sábado, mayo 26, 2007

SIGNIFICADO E IMPORTANCIA DE LA CONSAGRACIÓN DEL TEMPLO


Creo que en primer lugar es conveniente definir lo que se entiende por Consagración, y en tal sentido nos referiremos al concepto de Mackey, quien la menciona como el acto de aplicar o dedicar, con ciertas ceremonias cualquier cosa a los fines u oficios sagrados, separándola así del uso común.

Juan Carlos Daza, en el Diccionario de la Francmasonería, señala que “este acto confiere a un local profano el carácter de templo, destinándose este espacio al ejercicio de la verdad y de la virtud”. A partir de la Consagración no se deben provocar grandes perturbaciones en este espacio (Obras de construcción, remodelación, entrada y salida constante de profanos, etc.). Durante la ceremonia de Consagración del Templo, La Luz (luz eterna que desde ese momento no se apagara jamás) es transportada por una Comisión, generalmente presidida por el Gran Maestro, desde otra Logia, la Logia Madre que la auspicio, y el recinto es purificado por medio de los cuatro elementos, Agua, Tierra, Aire y Fuego, durante las ofrendas del Trigo, la Sal, el Vino y el Aceite”.

Se dice que el acto de Consagración de un Templo Masónico es realizado en forma Amplia, cuando este es realizado por el Gran Maestro, en forma Debida cuando es presidida por el Gran Maestro Adjunto y en forma cuando se realiza por medio de un poder conferido por el Gran Maestro. Una vez concluido el acto de Consagración del Templo, este queda dedicado constituido como tal para el uso de todos los hermanos Masones, para el culto y ejercicio de la Verdad y Virtud.

Revisando la interesante obra, “Escuelas Secretas de Masonería”, cuyo autor en C. W. Leadbeater, observamos que el autor dedica gran parte de su obra a la explicación de la Consagración del Templo, de donde pudimos extraer estos interesantes conceptos para su debido estudio e investigación. El ritual de la Consagración cuando es ejecutado debidamente, produce estupendos resultados en los mundos internos, ya que equivale a una llamada que se hace a los Espíritus Planetarios que están al frente de las cuatro líneas, para que la Logia sea reconocida y dedicada al servicio del Gran Arquitecto del Universo. Es de interés conocer que los Espíritus Planetarios, ante señalados, según el Diccionario Esotérico Zaniath, son siete espíritus de carácter triple, que proceden de Dios y tienen a su cargo la evolución de la vida en cada uno de los siete planetas de nuestro sistema solar, y en relación con las cuatro líneas, el mismo Diccionario, manifiesta: “el cuatro representa la materia o forma de las cosas terrestres y los cuatro elementos básicos, Tierra, Agua, Fuego y Aire”.

Los elementos antes indicados, son esparcidos en los cuatro puntos cardinales dentro del templo de manera progresiva. Cuando se esparce el Trigo, “Un Ángel dorado, desciende majestuosamente, seguido por un sequito de Ángeles, algunos de los cuales vienen detrás de el, para seguir como canales del poder de su jerarquía, cuando la Logia se inicia en la Antigua y debida Forma. Al derramar el Vino, se invoca al Gran Ángel Azul del Agua, el que también esta asistido por tres Ángeles de menor jerarquía. De modo semejante la ofrenda del Aceite, llama hacia nosotros un poderoso Ángel color Carmesí, es el Ángel del fuego, que derrama sobre la Logia el más esplendido poder rítmico del más terrible y a la vez adorable de los elementos. Finalmente cuando la sal es esparcida, el Ángel del Aire, baja como relámpago sobre el plano terrestre, el y sus asistentes son de una tonalidad plateada con visos de madreperla. (C. W. Leadbetar, Escuelas Secretas de la Masonería).

En conclusión, la Consagración del Templo se circunscribe , a la transformación de un espacio construido de materiales comunes, en un espacio verdaderamente glorificado preparado espiritualmente, para poder realizar nuestros trabajos y tenidas, bajo el manto protector y de infinita sabiduría del Gran Arquitecto del Universo, realizando una verdadera conexión con la divinidad.

Es Cuanto

O:. de Antimano, Caracas 16 de Mayo de 2006 (e:.v:.)

Fraternalmente

A:.M:. Luis Capecchi

SAL Y AZUFRE


Una vasija de sal y una de azufre se hallan además sobre la mesa, junto con el pan y el agua. Aunque la primera sea habitualmente conocida como condimento, su asociación simbólica con el segundo no deja de parecer algo extraña y misteriosa. ¿Qué significan, pues, estos dos nuevos elementos, esta nueva pareja hermética que se une a la anterior?

Se trata de un nuevo tema de meditación que se presenta al candidato, sobre los medios y elementos con los cuales debe prepararse para una nueva Vida alumbrada por la Verdad y hecha activa y fecunda con la práctica de la Virtud, a la que se refieren el Azufre y la Sal en su acepción más elevada.

Como tal, indica el primero la Energía Activa, que se hace la Fuerza Universal, el principio creador y la electricidad vital que producen y animan todo crecimiento, expansión, independencia e irradiación. Mientras la segunda es el principio atractivo que constituye el magnetismo vital, la fuerza conservadora y fecunda que inclina a la estabilidad y produce toda maduración, la capacidad asimilativa que tiende hacia la cristalización, el principio de resistencia y la reacción centrípeta que se opone a la acción activa de la fuerza centrífuga.

Así pues, de la misma manera que en el pan y el agua hemos visto los dos aspectos de la Sustancia cósmica y vital, en estos dos nuevos elementos tenemos los dos aspectos o polaridades de la Energía Universal, dirigido el primero de adentro hacia fuera, apareciendo exteriormente como derecho (o dextroso), y el segundo de afuera hacia adentro, manifestándose como izquierdo (o sinistrorso).

Son, respectivamente, rajas y tamas –los dos primeros gunas (o cualidades esenciales) de la filosofía india-, y el impulso activo que produce todo cambio y variación, y engendra en el hombre el entusiasmo y el amor a la actividad, el deseo y la pasión; y la tendencia pasiva hacia la inercia y estabilidad es enemiga de todo cambio y variación, produciendo en nuestro carácter firmeza y persistencia, y con su dominio en la mente, la ignorancia, la inconsciencia y el sentido de la materialidad, que nos atan a las necesidades y preocupaciones exteriores y los instintos destinados para proteger la vida en sus primeras etapas.

El primero nos impulsa constantemente hacia arriba y hacia delante, nos anima y nos ahínca en todos nuestros pasos, nos da el ardor, la iniciativa, el espíritu de conquista, la voluntad y capacidad de satisfacer nuestros deseos y conseguir el objeto de nuestras aspiraciones; pero nos da también la inquietud, la inconstancia y el amor de los cambios y novedades, la impulsividad que nos inclina hacia acciones inconsideradas, haciéndonos recoger frutos maduros y perder los mejores y más deseables resultados de nuestros esfuerzos.

El segundo es aquel que nos refrena y desalienta; nos hace recoger en nosotros mismos, nos da el temor y la reflexión, nos hace abrazar y establecer igualmente en el error y en la verdad, en los hábitos viciosos y virtuosos; nos hace fieles y perseverantes, firmes en nuestra voluntad y tenaces en nuestros esfuerzos; nos da la capacidad de atraer aquello para lo cual estamos interiormente sintonizados con nuestros deseos, pensamientos, convicciones y aspiraciones. Nos da la desilusión y el discernimiento, nos aleja de los cambios y de toda acción irreflexiva, pero también de todo progreso, esfuerzo y superación.

Son las dos columnas o tendencias que se hallan constantemente a nuestro lado, en cada uno de nuestros pasos sobre el camino de la existencia, y nuestra felicidad, paz y progreso efectivo estriban en nuestra capacidad de mantener en cada momento un justo y perfecto equilibrio entre estas tendencias opuestas, conservándonos a igual distancia de la una como de la otra, sin dejar que ninguna de las dos adquiera un predominio indebido sobre nosotros, sino que obren en perfecta armonía y nos dé cada cual sus mejores cualidades: el ardor irreflexivo y la paciencia iluminada, el entusiasmo perseverante y la serenidad inalterable, el esfuerzo vigilante y la firmeza incansable, que también simbolizan, sobre la pared del cuarto, el gallo y la clepsidra.
Lavagnini

El Hospitalario en el R:. E:. A:. y A:.


Entre los Oficiales que componen una Logia masónica, el H:. Hospitalario encarna la virtud de la Caridad, como lo testimonia el corazón que figura en la joya de su collar (en el R:.E:.R:. es un corazón inflamado).

Es el depositario del "Tronco de la Viuda" o "de Beneficencia" destinado a socorrer las necesidades pecuniarias de los miembros de la Logia y de sus familias impedidos por motivos de salud o de otra índole.

Él es asimismo el lazo que la Logia mantiene con los HH:. enfermos que no pueden asistir a los Trabajos. Transcribimos lo siguiente, perteneciente al A:. y:. R:.

Después de haber sido revestido con el mandil y devuelto al Este ante el V. M., éste le dice:

"H. Gabe, de acuerdo a una antigua costumbre, adoptada entre los masones, es necesario que se os solicite donéis alguna cosa de tipo o naturaleza metálica, no por su valor intrínseco, sino para que pueda ser depositado entre las reliquias en los archivos de esta Logia, como un recuerdo de cuando habéis sido hecho masón.

Cualquier cosa, Hermano, que podáis tener con vos, de naturaleza metálica, será recibida agradecidamente: un botón, un alfiler, una pieza de cinco o diez centavos, o cualquier cosa, Hermano mío".

El candidato observa que no lleva nada sobre sí, que se encuentra totalmente desprovisto, pues su conductor lo había despojado de todo antes de entrar en la Logia. Tal vez solicite poder ir donde se hallan sus ropas para poder contribuir, lo que el V. M. rechaza, desde luego.

Después de algunos momentos de suspenso éste dice: – H. Gabe, sois en verdad un objeto de caridad: Casi desnudo, sin un centavo, ni siquiera un botón o alfiler que ofrecer a esta Logia. Permitid, Hermano mío, que esto tenga un último efecto sobre vuestra mente y vuestra conciencia; y recordad, si alguna vez véis a un amigo, pero más especialmente a un Hermano, en una condición semejante de desamparo, que debéis contribuir tan liberalmente a su sostén y socorro, como sus necesidades parezcan exigir y vuestra capacidad os permita, sin ninguna ofensa material para vos o vuestra familia".

Después de esto el candidato es "devuelto al lugar de donde vino e investido de lo que antes había sido desvestido" antes de volver a la Logia y ser colocado en el Nordeste, punto cardinal donde era depositada antiguamente la primera piedra de la construcción.

Se trata del simbolismo del despojamiento, imagen de la dependencia de todo ser con respecto al Principio, representado en el espacio sagrado de la Logia, vinculado asimismo con el simbolismo de la caridad en tanto que ésta corresponde al "vértice superior del triángulo iniciático".

Se añade en nota, en el Duncan's Ritual: "El Maestro, asistido por el 1er Vig., (que ha revestido al Neófito con el mandil y le ha enseñado cómo se lleva) deposita la primera piedra de ángulo de una bella fábrica" (el subrayado se halla así en el texto). Ver R. Guénon: "La piedra angular", "Lapsit Exillis", "El-Arkàn", caps. XLIII a XLV de Símbolos Fundamentales...

Fuente Consultada:

Ritual de la Logia Thebah donde se afilió el R:. H:. René Guénon.

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RITUALES DE LA LOGIA THEBAH
NOTA COMPLEMENTARIA


René Guénon fue afiliado a la Logia Thébah, de la Gran Logia de Francia, hacia 1910, asistiendo hasta probablemente 1912. Según indica J. Baylot (Planète Plus, 1970) durante su estancia en ella leyó un trazado cuyo frontispicio era "La Enseñanza Iniciática" (publicado más tarde en Le Symbolisme, enero de 1913), cuyo contenido sería desarrollado en su libro Aperçus sur l'Initiation.

El Manejo Económico de una Logia


José Alfredo Gabriel Guzmán Estrada
P:. V:. M:. de la R:. L:. S:. Víctor Raúl Haya De la Torre N° 143
Vall:. de Lima, 3 de mayo de 2006 e:. v:.


El movimiento económico de toda Logia se maneja con un Presupuesto, al inicio del gobierno de todo V:. M:. que recién asume el cargo, el H:. Tes:. debe presentar un proyecto de presupuesto en C:. del M:., el primer paso para su aprobación es la entrega de dicho proyecto a la Comisión de Hacienda para que en la próxima C:. del M:. entregue un dictamen para su discusión final, también se estila que copia dicho Proyecto sea entregado a todo los MM:. de la Logia para estar enterados y poder participar con conocimiento de causa.

Aprobado el Presupuesto en C:. del M:., éste es el documento que servirá para hacer el seguimiento de todas las actividades económicas de la Logia, pudiendo hacerse los ajustes necesarios del caso durante el proceso (ejercicio), son responsables de ello el Tes:. y el V:. M:.

Las funciones del Tesorero de una Logia están determinadas en el Manual correspondiente del Tesorero, así como lo que se indica en el Art. 62 del nuestro Estatuto y así como se establece en el Art. 69 de nuestra Constitución.

En dicho Presupuesto, como puede verse en el inciso 6 del citado Art. 69 de nuestra Constitución, se establece desde el inicio del ejercicio del V:. M:., los gastos, los que están en función de los ingresos previstos, el Dictamen de la Comisión de Hacienda es puesto a consideración de la C:. del M:. en la que se sanciona. Todo movimiento económico adicional que no está presupuestado requiere también de la aprobación de la C:. del M:., nadie puede disponer de los bienes y tesoros de la Logia de su propia y libre voluntad, ya que se trata de bienes y valores entregados para su custodia y administración y no para su libre y personal disposición.

La C:. del M:. es la máxima instancia administrativa de la Logia, es la “Asamblea de Logia” equivalente a la Gran Asamblea de la Gran Logia, entre sus diversas atribuciones de puede citar: La admisión de nuevos miembros, la concesión y aprobación de los adelantos y las exaltaciones, la afiliación de de HH:. de otras Logias como se establece en el Art. 23 de nuestra Constitución, la condecoración a los Estandartes de Logia, la distinción de Miembro Honorario, Art. 23 inciso (a) de nuestro Estatuto, la distinción de Miembro Vitalicio, Art. 23 Inciso (b) , etc.

También se requiere de la aprobación de la C:. del M:. la Condecoración con la Med:. del Tall:. al Estandarte de una Logia, etc.

También puede presentarse el caso que haya necesidad de regularizar dichos Actos que pudieron haberse realizados en situaciones de suma urgencia, necesidad o premura inesperada que explicadas a posterioridad sean justificadas, por lo tanto, en general, para realizar todo movimiento económico que no esté presupuestado, de manera indefectible tiene que ser visto en la C:. del M:. y debe tener la sanción de la misma. Como información complementaria, se recomienda revisar en forma adicional el Manual del Secretario para Logias Simbólicas puesto en circulación con aprobación de la Gran Logia del Perú.

Ningún V:. M:. está liberado de las responsabilidades, tanto administrativas como económicas, ya sea en una Logia que practica el Rito de York o que Trabaje en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, por lo mismo NO puede disponer a su entera voluntad personal de los bienes y tesoros del Taller, debe quedar bien claro, que la Logia es una institución, por lo mismo que, todo el patrimonio de la Logia es de todos y cada uno de los miembros.

En el caso del Saco de Beneficencia, como su nombre lo indica es para uso específico, en el R:. E:. A:. A:., lo que se obtiene mediante el recorrido de este saco se encuentra bajo custodia del H:. Hospitalario, como se establece en el Art. 63 de nuestro Estatuto y en el Rito York está a cargo y bajo responsabilidad del V:. M:. conjuntamente con el Tesorero.

Además de lo antes normado y mencionado en el párrafo anterior, con relación a los sacos, existe en el ritual de la Masonería Simbólica decretado por la Gran Logia del Perú, Rito de York Grado de Aprendiz, al final del mismo con el título de “Recomendaciones Generales para los trabajos en Logias del rito de York” , lo siguiente:

(…) 16. Los Sacos circulados tienen destinos específicos, por lo tanto sus troncos no deben mezclarse sino registrarse en cuentas separadas. El de Beneficencia sólo se aplicará a una obra filantrópica que el Taller acuerde o se destinará para apoyar obras filantrópicas de la Gran Logia del Perú.

Para abundar en mayores detalles al tema, indicaremos, como ya se ha establecido, que ninguno de los bienes de una Logia pueden ser dispuestos a libre voluntad y sin rendir cuenta de ellos a la C:. del M:., como se desprende de la lectura del Art. 54° de nuestro Estatuto, en que se establece las funciones del V:. M:.

En el Art. 62° de nuestro Estatuto se determina, que las funciones de los Oficiales de una Logia son las mismas funciones que se indica en nuestra Constitución para los Grandes Oficiales de Gran Logia del Perú, por lo tanto, para el caso del Tesorero estas funciones se indican en el Art. 69° de nuestra Constitución.

Finalmente, la responsabilidad en el cumplimiento de las funciones indicadas, se establece en el Art. 196° de nuestro Estatuto que a la letra dice: "El incumplimiento de los deberes de función señalados en la Constitución y Estatutos deriva responsabilidad sujeta a proceso masónico. Cualquier H:. puede denunciarlo por intermedio del V:. M:. de su Logia".

Si bien, el Art. 55° de nuestro Estatuto determina que la autoridad del Venerable Maestro es inviolable y que ningún hermano de su Logia puede censurarle y sólo la Asamblea y el Gran Maestro tienen la facultad de pedirle cuenta de sus actos, también se debe tener en cuenta, que ante cualquier incumplimiento y/o exceso de los deberes de función por parte de un Venerable Maestro, existe el procedimiento o la forma, que el mismo Estatuto en su Art. 73° establece:

“Art. 73°.- Cualquier Hermano puede apelar de los acuerdos de su Logia o de las decisiones del Venerable Maestro elevando una solicitud al Gran Maestro, quien la resuelve o la pone a consideración de la Gran Asamblea, según lo estime conveniente. Mientras la apelación se halla en trámite, el acuerdo o disposición apelados deberán cumplirse”.

Veamos ahora las cuestiones de procedimiento que se desarrollan en el seno de una Logia, tradicionalmente, en el recorrido de los sacos en una Tenida Ordinaria se recorren dos sacos, una que es el de Beneficencia y la otra que es llamada de Logia, a este último también se le denomina Pro Taller o Pro Logia.

En el saco de Logia se reúne los metales que entregan los RR:. y QQ:. HH:. del Tall:. para fines específicos que tiene programado la Logia, es importante aclarar que el despojo de este saco no puede tener otro destino que no sea el específico, por lo tanto no le pertenece al V:.M:. y a ningún otro H:. del Tall:., así mismo, tampoco la Logia es propiedad de ningún H:. independiente del cargo que ejerza. Es bueno recordar que el V:. M:. y los 2 Vigilantes gobiernan la Logia como lo establece el Lindero X y el Art. 26° de la Constitución de la Gran Logia del Perú.

También puede haber el recorrido de un tercer saco que generalmente recibe el nombre de “Eventos Especiales”, al igual que en el caso anterior, los metales recaudados de su despojo están destinados a una actividad o evento programado al inicio de la administración del V:.M:., como puede ser para becas del Colegio Arturo Padilla Espinoza, etc.

Los otros ingresos que puede recaudar una Logia, por lo general son los provenientes de los derechos que se cobran por los conceptos de Iniciación, Adelanto y Exaltación, además de los que se capta de las cuotas mensuales del Taller.

Recordemos que todo ingreso se hace por caja, es decir, todo ingreso es recibido por el Tesorero, como se establece en el Art. 13 del Manual o Reglamento para los Tesoreros de Logias Simbólicas de la Gran Logia del Perú , por lo que de manera automática se convierte en un bien de la Logia y por lo tanto nadie puede disponer de ello por su propia y libre voluntad. Aquí volvemos a recordar que “cualquier falta de función” puede ser sujeto de denuncia como lo establece el Art. 196 de nuestro Estatuto.

En conclusión, ningún V:. M:. puede disponer a libre voluntad de los bienes de una Logia, tal es así que no puede por ejemplo regalar los collarines o los mandiles del Taller a otra Logia, sin la consulta correspondiente a la C:. del M:. de su Logia, así mismo, tampoco, un V:.M:. puede disponer que el dinero de la cuota mensual de un H:. sirva parar pagar la cuota mensual de otro H:.

Es bueno saber, que no puede realizar estas situaciones irregulares, como un correctivo a cualquier despropósito es que se realizan las auditorias y las actividades de fiscalización de las Comisiones de Hacienda, lo que puede darse tanto en el seno de Logia, como en la Gran Logia, así mismo se tiene el Código de Justicia y Procedimiento Masónico que estable los cargos y penas para las infracciones al nuestra Constitución y Estatuto.

Para concluir, un V:. M:. no puede cometer abusos y menos realizar excesos en la administración de los bienes y el Tesoro de la Logia, un V:. M:. es más bien, el encargado de utilizar su buen criterio y sentido común, para evitar estas situaciones, y porque de no hacerlo, nos queda aún una instancia más que es la que corresponde a los tribunales ordinarios, como lo establece nuestros Códigos Civil y Penal, hacemos esta cita final en concordancia con el Art. 2º de nuestra Constitución que así lo indica.

Bibliografía Consultada:

. Gran Logia del Perú. Constitución Masonica vigente, versión oficial.

. Gran Logia del Perú. Estatuto Masónico vigente, versión oficial.

. Gran Logia del Perú. Código de Justicia y Procedimiento Masónico, versión oficial y vigente.

. Gran Logia del Perú. Manual para Secretarios de las Logias Simbólicas, versión oficial y vigente.

. Gran Logia del Perú. Manual para Tesoreros de las Logias Simbólicas, versión oficial y vigente.

. Gran Logia del Perú. Ritual de 1er Grado del Rito de York, versión oficial y vigente.

Entrevista GM Argentina

El Muy Respetable Gran Maestre de la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, Dr. Sergio NUNES estará en el programa "Noticias de la Historia" que se difundirá este sábado 26 de Mayo a las 15.00 hs. (con repetición el domingo a las 23.00 hs.) por el canal de cable TN.

Este mismo día sábado será entrevistado (en vivo) por Radio Continental a las 17.00 hs. por los periodistas Orlando Barone y Diego Valenzuela.

Los Símbolos y la Masonería

Artículo Original aqui


Signos y Símbolos – Definiciones preliminares

Se llaman signos a los elementos físicos capaces de representar un objeto, idea o concepto distinto de sí mismo. Decimos así, que las nubes negras son signo de lluvia, o que una mueca es signo de dolor. Se llaman símbolos a los elementos creados artificialmente con la misma función. Así, una señal de tránsito, un muñequito en la puerta del baño, son símbolos, ya que su relación con aquello que indican se ha determinado más o menos arbitrariamente. Los signos pueden ser comprendidos por los seres humanos y los animales; los símbolos no.

Pero no debemos olvidar nunca que los símbolos, aunque manifiesten fielmente la idea que quieren expresar, no son esa idea, o mejor dicho, son la forma, la piel, que recubre la idea, el espíritu de la cosa representada. Por eso mismo ni los masones, ni nadie que se dedique al estudio de la Ciencia Simbólica, deben confundir el símbolo con lo simbolizado.

Los Símbolos, la Ciencia Simbólica y la Masonería

Si nos paramos a pensar detenidamente en nuestra actividad diaria, vemos que la presencia de los símbolos es muy abundante: En química, matemáticas, informática o simplemente en la regulación del tráfico, los símbolos nos indican asociaciones convencionales, aceptadas universalmente para el mejor ordenamiento de nuestra actividad.

También estamos familiarizados con el uso de palabras, gestos y objetos representando conceptos morales, afectivos, intelectuales o religiosos.

Vemos pues, que nuestra vida está llena de símbolos que ejercen una acción ordenadora de nuestra conducta, constituyendo una trama invisible conocida y aceptada por todos los miembros de una misma cultura que hace posible la comunicación, la relación social, el ejercicio de las profesiones y, más aún, los símbolos son el tejido del que está hecha la misma cultura de cada grupo, tanto los pequeños núcleos de población cómo los grandes movimientos culturales o religiosos. Es más, imaginemos por un momento qué sería de nuestra vida individual y grupal si desaparecieran los símbolos y nuestra memoria de ellos; sin signos, gestos, ni lenguaje. Seguramente podemos estar de acuerdo en que la resultante es sólo caos, en el que ninguna realización personal o grupal sería posible.

La mayoría de los símbolos a los que nos hemos referido son producidos, inventados, diseñados por el hombre.

Todo este entramado simbólico sería innecesario para alguno en una isla desierta, que podría acceder a la comprensión directa de todo su entorno sin necesidad de la intermediación de símbolos.

Pero el número de habitantes, la complejidad de la vida social y económica, la variedad y diversidad de todo tipo de cosas y opciones, han hecho necesario que, poco a poco, el tejido simbólico haya ido creciendo, salvando así la distancia que separa al "diseñador de los símbolos" y aquel al que van destinados. Y si un visitante viene por primera vez a nuestro grupo cultural, será necesario que se le instruya acerca del código simbólico imperante a fin de que pueda entender nuestra forma de vida y ser uno más entre nosotros.

Podemos destacar de lo anteriormente expuesto que el símbolo ejerce un poder ordenador de la vida, sin el cual estaríamos inmersos en el caos. Y que, en la medida en que el hombre ha ido incrementando la complejidad de su cultura, se ha visto impelido a ordenar sus nuevas construcciones culturales con más códigos simbólicos. Desde luego, este orden actual al que nos referimos, como ya hemos dicho, ha sido puesto arbitrariamente por el hombre.

Partiendo de este plano conocido y accesible, pensemos ahora en otro tipo de símbolos, aquellos que representan una realidad inaccesible a la observación directa y a la comprensión de la razón. Pensemos en lo que el hombre ha encontrado ya hecho en la naturaleza, en sí mismo, en el universo entero: el cielo con sus cuerpos celestes moviéndose sincronizadamente, la tierra y sus reinos y seres que la pueblan, los elementos de los que todo está hecho, las estaciones y los ciclos, el día y la noche, las formas que se repiten en todos los seres, los colores, olores y sabores, en las leyes de atracción y repulsión por las que se produce todo movimiento, la polaridad y su alternancia..., en fin, en el orden y las leyes en base a las cuales se sostiene lo que llamamos el mundo, el universo y nosotros mismos. Cada una de estas manifestaciones es un Símbolo. Estudiar los símbolos es el objeto de la Ciencia Simbólica.

La Ciencia Simbólica nos enseña que todos los seres de la creación son el cuerpo, la manifestación de una realidad oculta en ellos mismos, imperceptible por nuestros sentidos, y que pertenece a un orden superior. De la misma forma que una pintura es la materialización de la idea del artista, la cual se oculta en su interior y se manifiesta a través de la pintura misma, así las obras que nos presenta la naturaleza contienen y manifiestan la idea del Creador constituyéndose por ello en su símbolo.

Entonces, toda la creación puede ser comprendida como un código simbólico armónico, en el que todo está interrelacionado: el cielo, la tierra, los diferentes reinos y los seres que la habitan, lo infinitamente pequeño y lo infinitamente grande, separado en reinos y planos pero coordinado por las mismas leyes, animado y sostenido por el mismo Espíritu.

Y en esta inmensa sinfonía, el Hombre aparece en el centro de la creación, reflejo directo del Creador; microcosmos, capaz de repetir el gesto creacional a través de sus manifestaciones culturales: el lenguaje, las letras y las palabras; los números; las artes en todas sus formas: pintura, escultura, arquitectura, música, danza, atuendos, ornamentos, tejidos; los oficios, las construcciones, los juegos, simbolizan ideas arquetípicas, que adquieren un carácter universal, como demuestra el hecho de que se hayan repetido en diferentes lugares y épocas.

Podemos decir que el símbolo es el cuerpo de una idea ordenadora. En la mente del Creador se diseñó la manifestación como un ingenio completo y armónico, que diera forma a las indefinidas posibilidades de expresión de sus propios atributos. Lo que vemos, y también lo que no vemos, pero está manifestado, es el cuerpo de esa idea creadora y cada una de las criaturas constituye la exteriorización de esas leyes, de esa intención ordenadora y expresiva.

El símbolo tiene una doble naturaleza: la de la materia de que está hecho, los cuatro elementos, y la de la Idea que expresa, siendo realmente ambas cosas materia e Idea. La Idea adquiere así una dimensión activa, que suma a la potencia organizadora la potencia ejecutora, es decir, la idea creadora es una Idea-Energía.

Por su doble naturaleza, partiendo de su parte material podemos acceder a ese plano superior del que el mismo símbolo participa, siendo conducidos por su mediación, como si de un vehículo se tratase, a la región de lo sobrenatural y suprahumano. Los símbolos, en primer lugar son percibidos por nuestros sentidos.

A partir de ahí, tenemos la posibilidad de penetrar a través de esa apariencia y recorrer el camino que nos llevará hasta planos más sutiles, más allá del espacio, del tiempo y del movimiento incesante de este plano donde nada perdura. Es decir, el símbolo puede conducirnos desde el mundo material hasta el espiritual. Es, pues, un vehículo de ida y vuelta, mediante el cual las energías sutiles descienden y nosotros podemos ascender, constituyendo el único medio conocido de realizar este viaje en el que el espíritu se materializa y la materia se espiritualiza.

La capacidad de diseñar y utilizar símbolos le ha sido dada al hombre desde el comienzo de los tiempos, o dicho de otra forma, la naturaleza del hombre es sensible al influjo de los símbolos y él mismo es capaz de elaborarlos. Para que la influencia de los símbolos pueda ejercerse en nosotros es necesario, primero que los reconozcamos como tales para después acercarnos a su estudio, contemplación y meditación en una disposición receptiva, abierta y confiada. El símbolo es enormemente generoso con quien lo atiende y respeta, abriendo poco a poco una suerte de inteligencia nueva en el hombre, no la lógica que nos desarrolla nuestra educación habitual, sino la Inteligencia del Corazón, la Institución Superior mediante la cual el hombre puede alcanzar el conocimiento de sí mismo.

Los símbolos tienen la facultad de responder a nuestras preguntas, de abrirnos las puertas al conocimiento de la realidad que se oculta en el interior de nosotros mismos y de todo lo creado, realidad más REAL que aquella que perciben nuestros sentidos, que es anterior y es la causa del universo, como nuestra idea de un proyecto es anterior y es la causa de su realización.

El universo entero es un solo símbolo que debemos aprender a conocer primero en sus partes, de la misma forma que debemos leer cada una de las palabras de un libro para comprender la obra completa. En la lectura que podemos hacer de los símbolos vamos reconociendo poco a poco la Unidad inalterable e inmóvil que subyace a toda la manifestación.

En el origen de los tiempos el hombre primordial sabía leer directamente estos símbolos en la naturaleza y en él mismo poseía un conocimiento directo del Ser . En la actualidad el hombre necesita ser enseñado a distinguir estos símbolos sagrados de los símbolos comunes elaborados por nuestra sociedad y posteriormente a acercarse a ellos, a conducirse con ellos y a través de ellos poder acceder al Conocimiento. Este es el sentido y la razón de ser de la Tradición, tronco común del que brotan Tradiciones como la Hermética, la cual se concreta actualmente en nuestra Orden, la Masonería Universal, la que conserva no sólo el saber de la Ciencia Simbólica, sino la capacidad operativa de transformar a un hombre común, profano, en un hombre iniciado, regenerado en su seno, nacido de nuevo mediante la influencia de la Iniciación, quién podrá, con su trabajo, firme propósito y actitud receptiva CONOCER a través de los símbolos al SI MISMO, o lo que es lo mismo, reintegrarse, desde este mundo plural, disperso y cambiante, en la unidad inmutable del SER.

Como decimos, la Masonería carece de dogmas, pero sí tiene principios. Los símbolos que decoran la Logia son los principios que están expresando las distintas modalidades de la Inteligencia del Gran Arquitecto; dado que finalmente la Logia como imagen del Cosmos no es sino una representación del cuerpo del Gran Arquitecto. El cosmos, en realidad, es el símbolo mismo del Gran Arquitecto y todos los elementos que están dentro de la Logia representan lógicamente distintos aspectos de su Inteligencia y su Sabiduría. Y la investigación en todos esos símbolos, en su significado, va dándole al masón la síntesis de la idea que todos ellos están revelando, operación relacionada directamente con aquella expresión masónica que dice que la labor del masón es "difundir la luz y reunir lo disperso". Esa luz a difundir es la Luz que emana del Delta Luminoso y que nos permite reunir el significado profundo de los distintos elementos simbólicos que decoran la Logia, porque en esa reunión no sólo estamos concibiendo ideas, sino que fundamentalmente nos estamos reuniendo y concibiendo a nosotros mismos, es decir, nos estamos encontrando, descubriendo nuestro auténtico ser y esencia, pues en realidad se trata de una reintegración interior, y para eso precisamente es para lo que sirve el símbolo, porque no es la Forma de éste la que ilumina la inteligencia, sino justamente la Idea que está plasmada en él.

Darío A. G., A:. M:.
R:.L:. Giordano Bruno Nro. 38
Oriente de Buenos Aires
Febrero de 2007 e:.v:.

AL HERMANO AUSENTE O FALTON SIN RAZÓN

P:. M:. Álvaro Ávila Vadillo

!H:.! ¿Qué es esto? ¿Eres Tú en verdad?, detente un instante entre Columnas, observa, ve a tus HH:., aún dudan de que seas Tú, eres el que tras larga ausencia vuelve a su Logia Madre. Dime, haciendo un examen de conciencia propia, sé franco: ¿Ha sido plenamente justificado el que no hayas concurrido y cumplido con tú deber de asistir a las Tenidas?

En torno tuyo las caras de tus HH:. se encuentran desapacibles, entre desconcertadas y contentas. Mira y verás lo que tu larga ausencia a propiciado. Encontrarás HH:. de tu misma Logia a los que no conoces; ni ellos te conocen a ti, ¿y cómo podrían sentir cariño y amor fraternal por quien involuntariamente se ha alejado de ellos? ¿Cómo puedes llamar HH:. a quiénes no aprecias ya que los has abandonado?, además, si tus faltas no han sido motivadas por causas poderosísimas, de otra manera no se justifican, ¿con qué razones les has de convencer de que sí eres un buen H:.?

Atentamente veamos las caras. Verás rostros sonrientes, son los HH:. que saben que sino hoy, quizás otro día hayas sido un buen H:. y disculpan tu falta por la alegría de verte nuevamente laborando como corresponde. También mirarás HH:. que te ven con enojo fraternal H:., porque todavía no te quieren perdonar, porque saben que tu error no sólo perjudica a tu Logia que esforzadamente sigue adelante a pesar de los obstáculos y a la cual no quieres prestarle tu contingente; no sólo a ella perjudicas, NO, sino que perjudicas a la Masonería Universal y por último, verás a tu alrededor rostros indiferentes, no les importa que vengas ó dejes de venir y estos son los HH:. que deben preocuparte seriamente, pues has dejado de conquistar su afecto; son los nuevos HH:. que no te conocen y a quiénes el día de mañana se habrán de confiar los destinos de la Masonería y a los cuales puede que les importe poco tu dolor o tu pesar, ya que no has podido demostrarles que eres un buen H:. de verdad y que sientes la Masonería, como todo buen Masón debe sentirla: Espiritual, Intelectual y Materialmente.

Es preciso, es necesario que cese esa tu actitud, tus HH:. mayores, que lo somos nosotros, tenemos la urgencia de que nos des el ejemplo concurriendo regularmente a todas las Tenidas cuando menos, pues, ¿cómo has de pedirnos después que concurramos si tú no lo haces? Cuan hermoso y divino don se nos ha concedido al darnos la LUZ y ya ves cuan poco lo apreciamos. Preferimos pasar nuestro tiempo en fruslerías, en pasatiempos baladíes en vez de procurar perfeccionarnos aprendiendo cada vez mas profundamente la Bellísima Filosofía de la Vida que nos enseña la Masonería y no sólo contentos con eso, tratamos de aniquilar a la Logia que nos ha dado acogida tan benigna y protectoramente y caemos en desmedidos errores e incurrimos en los más nefastos vicios como son la PEREZA, LA MALICIA, LA INJURIA, LA DEJADEZ Y EL PEOR DE TODOS, LA ESTULTICIA, que es el compendio de todos ellos y aún más.

¿Por qué cerrar los ojos a los visible? ¿Por qué ser insensible a lo palpable? ¿Por qué desentendernos de lo que es perfectamente comprensible? ¿No H:., en nuestra amada Logia no queremos; ni debemos tener simples PAGA-CUOTAS, no queremos ni debemos retener miembros INVISIBLES. No debemos ni queremos defender una ELITE de la ausencia y que son Masones sólo para ufanarse de ello sin tan siquiera contribuir con su visita semanaria.

Es tan poco venir a laborar y dar luz UNA SOLA VEZ POR SEMANA como mínimo, que los HH:. que asisten continuamente nos sentimos lastimados al ver tu falta de voluntad. Vemos cuan poco nos ayudas a combatir las fuerzas negativas que nos rodeaban antes de la Iniciación y que se van incrementando sin cesar ante la indiferencia de los HH:. como Tú y los que sentimos herido el corazón, tenemos mil muertes del alma.

Comprendemos que somos muy pocos para tan inmensa labor y aún así hay quienes voluntariamente se excluyen en el esfuerzo, ya sea por temor, o por conveniencia, en fin, por tantas causas injustificadas de las que juramos despojarnos solamente un día. Ese día que todos los HH:. tenemos al llegar como neófitos.

Si ahí, donde te encuentras, en este momento entre Columnas Q:. H:. te pidiéramos con la verdad en el alma y la sinceridad en los ojos que nos dieras solución a este problema de la falta de asistencia, a ti que has faltado continuamente y sin razón; ¿QUE NOS RESPONDERIAS?

Que borremos a los HH:. reglamentariamente, ¿Qué dirijamos Plancha tras Plancha eternamente y sin contestación?, Que visitemos a los HH:. en su domicilio y les hiciéramos ver una gran falta que él ya conoce? No HH:., no es así como se resuelve tan grave problema. No es haciendo reproches, ni forzando voluntades como hemos de salir avantes. No es dirigiendo frases más o menos duras, o alabanzas más o menos buenas. Nosotros los Masones no debemos desear más que honor y sabiduría y no es a golpes como se adquieren, ni bajo la influencia de ninguna clase, es como hemos de lograr asistencia.

¿Sabe cómo?, Sí, todos lo sabemos, es cumpliendo con nuestro deber, sin coacción de ninguna especie, sin dirección de nadie, ni de nada, sino con la convicción adquirida particularmente. Por nuestro propio convencimiento de que cumplir es lo mejor y más hermoso. ¿Habéis visitado algún laboratorio? ¿Si es así, ya lo sabéis?. Si no, sabedlo ahora: Toda fórmula química tiene innumerables períodos de transición más o menos largos, desde que se inicia hasta que termina el proceso químico; desde que se unen las materias iniciales no importa sean primas o compuestas, hasta que se llegan a obtener las síntesis o productos, se va elaborando paulatinamente y con el devenir del tiempo y la sabia dirección del que gobierna la gestación, se obtiene el fruto deseado.

Más eso no es todo. Siguiendo con la comparación vemos que al tomar uno, dos o más elementos, digamos simples, se obtiene el compuesto anhelado, pero siempre quedan detritus, sedimentos, lo que se llama la hez de aquellas substancias elementales que ahora forman un compuesto deseable, manufacturado por el acto volativo del que es su creador.

El gran Químico lo es el G:. A:. D:. U:., a la gloria del cual estamos perfeccionando continuamente y por último, los elementos simples o compuestos básicos imperfectos lo somos el material humano, que a su vez se compone o componemos infinitas partículas, sentimentales, instintivas e intelectuales, por lo que somos en mayor o menor grado puros y llegamos precisamente al motivo de mi charla improcedente y sencilla.

Los profanos son elementos desperdiciados sin siquiera someterlos a prueba y los HH:. los sujetos a ella. Algunos hay con mucho de bueno, otros con algo aprovechable y finalmente los que en definitiva podemos ser desechados por inservibles.

Al hacer la sublimación de los elementos primordiales, vemos que sin lugar a duda; en el crisol formidable y pavoroso de la Logia queda puro y brillante material sin tacha y sin mancha; pero también vemos con dolor que de otros materiales no nos queda más que humo y ceniza. Comprendemos que no es una luz fulgurosa si es instantánea, es preferible el material de una luz modesta pero perdurable. Lo ideal sería y es, una sustancia que una vez purificada, al recibir el SER y obtener la LUZ no sólo la esparciera en una sola dirección sino que el polarizarla, dirigiera sus rayos luminosos hacia todos los puntos cardinales. Que raro es encontrar material de tal calidad QQ:. HH:.

Ya veis Q:. H:., no es mucho lo que deseamos para estar contentos y satisfechos, claro no es posible exigir que todos seamos de material polarizado pero si anhelamos la dulce, modesta y benéfica luz perenne.

Los que asisten siempre, no desmayéis, concurramos siempre a buscar la ciencia y la virtud; concurramos pudiendo hacerlo y al no poder, hacer un esfuerzo sobrehumano y concurrir lo más frecuentemente posible, que por fin veremos cuan bello es ser un Masón Perfecto.

lunes, mayo 14, 2007

Como los valores dan forma al progreso humano



Los símbolos que presentamos en esta nota tienen de seguro un montón de significados en disciplinas y contextos diferentes. Desde la Masonería, en un primer aspecto, se los consideran como herramientas que ayudan en el progreso personal. Por lo tanto, defino los símbolos presentes en términos puramente subjetivos como los valores, actitudes, orientaciones que prevalecen entre las personas. En la presente nota exploraremos la forma en que estos símbolos con esos sentidos subjetivos afectan el alcance y la manera en que los hombres consiguen o no lograr un progreso humano.

El esfuerzo permanente y constante consigue que poco a poco se produzcan modificaciones en nosotros; este esfuerzo, difícil de mantener, se ve distraído por los ruidos ambientales y cualquier ocasión es buena para cesar en el empeño; otras veces uno mismo cede ante el tedio y busca la justificación necesaria para dejar de hacer el esfuerzo.

La decisión firme de desbastar la piedra bruta, no es suficiente y el trabajo constante y permanente tampoco. Es necesario, previamente, conocer la morfología y cristalización de la piedra, sus posibilidades, sus límites y sus características. Ver en su irregularidad la mejor forma cúbica posible, con el fin de no despreciar ninguna partícula útil. Intuir lo prodigioso que contiene, para rescatarlo y ofrecerlo a la vista.

Es preciso conocer su composición y dureza para poder determinar previamente por donde y como comenzar a desbastar, porque el cincel cuando recibe el impulso del mazo, si no se utiliza con habilidad puede herir la piedra y dividirla en mil pedazos. Es preciso conocer el interior profundo del "yo", a veces solamente para conocer cuales son las limitaciones y cuales las potencialidades, ya que el proceso de cubicación, (rectificación), no se acaba nunca; siempre hay un plano que podría aproximarse mas a su perfección geométrica.

La Geometría exacta y perfecta existe en todo el universo, nosotros somos reflejo de esa obra a la que aspiramos sin alcanzarla plenamente. Esta realidad no ha de frustrarnos, tampoco podemos abrumarnos ante la ingente tarea, porque cada momento que pasa nos aproxima a esa realidad perfecta. Para tomar conciencia de ello nos ha sido entregada una regla con veinticuatro pulgadas. Asombrosa herramienta que mide todo lo dimensionable.

Este trabajo ya iniciado, avanza con lentitud: es un trabajo delicado, requiere primero de una limpieza general de todas las adherencias y prejuicios culturales con los que nos arropamos para sobrevivir; hay que eliminar subterfugios, en los que nos escondemos con el fin de no mostrar nuestra verdadera realidad; unas veces es timidez otras cobardía, pero siempre nos protegemos ocultándonos o disfrazándonos con nuestras mejores galas culturales.

Huimos del "yo profundo" quizás porque no queremos conocerlo, nos asusta lo que somos. Pero llegado el momento, tenemos que comprender que estamos en un proceso voluntario al que nos hemos comprometido y del que nos han aceptado, ayudándonos en este camino de perfeccionamiento personal.

Todas las piedras no van a alcanzar la misma cubicación pero todas son importantes y necesarias para la perfección de la construcción a la que estamos comprometidos. Tan importante es la piedra angular del arco como cualquier otra, para existir en su unidad y sentido. Y que decir tiene, la importancia que adquiere cualquier piedra anónima soterrada en los cimientos, ¿podría existir la bella piedra labrada, y lucir en su justo lugar sin el apoyo de esta compañera?

No podemos comparar en importancia, cada piedra en si encierra su propio valor y todas colaboran en la grandeza de la construcción. ¿Acaso no hay belleza en la decisión de permanecer en otro sitio que no sea el angular, para hacer destacar el agraciado trabajo tallado por los demás? Si no entendemos la grandeza del todo, en cada una de sus partes, no entenderemos la importancia que cada unos tenemos en la construcción de la obra.

Las dos herramientas, mallete y cincel, deben de trabajar sincronizadamente, el primero impulsa al segundo de tal manera que esta dualidad es inseparable, ya que, separadamente es inefectiva en nuestro trabajo de cubicación: necesitamos de la armonía de las dos, para que el efecto sea óptimo. Cada persona, cuando tiene presente estos dos símbolos, en su intimidad, anticipa sin quererlo uno de ellos; hay quien adolece de constancia y perseverancia dando mayor significación a la agudeza del cincel, quizás esta predilección responda a lo que cada uno valora más; pero cada uno puede compensar sus propias debilidades, a partir de sus fortalezas. Por ejemplo el cincel del hermano es poco agudo y afilado, pero su constancia hará que trabaje sin cesar hasta obtener lo que busca. Pero, ¿porque se valora más la agudeza y el ingenio a la constancia? cuando sabemos que los mejores trabajos son los más bruñidos y esto solo se consigue con insistencia y perseverancia.

El ritmo armónico y acompasado de fuerzas que desde el mallete se desplaza con ingenio y a través del cincel a la piedra bruta se ha de mantener en todas las esferas de la vida.. Una vez iniciado el camino, no cabe la marcha atrás, solo el trabajo medido y calculado con la regla nos llevará al éxito en nuestra empresa. Éxito que comienza a manifestarse a través de la verdadera alegría: la alegría interior experimentada cuando sentimos las pequeñas transformaciones de nuestra identidad; alegría que fluye hacia el exterior e inunda a los que nos rodean.

De las tres herramientas, la regla de veinticuatro pulgadas, en mi opinión, es el símbolo mas versátil; sus significados siempre refieren aspectos comparativos: partimos de unas referencias y las aplicamos sobre el objeto para poder apreciar las diferencias por defecto o por exceso; se abordan aspectos cuantitativos y cualitativos, pero sobre todo nos ayuda para conocer en que situación nos encontramos, hasta donde hemos avanzado en nuestro trabajo y como lo estamos desarrollando.

De todos los significados el mas recurrente, en mi pensamiento, es el de regla como medición de las veinticuatro horas que tiene el día. Su imagen es un aliciente para la organización del trabajo y del descanso. Ante la visión de la regla se comprende la totalidad del día y sus posibilidades, para obtener un buen rendimiento. Es un complemento del Mallete y del Cincel, los tres activados adecuadamente son fundamentales en el perfeccionamiento personal.

jueves, mayo 10, 2007

Reconocimiento para nuestro Blog

RR:. y QQ:. HH:.

En este link podrán encontrar el reconocimiento otorgado a nuestro blog por la Logia St. Andrew 518 del Or:. de Inglaterra


http://www.standrew518.co.uk/2007/Award%20Winners/Awards-Presented.htm

Fraternalmente,

Cosmoxenus

domingo, mayo 06, 2007

Diversas decoraciones deTemplos Masónicos en el Mundo

Templo Groussier en Francia


Gran Templo de la Gran Logia Nacional de Francia


Templo de Filadelfia (U.S.A.) con decorados egipcios


Gran Templo de la Gran Logia Unida de Inglaterra

Las Baterías Masónicas

La palabra BATERÍA, voz que también viene de la Lengua Latina "BATUERE", misma que se interpreta como Golpear, Batir, Revolver, etc.; igualmente indica la acción de hacer ruido, o al acto de producir Chasquidos sonoros, al golpe sobre instrumentos acondicionados para el objeto; se refiere también, a una colección de artefactos o útiles de cocina; lo mismo que a un recipiente en que se acumula la Electricidad; del mismo modo se le denomina, a una Línea o conjunto de Cañones, en disposición de hacer fuego; al acto de atacar o de sostener, por medio de la FUERZA al conjunto de bocas de Fuego de Alto Calibre; se refiere también a una Unidad Táctica y Orgánica del Arma de Artillería, y así sucesivamente; con el nombre de BATERÍA, se conoce el acto de Hostilizar, de Acosar y de no dar REPOSO a cualquier adversario.

Por lo que respecta a los Rituales Masónicos en vigor, y dentro del Ceremonial adoptado por nuestra Augusta Institución, la palabra BATERÍA tiene muchas aceptaciones; en primer lugar se nos manifiesta como una demostración alegre y ruidosa que se efectúa, para expresar los sentimientos de JÚBILO o REGOCIJO; y en el segundo lugar, cuando se ejecuta para expresar los sentimientos de DUELO o de LUTO, en memoria de los hermanos que han pasado a ocupar su sitio en el ETERNO ORIENTE; en el primer caso, se aplaude con ambas manos en la forma que se nos ha enseñado; estas manifestaciones pueden ser SIMPLES, TRIPLES, POR TRES VECES TRES o LIBRES; en el segundo caso, o sea el que se refiere a la BATERÍA DE DOLOR, se efectúa golpeando con la palma de la mano derecha el antebrazo izquierdo, para producir un ruido apagado, de la manera que también se nos ha enseñado; estas demostraciones de DUELO o de LUTO, como su nombre lo indica, se tributan durante las Tenidas Fúnebres, o para rendir los homenajes u honores respectivos a los hermanos desaparecidos; o bien para conmemorar los aniversarios de los referidos acontecimientos, esta BATERÍA puede ejecutarse únicamente en forma SIMPLE, TRIPLE o POR TRES VECES TRES, y seguidas también con la pronunciación de las Tres Palabras Místicas.

Fuente Consultada:

Terrones Benítes, Adolfo & León García González, Alfonso. "El Libro del Aprendiz- Los 33 Temas ..."

Otro Mandil de George Washington





Este mandil fue hecho en Francia y se trata de un regalo hecho por Elkanah Watson y de su socio, M. Cassoul, de Nantes, Francia, al hermano George Washington; ellos fueron agentes confidenciales del gobierno norteamericano en el exterior durante el período revolucionario. Watson, en el libro Men and Times of the Revolution, dice:

"deseando ofrecer un reconocimiento a nuestro querido hermano Washington, contrató, junto con mi amigo M. Cossoul, a unas monjas de los conventos en Nantes para que elaboraran algunos ornamentos masónicos elegantes y les entregó un proyecto para combinar las banderas americana y francesa en el mandil. Su elaboración tuvo un estilo superior y costoso".

Actualmente se encuentra exhibido en un marco sellado en Logia Alexandria Washington No. 22 en Alexandria, Virginia.

Los Landmarks en la Masonería de habla inglesa

Los Landmarks en la Masonería de habla inglesa

Por el R:. H:. José Guzmán Estrada.
Vall:. de Lima, domingo 6 de mayo del 2007 E:. V:.

(…) Que significa en inglés el término “landmark”, lo buscamos en el diccionario Webster, indiscutible autoridad en lexicografía inglesa (“Webster’s New International Dictionary of the English Language-Reference History”):

“1.- Una marca (señal) para designar el límite de tierra; cualquier señal (marca) u objeto fijo (como un monumento de cualquier clase, un cierto árbol, una piedra, una zanja) por el cual los límites de una finca, o de una población, o de otra porción de territorio puedan ser conocidos y preservados”.

“1.- A mark to designate the boundary of land; any mark or fixed object (as a monument of any sort, a marked tree, a stone, a ditch) by which the limits of a farm, a town, or other portion of territory may be known and preserved”.

(…) La primera oportunidad que en el mundo se hizo referencia a los “Landmarks” o “Límites”, aparentemente es en la Biblia en Proverbios 22: 28: “No traspases los linderos antiguos, que pusieron tus padres”.

(…) En el diccionario inglés “Webster” indica que esta acepción “Landmark” aparece en un pasaje bíblico, sacado del Deuteronomio (Libro de la Segunda Ley, y quinto del Pentateuco): “No removerás los lindes (landmarks) de tu prójimo…”.

(…) La primera vez que se utilizo el término “Landmark” históricamente en la Masonería Inglesa fue en las “Regulaciones Generales” – “General Regulations” – de George Payne, publicada en la Constitución de Anderson de 1723. (Véase: Pound, Roscoe. “Masonic Jurisprudence”, pág. 27).

(…) George Payne (G:. M:. en 1720), usa el término “Landmark” en el sentido de que se trata aquel para referirse a las “Viejas Tradiciones Secretas de los Masones Operativos”. (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 28).

(…) En 1775, William Preston en sus “Illustrations of Masonry”, claramente utiliza el término “Landmarks” como sinónimo del “establecimiento de los usos y costumbres de la Masonería”, y en otros pasajes de su Obra, se refiere a ellos como la “Ley Masónica”. (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 30).

(…) La nueva mención de “Landmarks” se realiza en el “Ashe’s Masonic Manual” publicado en 1813; cabe destacar que el “Ashe” era una simple copia de las “Ilustraciones de Preston” (Illustrations of Masonry). (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 31).

(...) En 1819 el Duque de Suffolk, G:. M:. de Inglaterra, ordeno emitir una circular que decía: "Soy de la opinión que es de entera responsabilidad del Maestro de Logia (V:. M:.), observar estrictamente los Landmarks de la Orden y tiene la libertad de hacerlos leer en el mejor lenguaje o los caracteres de la Logia que aquel presida". (Véase: Pound Roscoe. Op. cit. pág. 31).

(...) Una nueva vez que se utiliza el término "Landmarks", fue por el Dr. George Oliver en el sermón dado en la Gran Logia Provincial de Lincolnshire en 1820. En dicho sermón Oliver indica que nuestros "Ancients Landmarks" nos han llegado o venido mediante la tradición oral. (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 31).

(...) En 1846, Oliver publica dos largos volúmenes titulados "Historical Landmarks of Freemasonry". (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 32).

(...) En 1856, ocurre la publicación en "The American Quarterly Review of Freemasonry" (La Revista Trimestral Americana de la Francmasonería en octubre de aquel mismo año, en el volumen II, página 230), del Dr. Albert Gallatin Mackey de sus “twenty-five landmarks” - veinticinco landmarks o linderos. (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 32).

(...) Hasta mediados del siglo XIX, concretamente en 1856, no fueron enumerados y codificados los "Landmarks", lo hizo por primera vez el filósofo y escritor masónico norteamericano del Estado de Carolina del Sur, Albert Gallatin Mackey, bajo el título de "Foundations of Masonic Law" (Fundamentos de la Ley Masónica). (Véase: Gonzáles Ginorio, José. "Las Fuentes del Derecho Masónico". Ediciones de "El Monitor Masónico", México D. F., pág. 21, 1954).

(...) En 1862, Stephen Barton Wilson publica un artículo en el “Freemason’s Magazine” titulado “La Necesidad del Mantenimiento de los Antiguos Landmarks en la Orden” – “The Neccesity of Maintaining the Ancient Landmarks of the Order”. (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 33).

(...) En 1863, Oliver clasifica los "Genuine Landmarks of Freemasonry" en veinte clases. (Véase: Pound, Roscoe. Op. cit. pág. 33).