sino de buena reputación.

4.-De los venerables maestros, vigilantes, compañeros y aprendices.

Todo ascenso entre los masones esta basado únicamente en el valor real y el mérito personal, a fin de que los Señores sean bien servidos, los hermanos no tengan la oportunidad de avergonzarse ni la real Orden pueda ser despreciada. De aquí el gran cuidado que debe ponerse en la elección del Venerable maestro y los Vigilantes respecto de los cuales impera solo el mérito, no teniendo valor alguno la antigüedad.

Es casi imposible describir estos puntos por escrito. Todo hermano debe siempre estar firme y constante en su puesto con el fin de empaparse de estas ideas peculiares sólo a nuestra Fraternidad. Los candidatos deben saber únicamente que el Maestro está facultado para tomar a un Aprendiz, solo y cuando tenga suficiente ocupación para él y a condición de ser un joven perfecto, sin lesiones ni defectos físicos que le imposibiliten el aprendizaje del Arte, digno de ser un Hermano y después, y a su debido tiempo, su Compañero. Debe descender, además, de padres honrados, esto es: que cuando en lo futuro se valoricen sus méritos personales, se halle en condiciones de alcanzar el honor de ser vigilante: después el Venerable de la logia; y más tarde gran vigilante; y al fin, Gran maestro de la Orden. Ningún hermano podrá desempeñar el cargo de Vigilante, si no ha pasado el grado de Compañero; ni Venerable Maestro sino ha actuado de Vigilante por un período legal; ni Gran Vigilante si no ha sido Venerable Maestro de una Logia; ni Gran Maestro sino ha sido Gran Vigilante, salvo el caso que sea elegido por toda la Fraternidad, pero que sea un Maestro Masón.

5.-De la dirección de la orden durante los trabajos

Todo Masón deberá trabajar honradamente los días de trabajo, a fin de poder vivir sin resquemores los días feriados; y que observen rigurosamente las leyes del país, o aquellas confirmadas por las costumbres. El Masón más experto entre los Maestros de la Orden, deberá ser escogido y elegido Maestro o Administrador de las obras de su Señor, quien recibirá la denominación de «Venerable» por todos aquellos que trabajan a sus órdenes.

Los obreros deberán en todo momento evitar cualquier lenguaje impropio, y no llamarse uno a otro por nombres desagradables; el nombre que deberán darse entre sí es el de Hermano. Deberán igualmente, comportarse entre sí, con cortesía, tanto dentro y fuera de la logia. Tanto el Venerable Maestro como todo Masón que reciba su salarios con puntualidad, deberá ser fiel a su Señor y concluir con honradez, su trabajo o su tarea, o su jornada. No deberá poner en trabajo una obra, que según costumbre haya sido destinada a otros fines. Nadie manifestará envidia por la prosperidad de un hermano, ni lo suplantará o despedirá del trabajo, si es capaz de concluirlo por si mismo; por que ningún hombre puede concluir el trabajo de otro, y con tanta mayor razón si es en beneficio de su Señor, salvo que esté profundamente familiarizado con los diseños y proyectos de aquel que lo comenzó.

Cuando un Maestro es elegido Vigilante de los trabajos, deberá seguir guardando fidelidad, tanto al Venerable Maestro como a los Maestros. Su obligación es cuidar celosamente los trabajos en presencia, como en ausencia del Venerable Maestro, en cuyo caso los hermanos deberán obedecerle.  Todos los Hermanos recibirán puntualmente sus salarios, sin murmuración ni rebeldías. Tampoco abandonarán al Venerable Maestro hasta que este haya dado fin a la tarea. No deberá emplearse a ningún obrero corriente en los trabajos propios de Masonería. Tampoco trabajarán los libres masones al lado de quienes no lo sean, salvo una necesidad urgente. No podrán los Masones enseñar las Artes a estos obreros corrientes y profanos, como ellos le enseñarían a cualquier Hermano.

6.- De la conducta

a)En Logia Abierta.- No debe llevarse a cabo reuniones aisladas ni conversaciones separadas, sin permiso del Venerable Maestro. Tampoco deberá hablase de modo inconveniente e impropio, ni menos interrumpir, ya sea al Venerable Maestro, a los Vigilantes, o cualquier Hermano en el instante de dirigir la palabra al Venerable Maestro. No deberán comportarse en tono de burla, de broma o de chanza en los momentos que la logia se halla ocupada en asuntos

serios y solemnes. No deberá hacerse uso de un lenguaje indecente acerca de un tema cualquiera en discusión, sino demostrar siempre reverenda al Venerable Maestro a los Vigilantes y a los Compañeros y tratar de conservarles su prestigio y honor.

b)De la Conducta de los Hermanos después de clausurados los trabajos; pero, antes de que se hayan retirado.- Los Hermanos se hallan en libertad de gozar con inocente regocijo, procurando tratarse con afabilidad y gentileza, impidiendo todo exceso, evitando el forzar a comer o beber a otro hermano, más allá de lo usual y corriente, o impidiéndole retirarse cuando sus necesidades lo requieran, o ya sea diciendo alguna cosa ofensiva que impida toda fácil y libre conversación, por que todo ello vendría en desmedro de la Hermandad, deshaciendo y destruyendo sus laudables fines y propósitos.  No deberá llevarse al seno de la logia, diferencias ni disputas exteriores, ni mucho menos aún discusiones sobre temas religiosos, políticos o de nacionalidad, raza, idioma, religión o credo político.

c)De la conducta de los hermanos cuando se encuentran solos, sin la presencia de extraños, pero no en logia.- Deberán saludarse respectivamente de modo cortés llamándose mutuamente (<HERMANOS» y dándose el uno al otro una recíproca y voluntaria instrucción, tanto como se estime conveniente. Deberán evitarse el ser oídos u observados de extraños viendo modos de no incurrir en extralimitaciones que relajen el debido respeto que deben guardarse para todo Hermano.

d)De la conducta en presencia de extraños.- Los Masones deberán ser en extremo celosos, tanto en su conducta como con las palabras que empleen; a fin de que el extraño perspicaz no tenga oportunidad de descubrir o hallarlo que no debe conocer.

e)De la conducta en el hogar y con el vecindario.- Los masones deberán sujetar su vida a los principios de moralidad y virtud y no dar motivo para que la familia o los vecinos tomen nota de lo que puede referirse la logia, conservando en todo momento el propio honor y el de la Antigua Hermandad. También deberá conservarse la salud y no permanecer juntos entretenidos en copas, alejados del hogar después de finalizar los trabajos. También deberá cuidarse de la glotonería y de la ebriedad a fin de que las respectivas familias no se vean olvidadas o perjudicadas.

f)De la conducta respecto de un Hermano forastero.- Todo forastero debe ser examinado con cautela tal como lo dicta la prudencia, a fin de no dejaros sorprender por falsos e ignorantes pretendientes a quienes deberéis rechazar con desprecio y escarnio, cuidándoos de darle a conocer algunos puntos; pero si descubrís que es un genuino

y fiel hermano, estáis obligados a respetarle según su grado Si se halla necesitado deberéis prestarle ayuda. Si no pudiereis ejercerla servirle eficazmente. Deberéis ocuparle por algunos días o bien recomendarle para que pueda encontrar ocupación. Pero no estáis obligado a ir más allá de vuestras posibilidades; sino solamente a preferir al hermano pobre, con tal que sea honrado y bueno que preferir a cualquier profano en idéntica circunstancia.



LA TOLERANCIA



En el esfuerzo de buscar los medios para vivir, el mundo se olvida de lo que es esencialmente importante para la vida misma: Saber quienes somos, de donde venimos, adonde vamos, cuales son las reales finalidades de nuestra existencia.

Los hombres luchan y combaten, tratan recíprocamente de destruirse o sujetarse mutuamente, para finalmente comprender que la ley de la vida es la COOPERACIÓN y únicamente en la medida en que se entienda y realice, puede haber en la existencia, tanto individual como colectiva, BELLEZA y ARMONÍA.

La práctica de la COOPERACIÓN exige necesariamente, el reconocimiento de la TOLERANCIA..

Para la Masonería, es la COLUMNA VERTEBRAL, es la reina de nuestra jerarquía de valores, constituye la guía que mantiene la cohesión y el prestigio de nuestra Orden.

Este valor refleja la personalidad del individuo, y es la expresión de su tono moral, cultural, afectivo y social. SIN TOLERANCIA, NO HAY LIBERTAD, NI IGUALDAD, NI FRATERNIDAD, NI OTROS VALORES, que nos permitan la COOPERACIÓN, la sociedad está fundamentada en ella, comprende el ámbito de lo material, sin TOLERANCIA se derrumbaría el edificio social, por las fricciones y fuerzas divergentes; se agarrotarían las máquinas, las ciencias volverían al oscurantismo de la épocas pasadas, dominadas por la rigidez y las VERDADES ABSOLUTAS.

La diferencia entre los masones y la sociedad profana viene determinada por el grado de TOLERANCIA de unos hacia los otros. SOLEMOS HABLAR MUCHO DE ESTE VALOR, PERO NO LLEGAMOS A ADQUIRIR UNA CONCIENCIA TOTAL DEL PESO Y LA RESPONSABILIDAD QUE SUPONE LLEVARLO A LA PRACTICA.

Nuestra mente rodeada de aspectos, políticos, sociales, económicos, filosóficos, religiosos, etc. de la sociedad en la cual vivimos, esta tan condicionada a nuestro ambiente y a nuestra posición social, que solemos unas veces conscientes, y otras inconscientemente, RIDICULIZAR, BURLARNOS, ENFADARNOS e incluso DESPRECIAR A AQUELLOS QUE NO PIENSAN COMO NOSOTROS, nos convertimos en pequeños dictadores que solo ven los defectos de los demás sin ver los defectos propios .

La Tolerancia en mi modesta opinión, es un aprendizaje constante y muy duro, además; se necesita mucha sabiduría y una grandeza de espíritu para llevarla a la práctica.

Nuestra forma de vida nos lleva a emborracharnos de vanidad, arrogancia, vanagloria, falsa modestia y otros mecanismos de defensa, de los que se provee nuestro consciente e inconsciente para justificarse de nuestras actitudes ante nosotros mismos.

TOLERANCIA significa, respeto a la libertad de los demás, a sus formas de pensar, de actuar, a sus opiniones políticas, sociales, económicas, religiosas, filosóficas etc. Significa el reconocer los derechos, la dignidad y decoro de una persona o cosa, absteniéndose de ofenderlos. Significa, soportar, sufrir, aguantar, admitir ideas u opiniones distintas de las propias.

La más amplia TOLERANCIA, es por lo tanto necesaria en materia de ideas y opiniones, imponiéndose como primera condición de la vida y de las actividades masónicas. También como postulado necesario para que las diferencias entre las ideas no impidan la realización de la solidaridad la cooperación y el espíritu de Fraternidad.

Que cada uno de nosotros se esfuerce, según las posibilidades de su inteligencia y haga el uso mejor y más sabio de sus conocimientos, pero que se cuide de no censurar a los demás, ya sea porque él no entiende a los demás, o porque ellos no le entiendan, siempre ocurre uno de los dos sentidos, y con frecuencia, ambos a la vez.

Recordar que toda opinión sincera merece por tal razón ser respetada, aunque no convengamos en lo concreto sobre la misma. LA VERDADERA LIBERTAD DE PENSAMIENTO SE MIDE POR LA LIBERTAD QUE CADA INDIVIDUO SABE CONCEDER A LOS DEMÁS.

Siendo infinitos los puntos de vista desde los cuales puede considerarse la VERDAD, es siempre presuntuoso, denotando fanatismo y estrechez de miras, el hacerse juez de las opiniones ajenas.

En realidad a ninguno puede considerársele absolutamente en el error, y pocos son los que pueden afirmar estar absolutamente en posesión de la verdad; la mayoría de las opiniones que se expresan participan, en diferente medida, del error y la verdad, siendo tentativas y aproximaciones entre las dos polaridades.

Es además y sobre todo importante que cada hombre, busque. Encuentre y se abra su propio camino individual hacia la LUZ. Nunca podremos pretender encontrar una absoluta uniformidad de opiniones y de ideas, si bien es cierto que estas se acercan entre ellas, tanto más cuanto más convergen las mentes individuales hacia la VERDAD.

¿Sois Masón?



Solo recordaba aquel fuerte dolor en el pecho. ¿Cómo llegue aquí?

El ambiente era familiar, yo ya estuve aquí una vez ¿pero cuando? Caminaba sin rumbo. Personas desconocidas pasaban a mi lado, pero no-tenia el coraje para hablar con ellas.

Esperé, y me pregunte: ¿Qué grupo es aquel reunido con trajes negros? ¡Lógico! Estaré llendo o viniendo de un entierro. ¡No, claro son Hermanos!

Me aproximé al grupo. Al verme llegar, interrumpieron su diálogo. Discretamente me identifiqué como Aprendiz, obteniendo respuesta. La alegría fue inmediata. ¡Estaba entre Hermanos! Me identifique con mi nombre y grado. Pregunté ansioso lo que estaba sucediendo conmigo.

Me respondieron con mucha suavidad y fraternalmente: Había muerto... Me asusté mucho... ¿y mi familia? ¿mis amigos?... ¿como están?. Están bien, están siendo atendidos por la Orden, no se preocupe... a su debido tempo los verá, me respondieron.

Todavía asustado, pregunté el motivo de sus vestimentas. Estamos camino a nuestro Templo, fue la respuesta. ¿Templo? ¿Mis HH.'. tienen uno? Sí... ¿Porque no?

Me sentí mas tranquilo, yo soy un Gran Inspector General de la Orden y con seguridad recibiré los honores debidos a mi posición.

Pedí poderlos acompañar, y así fue. Después de una pequeña caminada vi el Templo.

Confieso que me quedé admirado por su gran belleza. Las columnas de la entrada, majestuosas.

Nunca antes había visto nada igual. Imaginen como debería ser su interior y como me sentiría al participar en sus trabajos.

Caminamos en silencio, al llegar a la entrada del Templo, los pasos perdidos, me encontré con Hermanos hablando animadamente, pero en un tono respetuoso. Uno de ellos, el que me acompañaba, llamó al que estaba frente de él.

¡Hermano Guardatemplo! acompañe al Hermano recién llegado y con él espere en la antesala de los pasos perdidos. ¿No entendí bien?

Yo había mostrado mis credenciales y no era ese el tratamiento que se me debería dar.

Esperé unos instantes, seguro de que me preparaban una recepción más fraternal.

Con certeza están preparando alguna ceremonia especial para mi entrada; en realidad un grado 33 no podría esperar nada diferente.

Verifiqué que los Hermanos que habían quedado en el atrio, en silencio, estaban formando un cortejo para el ingreso al Templo.

Por la distancia no conseguí escuchar lo que los Hermanos decían? Un rayo de luminosidad los invadió a todos.

Entraron silenciosamente en el Templo. Junto a mi se quedó el hermano Guardatemplo. De tanta emoción no conseguía decir palabra.

El tiempo pasó... no se cuanto tiempo. Finalmente la puerta del Templo se abrió y salió el Hermano Primer Diacono, se dirigió a mí y me comunicó que sería recibido ya.

Ajusté el mandil e hinché mi pecho. Comprobé que mi collar y las medallas estuvieran en orden y lo acompañé.

Estaba un poco intranquilo: ¿Quien no lo estaría en estas circunstancias? Respiré profundamente y entré ritualmente al Templo.

Extraño... esperaba encontrar lujo y esplendor, mucha riqueza. Comprobé, de inmediato, una simplicidad enorme.

Una luz brillante, que no se de donde venía, iluminaba todo el ambiente. Saludé al Venerable Maestro y a los vigilantes en la forma acostumbrada.

Nadie se levanto por haber ingresado, mi entrada era casi ignorada.

Ningun protocolo ni honores acompañó mi caminar.

Todos se mantenían silenciosos y en actitud respetuosa.

Realmente no sabía que hacer... era todo diferente para mí. Esperaba instrucciones... y por fin ellas vinieron con la voz firme del Venerable Maestro: ¿Sois Masón?

Reconociendo la necesidad de la comprobación en tales circunstancias respondí: Mis HH.'. me reconocen como tal. Sonreí para mis adentros mientras esperaba tranquilamente la pregunta que seguia y el momento adecuado para demostrar mis conocimientos y desenvoltura.

Pero, el Venerable Maestro dirigiéndose a los presentes, preguntó: ¿Los Hermanos aquí presentes lo reconocen como Masón? El silencio fue total.

Me asuste ¿qué era esto? ¿Porqué tal pregunta? Esto con certeza no era parte del Ritual. Dirigiéndose a mí, el Venerable Maestro respondió: Mi querido Hermano visitante, los Hermanos aquí presentes no lo reconocen como Masón.

¿Cómo no? Dije.

¿No ven mis insignias, mis pruebas de Cargos pasados? ¿Mis diplomas? ¿Mis medallas?¿no verificaron mis documentos? Interróguenme!

Si querido Hermano, respondió solemnemente el Venerable Maestro. Más por el hecho facto de haber ingresado a la Orden, tener Diplomas, ostentar insignias y medallas, no basta para ser reconocido masón.

Es preciso antes que nada haber construido su "Templo Interior" y verificamos que esto no ocurrió con el Hermano.

Observamos, que a pesar de haber tenido todas las oportunidades de estudio y de haber llegado al mayor de los Grados, no has realizado ningún progreso personal. Su pasaje por el arte Real fue efímero.

No conseguí aguantar más y respondí: ¿Cómo efímero?

Ustedes, que todo lo saben, ¿no observaron mis actitudes fraternas?

El V.'.M.'. me interrumpió: Hermanos... veamos entonces su defensa:

De inmediato enfocó una pantalla como de televisión y en la imagen me reconocí junto a un grupo de Hermanos haciendo comentarios humillantes contra otros Hermanos, burlándome con la presencia de los aprendices, contando chistes en el atrio, conversando y desatencion durante las tenidas, intolerante con los Hermanos, haciendo gestos para llamar la atención de mi presencia en Logia...

¡Era verdad! Me dio vergüenza... traté de justificarme, pero no encontraba argumentos para mi defensa.

Recordé entonces mis acciones benéficas y hablé de ellas, mis esfuerzos con las agrupaciones Masonicas, mi Carrera Masonica.

Mudando la imagen como se mudan en la Televisión, me vi colocando la mano vacía en la bolsa de caridad.

Era verdad y por costumbre lo hacia así, por pensar que el óbolo no sería bien utilizado...

Pensaba que yo le daría mejor destino, pero, por desgracia, nunca lo hacia...

Me vi en las visitas a los Hermanos enfermos y comprendí que era más por obligación y por mostrarme que por fraternidad.

Me quedé en silencio y lágrimas de arrepentimiento nacieron de mis ojos.

Instintivamente comencé a retirarme triste.

Paré al oír la voz autoritaria y al mismo tiempo fraterna del Venerable Maestro: Mi Hermano, reconocemos las debilidades de todo el mundo y en la Masonería, con todo, reconocemos también que el Hermano fue iniciado en nuestros Augustos Misterios. Prometemos a sus iniciados protegerlos y lo haremos.

El Hermano tendrá la oportunidad de enmendar sus errores, todos los aquí presentes los hemos cometido alguna vez.

Relájese ahora.

Tómese el tiempo necesario y, al volver a hablar de este tema, venga con nuevas experiencias, nosotros lo guiaremos nuevamente por el camino correcto de la Orden Masónica. Su nuevo caminar será seguramente mas promisorio y útil.

Salí decepcionado más extrañamente aliviado. Aquellas palabras parecia que me habian sacado un gran peso de encima. Con seguridad, allí desbastaría parte de mi Piedra Bruta. Estaba saliendo ritualmente, y, cuando Sali del templo…

Desperté.

Desperté sobresaltado y mojado de sudor.

Mi corazón estaba muy agitado.

Me levanté asustado, sintiendo cierta alegría en el pecho.

¡Había soñado!

Me dirigí al guardarropa.

Mi traje negro y mis guantes blancos allí se encontraban.

Rápidamente retire de la chaqueta las medallas e insignias, junto a los diplomas, algunos sin mérito, y los guardé en una caja bien al fondo, donde nadie los pudiese ver.

Todavía emocionado y con los ojos llenos de lágrimas, me dirigí a mi mesa de trabajo y con las manos temblorosas y lleno de una alegría enaltecedora, empece a revisar el Catecismo y el Ritual de Aprendiz masón, a recordarlo, tome mi cifrado y empece a estudiar y descifrar nuevamente

El Código da Vinci y la Masonería


En las Transactions de la Quatuor Coronati Lodge – la más importante publicación masónica británica en los últimos cien años- fue publicada, en su volumen 116, una nota del Hermano R. A. Gilbert a propósito de la obra de Dan Brown “El Código Da Vinci.

No se trata de una posición formal de la Gran Logia Unida de Inglaterra, sino de la opinión del autor; sin embargo se trata de un comentario significativo, especialmente ante la carencia general de trabajos masónicos sobre un fenómeno tan particular que ha desatado infinidad de polémicas.El hermano Jorge Sanguinetti ha traducido la nota, lo que nos ha permitido acceder a su contenido.

Afirma Gilbert que cuando Michael Baigent y sus dos colaboradores (Richard Leigh y Henry Lincoln) publicaron “The Holy Blood, The Holy Grial” en 1982, esperaban la aprobación popular y la burla universitaria. El público –siempre más afecto a creer las fantasías que la realidad- adhirió de inmediato al planteo de la obra y la convirtió en un best-seller.

Sin embargo –escribe Gilbert- tal éxito conllevó su castigo. Puesto que la tesis central –la supuesta ascendencia de Cristo y el oculto Priorato de Sion encargado de proteger tal secreto– fue demolida por el mundo académico y considerada lamentable. Aun así, y como consecuencia de la adhesión de un ávido público inclinado a esta literatura, la obra provocó un torrente de varios derivados pálidos y demenciales. El común denominador de todos estos libros es el deseo de escribir de nuevo la historia según las grotescas fantasías de sus autores, y la salvaje actitud de no aceptar la realidad de la historia documentada. Son también extensamente leídos y generalmente aceptados como la verdad misma: pero ahora han logrado su apoteosis en un trabaja de evidente ficción.

Dice el H:. Gilbert:

“Hay que admitir sin embargo que el H:. Baigent y sus co-autores sinceramente creían en sus tesis, pero es impensable que Dan Brown crea una sola palabra del su libro, porque El Código da Vinci está plagado de errores tan evidentes que tal catálogo de absurdos no puede ser digerido ni creído por cualquier autor racional y cultivado. La espeluznante novela está basada en la supuesta existencia del Priorato de Sion, pero de ninguna manera puede considerársela como testimonial: el pobre H:. Baigent ha puesto un nombre (por medio de un absurdo anagrama) al retorcido y criminal villano. Tampoco el libro responde a las sicofantes reseñas impresas en las solapas. No es ni “una obra maestra” ni es “cautivante” – es simplemente una novela de terror vulgar y previsible en la que subyace un alegato especial e irritante. En detalle, no contiene una”presencia masiva de información histórica y académica”. Entonces ¿Porqué molestarse en reseñar tal libro? Lamentablemente hay buenas razones, pero es necesario exponer primero los formidables errores que contiene. Voy a concentrarme en las áreas de mayor interés para nuestros lectores, pero es necesario destacar que los errores no se limitan a lo histórico, masónico o similar: se extienden, por ejemplo, a la biografía, la crítica de arte, la ciencia, las religiones comparadas, el simbolismo, la arqueología, la arquitectura y los estudios bíblicos.”

“El Código da Vinci comienza con una página titulada Hechos en la que el autor afirma que el Priorato de Sion ... es una organización real y que todas las descripciones de sus obras de arte, arquitectura, documentos, reglas y ritos secretos señalados en el libro son exactas. No es así, y no son así. Consideremos primeros los rituales secretos: las formas ceremoniales del Priorato de Sion no provienen de Dossier Secreto que se pretende que los demuestran, sino de la versión fílmica de Dennis Wheatley The Devil Rides Out. Y respecto de los dossiers no han sido nunca autenticados por nadie, ni tampoco por muchos especialistas y no pueden confirmar incontrovertiblemente nada en absoluto.

Pasemos ahora a considerar algunos de los errores históricos. La Biblia no fue compulsada por el pagano emperador romano Constantino el Grande: el Canon de las Escrituras fue establecido en el siglo segundo después de Cristo. Los Rollos del Mar Muerto no contienen ningún evangelio cristiano, y los códigos de Nag Hammadi no son rollos sino hojas sueltas. Y respecto de temas religiosos, los estudiosos de la Biblia se sorprenderán mucho leyendo que el sagrado nombre de Dios – YHWH – de hecho deriva de Jehová, andrógina unión física del masculino Iah y el pre-hebraico nombre de Eva, Havah. Tal vez sí en la ficción, pero no en la realidad.

Inevitablemente llegamos ahora a los Caballeros Templarios. Para el Sr. Brown eran, por cierto, paganos y heréticos, borrados del mapa en un día en 1307 (pasando gentilmente por sobre una década de alegatos y juicios) por el Papa Clemente. Presumiblemente Súper Papa por que parece que ha muerto y enterrado cientos de Caballeros Templarios y que se ha asegurado que los quemados en el cadalso – por cierto en Paris en el mundo real – fueron arrojados sin ceremonias en el río Tiber.

Luego Brown viene a Inglaterra. La arquitectura de la Iglesia del Temple en Londres es pagana hasta la médula, y además pocos saben lo que hay allí. Excepto por la multitud de turistas que vienen a verla. La capilla Rosslyn fue diseñada y construida por los caballeros Templarios en 1446 como una copia exacta del templo de Salomón en Jerusalén; tiene una amplia cámara subterránea desconocida hasta hace muy poco; y está precisamente sobre el meridiano norte-sur que pasa por Glastonbury. Todo lo cual es completa basura, como lo confirman cualquier guía o atlas.

La Masonería es tratada de igual manera ridícula. Uno de los secretos mejor guardados en la primera hermandad masónica era el uso de una piedra angular para construir un arco de bóveda – posiblemente secreto sólo para ciegos – mientras que en la Francmasonería el ascenso de los miembros a los altos grados requiere demostrar que pudieron guardar un secreto y realizar rituales y variadas pruebas de merecimiento durante muchos años. La tarea prosigue cada vez con mayor dificultad hasta el exitoso ingreso al grado 32. Sorprendente revelación, especialmente para los masones norteamericanos que ¡ascienden desde la iniciación hasta el escocismo en un fin de semana!

La letanía de absurdidades se puede extender lamentablemente a lo infinito, por tanto pasemos a ver aspectos racionales. El Código da Vinci – recuerde que es una evidente ficción – ha llegado a ser un best-seller mundial, aprobado por una hueste de reseñadores no calificados y por camaradas autores del gremio de escribir best-sellers. No solamente es extensamente leído: su tesis central – la existencia y propósito del Priorato de Sion – es extensamente creída por un público ignorante e incapaz de crítica. La ignorancia abarca los temas templarios y masónicos de la novela. Ahora muchos nos ven, por cortesía de libros tales como el Código de Vinci, como una sociedad secreta dedicada a promover una agenda oculta y subversiva orquestada por sus intrigantes y heréticos miembros. Desleal e injusto será, pero así nos perciben y mucho debería preocupar a nuestras mentes. Si no enseñamos al público – del que provienen nuestros candidatos potenciales – sobre la naturaleza real e histórica de la Masonería, entonces tendremos que desaparecer en la sombra de nuestras glorias pasadas, o enfrentar un aún peor escenario: ser inundados por candidatos que desesperadamente quieran que la ficción sea realidad.

R. A. Gilbert, Ars Quatuor Coronatorum, Volumen 116, Review pp. 286-7.
Traducido por J. Sanguinetti

El Ara y símbolos relacionados para guiar reflexiones y decisiones.


En la última Ten:., se presentó un trabajo sobre el Ara, lo cual suscitó algunas reflexiones y dudas. Esto mismo propició que se hiciera una exhortación para investigar sobre el mismo. Para comenzar, quisiera exponer lo que Federico González expone sobre el Ara en el diccionario simbólico que publica en su revista electrónica, El Taller.

En primer lugar señala que el ara es equivalente al altar católico, y que usualmente se ubica en el Oriente, pues no sólo es el punto a donde todos en el Temp:. dirigen sus miradas, sino porque es el punto de referencia espacial más importante y significativo.

Se expresa en el diccionario: Concretamente el altar está situado delante mismo del estrado del Venerable Maestro, justo donde terminan los tres peldaños o gradas que separan, y unen, el Debir del Hekal, los cuales, en la estructura del templo masónico, simbolizan respectivamente el Cielo y la Tierra, la vertical y la horizontal. Sin embargo, no en todos los Ritos masónicos el ara se sitúa en esa posición. Por ejemplo, en el Rito de York inglés, practicado también en muchas logias del Norte, Centro y Sur de América (sin olvidar tampoco las logias operativas que aún perviven en Inglaterra y Escocia), el altar se halla en medio del Hekal, entre los tres pilares de la Sabiduría, la Fuerza y la Belleza, sin que esta circunstancia en nada altere el sentido y el significado real de su simbólica, que es el de señalar de manera invariable la presencia de un centro sagrado en la Logia. Los tres peldaños, presentes también en el templo cristiano, sugieren la idea de ascenso, que está incluido en la propia etimología de altar, del latín altare, cuya raíz, altus, significa lugar alto o elevado. Se dice que en muchas culturas, el ara, y el templo, se erigían sobre la cima o la falda de una montaña, o en lo alto de una pirámide escalonada, como era el caso de las culturas prehispánicas, o los babilonios. Se puede seguir leyendo en el diccionario: El altar constituye así el "punto geométrico" donde confluyen y concentran las energías del Cielo y de la Tierra. Es verdaderamente el corazón del templo, su espacio más sagrado e interno, a partir del cual se organiza toda su estructura, y en donde simbólicamente finaliza el recorrido horizontal (asimilado al paso por el laberinto), comenzando el ascenso vertical que conduce a los misterios más profundos de la iniciación... El altar pertenece así a la simbólica de "pasaje" o "tránsito" de una realidad a otra, en este caso de una realidad condicionada y horizontal (limitada por el tiempo y el espacio) a otra incondicionada, vertical y eterna.

De estas breves descripciones aparece un mundo de simbolismos que son parte de los significados del Temp:. y de los ritos que se practican. De entrada está el simbolismo del centro. En el libro, Símbolo, rito, iniciación, la cosmogonía masónica, firmado por Siete Maestros Mas:., se expresa que el Ara es el punto más importante del Temp:., punto desde donde se organiza la Log:., los Trab:. Esto es por la razón de que marca el centro del espacio a trabajar, pero ese centro está cubierto de más simbolismos: es el punto de contacto entre lo alto y lo bajo, lo ascendente y descendente, la tierra y el cielo, que simbólicamente se representa por el piso y el techo del Tem:., y esto lleva a otro principio: el centro es donde se dan las dos fuerzas del cosmos, que también actúan en la tierra, y que el hombre debe saber manejar, equilibrar, pues es el punto de encuentro, el punto medio, y el que los pone en movimiento, pues el centro implica un poner en movimiento, una acción. Es por ello que en el libro, El Ara, se expresa que el ara representa al sol y como Log:. representa al universo. Esto mismo lo podemos encontrar cuando se estudia toda la simbología del centro y sus diversas manifestaciones, y lo cual está contenido en gran parte de las tradiciones místicas, de las diferentes culturas. En un artículo publicado en la revista Símbolo, Carlos Raúl Alonso hace un recuento de ello. Señala la importancia del tao en el taoísmo, en la filosofía griega, principalmente en Heráclito, donde el centro aparece como un par de opuestos, en movimiento y en equilibrio; revisa el símbolo del arca de la alianza, los caballeros de la mesa redonda del Rey Arturo, el rosetón de las catedrales. José María Gracia, nos habla de todo rito de fundación de una ciudad y señala que en la mayoría de las culturas se intenta con la fundación de una ciudad establecer un centro donde se repita la cosmogonía de la manifestación y de la creación, y que era por medio de la unión de los contrarios dentro de una unidad y que se procedía por toda una serie de ritos, pero donde se requería de la presencia de un ser especial que era quien los guiaba y decidía, lo cual representaba la unión de tres ordenes: divino, humano, terrenal.

El ara debía estar en una parte elevada porque representaba que se trascendía lo terrenal, y desde ahí se creaba la conexión de los tres niveles. Es por ello que se establecía el templo, o la ciudad, desde una montaña, o la falda de la montaña, y en el templo en algunas costumbres se coloca en Or:. También, encima del Ara se colocan aquellos emblemas que representan la unión de los contrarios, la unión de lo alto con lo bajo: la escuadra y el compás. Además, por ser el centro, el corazón, es el lugar donde se coloca la palabra sagrada o el Libro de la Ley porque simboliza las transformaciones y la realización. Por ejemplo, el rosetón de las catedrales significa rueda, un simbolismo del centro, y de ella se obtiene la palabra rota del cual se obtiene Tora, Taro, Tarot

En este punto hay también una serie de simbologías sumamente importantes que refieren al ara como espacio de trasmutación, que recuerda, entre otras cosas, a los trabajos alquímicos y a la figura de Hermes o Mercurio. El punto astrológico donde se concibe al ara es bajo la constelación de Escorpión, porque es el signo de la trasmutación, el encuentro de los contrarios que deben ponerse en movimiento y en trabajo para lograr la purificación, donde se concibe que se debe de trabajar con dos elementos: la sangre y el agua. Por ejemplo, en la mesa redonda del Rey Arturo se quería poner el Santo Grial que contenía la sangre de Cristo, y simboliza la unión de la sangre y el agua, la unión de los contrarios. Esto también recuerda al escudo de los Templarios que era con los colores rojo y blanco, lo cual representa algo similar. La misma constelación de Escorpio está relacionado con la simbología triangular que representa la purificación: el escorpión representa al reptil, la serpiente en algunos casos, que vuela, el águila, que como Quetzalcóatl, representa la unión de lo bajo con lo alto a través de un trabajo de trasmutación, y que también nos recuerda al kundalini, la serpiente que se enrosca por medio de un árbol, espada, o cuerpo del hombre, para llegar a su punto más alto, el sol, la cabeza, la cúspide, algo de lo que nos enseña la simbología del Águila Mas:.

Las reflexiones que se han esbozado, y otras más que no he señalado pero que son igualmente importantes, nos hacen ver que el ara es un símbolo sumamente trascendente para la vida y los ritos de los Trab:. y la Mas:. Y es por ello que finalmente paso a tratar brevemente los dos puntos que suscitó la inquietud de una mayor investigación sobre el ara: la forma geométrica que debe tener, y si es posible tener dos libros sagrados simultáneamente cuando se realizan los Trab:.

En libros especializados poco se dice al respecto, de manera específica. Las imágenes que uno puede encontrar muestran aras tanto en forma triangular como formando un cuadrado. En el libro, Los 33 temas del grado de aprendiz, lo mencionan como una "mesa triangular".

En el libro, El Ara, se señala que la forma de una pirámide cuadrangular es la más usual y tradicional, aunque también señala que algunas Log.. la usan en forma de un triángulo equilátero en su base y cara superior. Consultando con un Q:. H:. de grados superiores, me hizo la siguiente referencia: la tradición Mas:. Escocesa es la que usualmente la emplea de forma triangular porque muchas de sus simbologías están alrededor de la concepción del Árbol de la Vida, y es por ello que conciben la relación de lo alto con lo bajo a través de varios símbolos triangulares, mientras que la tradición Yorkina, lo emplea en forma cuadrangular, al parecer retomando una influencia de la Mas:. Egipcia, y que todo indica que con ello representan que el centro se abre a los cuatro puntos cardinales de la creación. En ese sentido, la forma en si misma no importa, sino más bien, tocaría reflexionar sobre dos posibilidades: la primera, si se quiere ser fiel a la tradición de donde se procede, y, por la otra, el consenso generalizado de la forma que inspire y sea más apropiado para cada Log:. para realizar sus trabajos, y el manejo de las energías, la conexión con lo alto y lo bajo, y que favorezca la trasmutación de los opuestos. Tener claridad grupal e individual de ello, permitirá una conexión mayor con las energías, su manejo y orientación.

Sobre el tema de los libros sagrados, hay libros que señalan abiertamente a la Biblia o a la Constitución. Sin embargo, hay otros que señalan que el libro por colocar es de acuerdo a lo que el grupo considere como la máxima Ley para la mayoría. Respecto a colocar dos libros, la reflexión sería: el libro de la Ley funciona no sólo como el libro que señala lo máximo a realizar y a crecer, el punto donde se coloca el centro y punto de referencia máximo de todo, la guía de lo que se debe hacer para la trasmutación, sino que, como el punto más alto del compás, es la representación del sol a partir del cual se abre un vértice donde se expanden, concentran y equilibran las energías. Es como el tao: la unidad dentro de la diversidad. La reflexión sería que si se colocan dos soles, dos taos, dos unidades, estas mismas entran en discordancia, las energías entran en conflicto y puede haber un efecto desintegrador. En este punto la recomendación es que no debe haber dos libros, sino únicamente el que se considere como el general y de acuerdo al consenso mayoritario, que represente el espíritu del grupo, sin que esto implique que en algunas ocasiones se pueda colocar algún libro que sea la inspiración de uno o parte del grupo, como es el caso de Tora, del Corán. Lo que si tocaría es reflexionar si el libro que inspira a la mayoría es la Biblia, o la Constitución Mexicana

Es cuanto.

Nabucodonosor M:. M:.

viernes, junio 02, 2006

La Numerología y la Masonería



La numerología está íntimamente ligada a la geometría que por fuerza de la profesión de los antiguos Francmasones (albañiles-libres) era utilizada en la construcción de catedrales, palacios y otros predios.

En la base de la numerología esotérica están los números 3 y 5 como puntos de partida, para una construcción de figuras geométricas como el triángulo y el pentágono.

* El triángulo es una figura geométrica que da origen a la pirámide y ambos son parte de la simbología masónica.

* El triángulo es símbolo de la luz. Como también el vértice de su cima representa el fuego y la virilidad, con el vértice para abajo se representa el agua o el sexo femenino.

* El triángulo equilátero es usado como símbolo de la divinidad masónica y representa los tres atributos divinos: Fuerza, Belleza y Sabiduría, y también los tres reinos: Mineral, Vegetal y Animal.

* El triángulo con un ojo en el centro representa la omnipotencia, la omnisciencia y la omnipresencia.

* La pirámide es un sólido derivado del triángulo y simboliza el hombre en busca de la divinidad y de las energías cósmicas que supuestamente son captadas por el ápice e irradiadas al área de la base. La pirámide es el símbolo de la jerarquía espiritual de la nueva era, y es en su ápice es donde se encuentra "el ojo de dios"

* La calavera y las tibias cruzadas son el símbolo de la fugacidad de lo material. Símbolo también de la muerte.

* El suelo ajedrezado, las columnas, los 3 grandes candelabros, el friso adornado por un cordel con nudos, el hemiciclo de bóveda azulada y estrellada (7 estrellas), al cual se asciende por 3 peldaños, el mallete o mazo, una espada flamígera, un peñasco o piedra, etc., de la "logia, templo o cámara", o sea, la sala o lugar en reunión.

* Águila bicéfala, en el Supremo Consejo Grado 33º, significa poder temporal y espiritual.

* La escuadra, el compás, el triángulo, la plomada (elementos utilizados para la construcción).

* Las llamadas "joyas", es decir las insignias características de cada cargo.

* La Joya masónica de dignidad u oficio perteneciente al primer Vigilante, encargado del control de los compañeros (grado 2º). La escuadra y la Plomada son los símbolos propios del oficio de Primer Vigilante. La Plomada simboliza el equilibrio, medida y rectitud.

* El mandil o delantal, simbólico del "trabajo" (masónico) con sus signos distintos en los diferentes grados (dos, tres rosetas azules en los grados 2º y 3°; la tau griega invertida en los demás grados, etc.).

* La Joya masónica perteneciente al grado 32, Sublime Príncipe del Real Secreto. Cruz de Malta, símbolo del grado 32. La cruz guarda una geometría interna de interpretación pitagórica y la Corona como símbolo de realeza espiritual.

Autor: Serendípico

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ETICA MASÓNICA



M:.R:.H:. ISMAEL CORNEJO AL VARADO
P:.G:.M:. DE LA GRAN LOGIA DEL PERÚ
R:.L:.S:. "CRUZ AUSTRAL" N° 12
VALL:. de LIMA

Circunstancialmente, como si fuera un ratón de biblioteca, tuve la suerte de encontrar en la Secretaria de mi R:L:.8:. "Cruz Austral" N° 12 la revista "El Heraldo Masónico " N° 2 editado en el mes de Mayo de 1949, vale decir, hace más de 55 años y encontré un extenso trabajo escrito por el R:. H:. Moisés O. Portugal, precisamente titulado "Ética Masónica". Me he permitido extraer algunos conceptos que me han hecho reflexionar y tratar de analizar como pensaban nuestros predecesores en aquellos tiempos sobre la ética masónica, encontré pensamientos como:

"Cuando no era masón, discutía con los masones sobre la intolerancia de los mismos Masones en el mundo profano, llegando a hacerlos injustos y egoístas; y es que fatalmente para mi, había tropezado con aquellos masones meteóricos que vien­en la Orden en instantes incomprensibles, pero felizmente para ella, estos masones, meteóricamente también, se habían ido porque la masonería no es una horda de aventureros ni guarida de oportunistas';.

Decía también: "La ética masónica, necesita, ante todo, enfrentarse a la verdad. No es labor masónica vivir callando, o en cierta forma, incubando los defectos que retardan nuestra evolución".

Vale la pena mencionar: "Las legislaciones no han sido más que los grandes errores legalizados, porque la falta de ética social no ha permitido que el espíritu aplique coa equidad lo que debió ser una ley moral Esto es lo que la masonería tiende a eliminar, tarea fuerte y, probablemente larga, pero tarea al fin, digna de la étíca masónica"

Podemos apreciar la vigencia de sus conceptos, tenemos que entender que ser masón, es algo más; algo más profundo e indeleble, así como, el bautizo en la religión católica nos hace cristianos, la iniciación en nuestra Augusta Orden nos hace masones para toda vida. Pero, ¿seremos realmente auténticos católicos y masones?; si no internalizamos y practicamos sus principios, creo que podemos aplicar aquella celebre frase: "El habito no hace al monje".

Cristo nos dice "el que no carga su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo" igualmente quien no hace suyos los principios masónicos, no puede ser un autentico masón. Todas las religiones nos hacen hijos del Gran Arquitecto del Universo, por lo tanto, siendo sus hijos, somos hermanos y tenemos la obligación de no herimos mutuamente, de no difamamos, no calumniamos, respetamos, apoyamos y practicar realmente el amor fraternal.

Leía un artículo de Don Francisco Miro Quezada Cantuarías que hablaba de la calumnia y definía esta palabra como derivada del griego "diabolos" que significa precisamente calumniador. Calumniador es un hombre diabólico, es decir, es lo más infame que se pueda concebir, pues, por bíblica definición, el diablo es el ser más malvado y abyecto que pueda existir. La soberbia es el pecado más terrible de todos, se vale de la calumnia para desacreditar a una persona inocente.

Permitidme tomar algunos conceptos de un colega periodista, llamado Fernando Ampuero, que dice, "que cuando existe la intriga, el boicot, el chisme circulando por nuestras venas como si fuera otra sangre, tal vez, lo más prudente sea callar". Sin embargo, creo que esto no seria ético, cuando algunos HH:. pretenden insurgir con cierta solvencia intelectual y buenas intenciones corren el riesgo de ser vejados, daría la impresión que hacerlo a sabiendas los hace aparecer como masoquistas, pero, si todos nos volvemos conformistas ¿como nos acercamos más a la verdad?, ¿como seremos más limpios?, más puros, para poder sentir realmente la paz y felicidad de vivir en el seno de una autenticidad masónica.

El Doctor Mariano Querol en una entrevista que le hizo el periodista César Hildebrandt en su programa La Boca del Lobo, le pregunta ¿Qué esta pasando en el país?. El Doctor Querol le contesta: "lo que sucede es que se están perdiendo las pocas normas que teníamos, se esta perdiendo lo que antiguamente se llamaba dignidad, el señorío, la corrección, el don de gentes, la cortesía, la delicadeza; todos estos valores por el intercambio social en función de la realidad. Nos estamos volviendo primitivos, existe el predominio del elemento pre-verbal, es decir, el golpe en vez de la palabra, la ofensa en vez de la conversación, la rabia que se suelta como el elemento pre-verbal es lo más ex presivo de la realidad interna de una persona. La pasión impide el razonamiento y da pie a las más bajas pasiones; la mentira y la violencia generan un malestar ideológico que se convierte en hipocresía y cinismo; todo esto originado por la codicia del poder, por la búsqueda de ideas para hundir al otro, demostrando así, este tipo de personalidades, una indigencia intelectual pura. La solución requiere de mucha perseverancia, es un proceso educativo organizado". Esta es una realidad en la cual nuestra membresía también esta inmersa, no podemos negar que también estamos siendo afectados por este fenómeno; es menester reconocerlo y dar un gran impulso a la Instrucción y Docencia masónica. Este es uno de los grandes objetivos en los que Autenticidad Masónica trata de poner su granito de arena y este Libro pretende con su contenido cumplir con su lote de trabajo en bien de todo nuestro pueblo masónico.

No basta ser un hombre libre y de buenas costumbres, aún, como en las mejores familias, lamentablemente te pueden llover infundios y vejaciones, es más, hay quienes para lograr sus oscuros propósitos, hasta te inventan cosas no ciertas. Hermanos rescatemos los valores, juntos extirpemos el cáncer que pueda pretender introducirse en nuestra Augusta Orden e internalicemos una verdadera ética masónica.

Tenemos que erradicar la crítica malsana e innoble que corroe y mina las convicciones, tenemos que privilegiar la verdad y la entereza moral, no aceptar el chisme cobarde amparado en el anonimato, tengamos el coraje de decir frente a frente lo que sólo somos capaces de hacerlo clavando arteramente el puñal por la espalda. Si sólo cumpliéramos los HH:. mayores "Los Cinco puntos de la fraternidad", todos los juramentos que hacemos a través de las iniciaciones, adelantos, exaltaciones y cargos que asumimos; viviríamos felices realmente en el seno de una autenticidad masónica.

Cuando en una u otra forma tenemos la oportunidad de ejercer autoridad, corremos el riesgo de perderla cuando se actúa en forma inconsecuente y contradictoria con su mensaje, cuando hace lo contrario de lo que predica. Cuando actúa en una forma despótica y dictatorial. Cuando no reconoce sus errores y se empecina a toda costa en querer tener la razón, a pesar que en su fuero interno sabe que no la tiene. Cuando no respeta la opinión de los que están a su alrededor, por muy opuestos que sean a la suya. Cuando no hace el más mínimo esfuerzo de ponerse en el lugar del otro. Es en se momento que pierde su autoridad; principalmente su autoridad moral que es la más importante, más aún, en una Institución como la nuestra.

La crisis de valores por la que atraviesa el mundo involucra no sólo a nuestro país sino también a nuestras Instituciones y nosotros no somos una isla; formamos parte de este mundo globalizado y tenemos la obligación moral de recuperar los valores perdidos para ser un ejemplo de vida en cualquiera que fuera la actividad en que nos desarrollemos. Tenemos que ser lideres de una ética masónica con rostro humanista que permita erradicar la pobreza, la falta de oportunidades, las desigualdades sociales que afectan a más de 1,200 millones seres esparcidos en toda la faz de la tierra.

La instrucción y docencia masónica es fundamental en esta cruzada de ética masónica , los profanos que tocan las puertas de nuestros templos deben sentir que han llegado a una Institución Superior, que les va a ayudar a afrontar la vida en mejores condiciones, que sólo lograrán ver el rostro del G:.A:.D:.U:. aquellos que hayan vivido una vida digna, que no tengan nada que arrepentirse, que no hayan hecho daño a nadie y que la masonería les dará las herramientas para lograr su Superación Espiritual.

Existen una serie de definiciones de ética, recogeré algunos conceptos del libro Ética y Política de Mónica Jacobs - Eliana Mory - Odette Vélez Podemos apreciar como definición de Ética a la búsqueda de puntos de vista válidos para regir nuestros conceptos; también el buen modo de obrar. Sarater afirma que la Ética es el arte de vivir bien, siendo necesario una reflexión crítica sobre los valores que rigen la sociedad, se refiere al modo en que las personas buscan la mejor manera de vivir, el modo de buscar una "vida buena"; una vida feliz, en armonía con los demás. Nadie busca una vida llena de conflictos, de pesares, incluso cuando alguien elige el sacrificio o el dolor, lo hace porque piensa que algo bueno podría obtener de ello. Todos deseamos una vida buena. En consecuencia la Ética es una reflexión sobre el modo en que las personas viven y sobre la mejor manera de conseguir una "vida buena". ¿ Es posible la Ética 1. Entendida como arte de vivir, como proyecto razonable para armonizar las exigencias sociales de la libertad, como consecuencia de la autonomía responsable, como reflexión crítica sobre los valores institucionalizados, negar la posibilidad de la Ética equivaldría a negamos a nosotros mismos, como sujetos civilizados.

En la Ética se prioriza que las personas quieren hacer las cosas bien, se ocupa de lo que uno mismo hace con su libertad y se preocupa de la perspectiva personal que cada individuo toma atendiendo solamente a lo que es mejor para el bien vivir.

Tratemos de ser mejores cada día, hay personas que poseen el difícil "arte de amargarse la vida". Curiosa habilidad que, aunque no se enseña en ninguna facultad o escuela, tiene numerosos y aprovechados alumnos.

Es indispensable que seamos íntegros, que seamos auténticos, David Fischman en su libro El espejo del líder dice: "Al igual que un faro marino señala la dirección que deben seguir las embarcaciones en la oscuridad, nuestros valores, orientan nuestras acciones en la penumbra de estas épocas turbulentas en que vivimos. El problema es que, hay tanta neblina que no llegamos a ver el faro".

Todas estas apreciaciones tienen mayor exigencia entre los miembros de nuestra Augusta Institución, ya que, en la búsqueda permanente de la verdad, en la aplicación de la libertad, fraternidad e igualdad, vivimos tratando permanentemente de internalizar valores, de crear una conciencia Ética que nos lleve a ser más fraternos y solidarios entre nosotros; así, y solamente así, seremos realmente hombres libres y de buenas costumbres, leales con nuestros propios hermanos y seres útiles a la sociedad que nos cobija, que tanto necesita y espera de nosotros.

Veamos nuestra Augusta Orden con lealtad, reconozcamos lo que la Institución ha hecho por nosotros, respetando los compromisos adquiridos, tanto los explícitos como los implícitos, tengamos siempre presente que a nuestra Orden hemos venido a servir y no ha ser servidos; que aquellos que en cualquier nivel de autoridad y responsabilidad reciben de sus hermanos un poder, están obligados a meditar y tratar de interpretar el deseo mayoritario de su ,membresía y no satisfacer sus propios intereses y caprichos. Sólo gobernando con amor, dentro del marco de las leyes, disposiciones y todo aquello que los ayude a gobernar, lograrán la felicidad del pueblo masónico que los eligió. Esta es la receta para ''vivir bien"; si logramos que nuestro pueblo masónico sea feliz, entonces habremos cumplido el honroso encargo de ser su Guía y Conductor.

SI YO CAMBIARA

Marco Antonio Guízar Ponce


Si yo cambiara mi manera de pensar
y en lugar de mirar lo negativo
me concentrara en lo positivo
obtendría más serenidad.

Si cambiara mi manera de actuar
y en lugar de buscar debilidades
buscara cualidades.......
obtendría más seguridad.

Si yo aceptara a todos como son
con lo negativo y lo positivo
con sus debilidades y fortaleza.....
sufriría menos.

Si yo me aceptara tal cual soy,
si me diera cuenta que al lastimar,
el primer herido soy yo...
cuanto mejoraría mi espacio vital.

Si yo comprendiera mis errores
e hiciera un poco cada día para evitarlos
y al estar consciente de como los conocería
me acercaría al camino de construcción de mi armonía

Si yo anhelara el bienestar de los otros,
y contribuyera activamente para ello,
todos seriamos felices....
y tendríamos un mundo más bello

Si yo a menudo me maravillara ante lo que veo
¡si criticara menos y amara más!
Si yo cambiara...cambiaria mi mundo
y... el de los demás.