lunes, febrero 20, 2006

EL ARA Y LA BIBLIA

Para tener éxito en la consecución de un fin, a través de una tarea emprendida, entre otras cosas se requiere de convicción. Para reafirmar esta entre nosotros, pensamos que resulta trascendental comprender y aceptar voluntariamente, los conceptos por medio de los cuales la masonería imparte sus teorías.

Es por ello que el estudio que nos ocupa esta ocasión se refiere al Ara, conocido también como Altar de los Juramentos y la Biblia.

Comencemos pues y veamos cual es el origen de la palabra Ara, su etimología y significado. Viene del latín Ara o araus, que se traducen como Altar o Piedra de sacrificios.

Dentro del sistema masónico, la palabra Ara, se refiere al Altar o Alta-Ara, de Altus o Altura, que viene siendo el sitio sagrado que se destina al ejercicio de algunas ceremonias como la de prestar los juramentos, depositar ofrendas, ofrecer libaciones, ejecutar sacrificios, quemar inciensos.

Podemos describirla como una base de columna triangular, elevada sobre tres gradines; es de color blanco, y sus caras ribeteadas de azul y oro, una de ellas mira al oriente, otra al sur y la tercera al norte, en cada una de sus caras aparece el emblema que corresponde a las diferentes cámaras en que trabajan las logias.

En forma conveniente y circundando la superficie triangular del Ara en concordancia con sus ángulos, se colocan los tres grandes candelabros o focos centellantes de una sola luz, como símbolos de las tres posiciones culminantes que marca el sol, durante el día desde oriente mediodía y occidente.

Sobre el Ara aparecen también, un cojín de forma triangular hecho de terciopelo o seda color púrpura, ribeteado con un cordón de oro que remata en tres borlas; una en cada esquina; bajo este cojín se observa la espada flamígera, y encima del mismo cojín se ven la Biblia, el Compás y la Escuadra; además, las Logias constituidas legalmente colocan también su Carta Patente.

La definición masónica que se atribuye al Altar de los Juramentos, consiste en que se le considera como representativo de la eternidad, del secreto, del misterio, de lo desconocido de lo abstracto y en general de todas las fuerzas ocultas que existen en el universo.

Pasemos ahora a conocer la interpretación que se le atribuye a la espada flamígera.

La espada flamígera es de hoja en forma ondulante semejando a las llamas del fuego, porque es la insignia del mando del Venerable Maestro, también es el símbolo del poder y de la ley, como igualmente lo es de la seguridad.

En manos del Venerable Maestro, la espada flamígera es el símbolo radiante de la fuente de la verdadera ciencia, puesto que sus reflejos irradian innumerables destellos de sabiduría en todas direcciones, sin punto fijo de dirección como lo hacen las llamas del fuego que se elevan hacia el infinito.

La espada flamígera nunca lleva cubierta o vaina; y por lo mismo debe permanecer desnuda y centelleante; esto nos indica que la instrucción masónica debe estar al alcance de todos los hombres, siempre expedita y sin restricción alguna, para impartirla a los iniciados amantes del estudio y del progreso.

El cojín triangular de color púrpura representa el conjunto de fuerza y fenómenos cuyas causas debe investigar el masón, es de color púrpura, porque semeja al tinte de la sangre, que nunca debe derramarse entre hermanos, caso contrario cuando se trate de defenderlos, es de seda porque es el material más delicado y suave como debe ser el carácter de los masones, el cordón que lo circunda simboliza los lazos de unión entre hermanos y las tres borlas que se observan en sus ángulos representan a la esencia contenida en las tres preguntas que aparecen en la plancha triangular.

Cuando el compás y la escuadra se colocan sobre el Ara, se les considera como emblemáticos de la lógica y la razón.

Las tres luces que circundan al Ara son alegóricas al talento, la virtud y la sabiduría, además representan a los tres puntos principales que recorre el sol para dar nacimiento al nuevo día, al día en su plenitud y al día en el ocaso, y por último son las representativas de las tres dignidades de la Logia, el Venerable Maestro y los dos Vigilantes.

Por lo que respecta a la Biblia, al prestar los juramentos con la mano extendida sobre ella, se le conceptúa como alegórica de la voluntad divina, o sean los dictados del Ser Supremo, en relación con el espiritualismo masónico que deben poseer los iniciados.

Recibe este nombre el conjunto de libros canónicos que constituyen al Antiguo y al Nuevo Testamento, denominado también, "Sagradas Escrituras", "La Palabra de Dios", puesto que se asegura que contiene la revelación divina, dada por el Ser Supremo a los hombres, con el fin de manifestarles su voluntad y señalarles el orden de vida que deben observar dentro de la familia y en sociedad.

El Antiguo Testamento, está constituido por tres grupos de libros, mismos que forman el libro de Moisés y que comprende el Génesis, el Éxodo, el Levítico, los Números y el Deuteronomio; luego vienen los históricos y los de los profetas, que se refieren a la religión, a la historia, a las instituciones y a las costumbres de los Judíos.

Por lo que toca al Nuevo Testamento, está formado por los cuatro Evangelios, los Hechos de los Apóstoles, las Epístolas y el Apocalipsis; o sea, la revelación suprema que hizo el apóstol San Juan.

Hablar de la Biblia es hablar de controversia, pues existen dudas sobre su procedencia, sobre su historia, sobre su autenticidad, interpretación, además de su autoridad literaria.

A través de la historia y hasta nuestros días, este libro ha sido blanco de cazadores que pretenden desvirtuarlo con sendos disparos que traen como alegatos, las ideas que hablan sobre las falsas teorías, los inaceptables sucesos, y los inmorales sistemas de vida que se narran en el polémico libro.

Sin embargo, sus antecedentes históricos, la moral y la filosofía que contiene le han fortalecido cada vez más y le ha marcado la pauta al hombre para que éste alcance la verdadera fuente de la ciencia, de la verdad y de la virtud.

La Biblia aporta de manera espiritual, un inagotable manantial de dogmas religiosos, mismos que han sido adoptados por todos los pueblos y sus diferentes razas; y es por eso también, que en ese sentido han sido igualmente numerosas las acometidas de que ha sido objeto, respecto a su autenticidad en materia de religión y de ahí que en repetidas ocasiones se han establecido controversias y entablado polémicas entre autores y escritores unos en defensa y otros atacándola.

Por otra parte, respecto al espiritualismo masónico, en que indispensablemente se manifiesta la influencia de la Biblia; diremos que por ese motivo se le considera como parte integrante de los atributos de las Logias, razón por la que a dicho libro se le ha conservado como una de sus principales joyas simbólicas.

Por lo que toca al simbolismo masónico de la Biblia, en relación con sus doctrinas, es de suma importancia por lo que se refiere al sistema ritualístico y dogmático, puesto que dentro de los preceptos litúrgicos más antiguos, ya se le consideraba como la Guía Espiritual, y datan más o menos desde el año 1724, aunque es posible que en las logias Inglesas, Francesas y Alemanas, tuvo una marcada influencia desde 1717, como el libro que sirvió de base a los preceptos originales en que se apoyan los estatutos de la más remota Alianza Masónica Universal.

EL SALMO 133

La Biblia, al iniciarse las actividades de la logia de aprendiz, debe ostentar la página que contiene el Salmo 133, en el que se lee el cántico gradual de David, que a la letra dice:

1 "¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitad los hermanos juntos en armonía!"

2 "Es como el buen óleo sobre la cabeza, el cual desciende sobre la barba, la barba de Aarón, y baja hasta el borde de sus vestiduras;"

3 "como el rocío de Hermón, que desciende sobre los montes de Sion; porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna".

Pero ¿qué nos quieren decir estos 3 hermosos párrafos?

1 "Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitad los hermanos juntos en armonía"

Estas líneas, se refieren al amor fraternal y a los lazos de estrecha unión que deben ligar a todos los hombres entre sí.

2 "Es como el buen óleo sobre la cabeza, el cual desciende sobre la barba, la barba de Aarón, y baja hasta el borde de sus vestiduras".

En este párrafo, se deslindan los beneficios que regularmente recibe el hombre de parte de sus propios semejantes cuando vive en sociedad, misma que se inclina a tender sus mantos protectores en cualquier momento y sin excepción de razas, clases sociales, credos políticos o religiosos, para el fin de amparar y conservar al género humano, y no dejar perecer al hombre aisladamente y abandonado a sus propios esfuerzos, por que eso traería como consecuencia inmediata, la destrucción social.

3 "Como el rocío de Hermón, que desciende sobre los montes de Sión, porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna".

Por lo que respecta al tercer párrafo, su esencia nos manifiesta claramente el fin que a todo mortal le espera, después de haber logrado cumplir con su misión en la vida, cuando ya ha tenido la satisfacción de haber sido fiel intérprete de sus buenas acciones, porque esa es la forma de demostrar los medios más prácticos y efectivos para servir al Ser Supremo, a sus semejantes y aún a sí mismo.

En consecuencia, es nuestro deber comprobar la interpretación masónica que le hemos dado a los tres párrafos contenidos en el Salmo 133 de la Sagrada Biblia, para demostrar en forma definida el porqué debe usarse el referido libro sobre el Ara, durante los trabajos de las logias y por qué es indispensable abrirlo en la página que contiene el multicitado Salmo.

La Biblia contiene la moral universal. Nos imparte innumerables lecciones y elevados conceptos filosóficos. De la Biblia surgen las palabras sagradas, las de reconocimiento y las cabalísticas misteriosas, entre otras cosas.

Como aprendices que somos, no nos corresponde ir más allá, sino constreñirnos a los conceptos anteriormente expuestos, ya que la Biblia nos presentará mayores y detalladas enseñanzas masónicas, a medida que se escalen los grados.

Estas son algunas razones por las cuales la Biblia es el libro adoptado por las logias, tomando en cuenta que es el que ha implantado la religión predominante en nuestro país, y el que invariablemente debe colocarse sobre el ara, para dar legalidad a los trabajos realizados en los talleres, en bien de la orden, o de la humanidad en general.

No nos resta más que exhortarles, queridos hermanos, a abrir con mayor frecuencia este hermoso libro, para acrecentar un poco más vuestro acervo cultural.

En resumen estos son algunos conceptos extraídos del Altar de los Juramentos, el lugar donde llenos de convicción otorgamos y reafirmamos cumplir con las máximas y los preceptos masónicos que hemos adquirido y hecho parte de nuestra vida diaria.

MIGUEL ANGEL GARCÍA AHEDO

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Q.:H,a sido de gran ayuda para mi esta informacion, le agradezco infitamente- A.:M Ignacio Fernandez integrante de Aug.:y Resp.:Log.:Simb "23 de Enero de 1958 N°1.
www.logiaxxiiienero.mex.tl

Muchas gracias y saludos

Anónimo dijo...

Siempre es muy vitificante leer conceptos totalmente diferentes a cuantos existen y esos seguirán siendo los de la Cuna Masónica, a donde a través del estudio de la Filosofía de la Moral nos ecercamos a la Virtud.
Gracias al Q:. H:. Autor del articulo.
Héctor Flores Rico.
A:.M:. venerable Logia Mosonica Vicentenario de la Independencia No.3 Toluca, Edo. de México.